CONSUMO DE BENZODIACEPINAS EN ADOLESCENTES DE LA ZONA BÁSICA DE SALUD DE ALMERÍA

Rodríguez Porcel, Mª Dolores*, Tortosa Salazar, Verónica**, Rodríguez Martínez, Mª del Mar*** y Sánchez Morales, Mª Nieves****
*, **, *** hospital Torrecárdenas, DUE, **** Diputación de Almería, Psicóloga

PALABRAS CLAVE:
adolescente, automedicación,
educación en salud,
tranquilizantes

INTRODUCCIÓN:
Las benzodiacepinas son sustancias psicoactivas utilizadas para el tratamiento de
diversas enfermedades psiquiátricas. En la actualidad muchos jóvenes las consumen
ya sea junto con otras drogas o sustancias legales (como por ejemplo el alcohol) o
bien para resolver sus problemas emocionales.

OBJETIVO:
El objetivo de este estudio es determinar el consumo de benzodiacepinas en la población
adolescente de la zona básica de salud de Almería y conocer cómo tienen acceso a ellas.

METODOLOGÍA:
Se ha llevado a cabo un estudio descriptivo.
Se seleccionó una muestra aleatoria de 50 jóvenes.
Para la recogida de datos se utilizó una encuesta de elaboración propia, rellenada
por los jóvenes de forma anónima.
El análisis de los datos obtenidos se ha realizado con el programa de análisis
estadístico SPSS 20. 0 utilizando estadísticos de frecuencia y porcentajes.

RESULTADOS:
Sexo encuestados

Consumo benzodiazepinas

34%

Chicos
Chicas

43%
57%

Si
No
66%

Cómo tienen acceso a las benzodiacepinas

60%
50%

53%

40%
30%
29, 40%

20%

17, 60%

10%
0%
Médico

Familiar

Medios propios

· Un 34% de la población consume o ha
consumido benzodiacepinas en algún momento
de su vida.
· En la mayoría de los casos éstas son recetadas
por un médico (53%).
· Los casos de aquellos que las han tomado sin
receta en su mayoría son los familiares quienes
se las proporcionan, un 29. 4%.
· Un 17. 6% consigue las benzodiacepinas por
medios propios, sin necesidad de un adulto o una
receta médica.

CONCLUSIONES:
Por un lado nos parece importante el dato de que un 34% de una población, joven y aparentemente sana, consuma o haya
consumido benzodiacepinas. Visto este dato parece evidente que es necesaria una mayor educación emocional de los
jóvenes a través de la cual se les entrene en técnicas de control de impulsos y emociones, con el fin de evitar recurrir a
tratamientos que, en muchos de los casos, no siguen ningún control por parte de un facultativo. Es importante hacer
hincapié en la facilidad con la que los jóvenes tienen acceso a este tipo de sustancias, probablemente sin conocer el efecto
negativo que pueden tener sobre ellos incluso cuando la mezclan con el consumo de otras sustancias tóxicas como por
ejemplo el alcohol.

BILIOGRAFÍA:
-Caro Figueroa, P. y Carreño Rivero, L. (2012). Consumo de sustancias psicoactivas en menores/jóvenes infractores. IPSE-ds, 5:31-36.
- Capraraa, M. P. , Noel Broggera, M. , Cabrera Argañaa, D. , Esandia, G. , Caballeroa, M. L. , y Alet, M. J. (2012). Benzodiacepinas: Perspectivas sociales y
responsabilidad médica. Rev Hosp Niños Baires, 54(246):166-171.



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