Identificación de conflictos bioéticos en la atención a la salud mental en las unidades de salud mental de adultos de castilla la mancha dependientes del servicio de salud de castilla-la mancha ?sescam-.

RESUMEN

OBJETIVO: Identificar los conflictos bioéticos que surgen en la atención a los trastornos mentales en los pacientes de las USM de adultos del SESCAM. Conocer la actitud, gestión/ actuación de los profesionales ante diferentes situaciones clínicas que pueden dar lugar a la aparición de conflictos bioéticos. DISEÑO: Estudio descriptivo-transversal. ÁMBITO Y SUJETOS DE ESTUDIO: Facultativos -Psiquiatras y Psicólogos Clínicos- que desarrollan su práctica clínica en las USM de adultos de Castilla-La Mancha, dependientes del SESCAM. Por consiguiente, están incluidas todas las Áreas Sanitarias de la Región. METODO: Las variables utilizadas han sido: Filiación (sexo, edad, profesión/ especialidad, años de ejercicio). 11 preguntas de elección múltiple sobre la actuación de los profesionales en diferentes áreas donde se pueden generar conflictos bioéticos. ANÁLISIS: Descriptivo de las características socio-demográficas de los sujetos de estudio. Para las variables cuantitativas se estiman las medidas de centralización y dispersión, para variables cualitativas se estiman las proporciones. Para el análisis y comparación de variables cuantitativas se aplica T-Student y para variable cualitativas Ji-cuadrado. En la comparación de dos o más grupos se aplica ANOVA. Se considera nivel de significación ( p<0,05). Análisis con el programa estadístico SPSS.15. RESULTADOS: El número de profesionales que responden a la encuesta es de 74 de un total estimado de 138, representando el 53,62 % del total, de los cuales 43 son mujeres (58,1%) y 25 hombres (33,8%) - 6 de ellos/as dejan en blanco la casilla sexo-. Responden a la encuesta 40 psiquiatras (54,1 %) y 31 psicólogos clínicos (41,9 %), a lo que hay que sumar un profesional que cuenta con ambas especialidades clínicas, y 2 más que no señalan la especialidad. El grado de respuesta y cumplimentación del cuestionario de actitudes ante los conflictos bioéticos en salud mental es elevado: el 95,6 % de los cuestionarios están cumplimentados en su totalidad, respuesta a las 11 preguntas de que consta la encuesta. Una amplísima mayoría de los profesionales identifica los conflictos bioéticos siempre o generalmente (90,5). El 87,8 % de los encuestados manifiesta evaluar la competencia de los pacientes para la toma de decisiones terapéuticas y mayoritariamente se informa y se negocia con el paciente el tratamiento. Mayoritariamente los profesionales explican al paciente su decisión de ingreso hospitalario (97,2%). Ante el rechazo del ingreso por parte del paciente, el 57,9 % de los profesionales presiona para convencerlo de que es la mejor opción terapéutica, y el 87,7% hace firmar un documento a la familia de rechazo al tratamiento y asunción de responsabilidades. El 17,5 % de los psiquiatras admite prescribir psicofármacos influidos por las presiones de la industria farmacéutica muy frecuentemente o con bastante frecuencia. Los profesionales no se enfrentan a sus pacientes porque estos rechacen el tratamiento, al interpretarlo como el ejercicio de un derecho (45,8%); si bien, tratan de convencerlos para que lo lleven a cabo (54,2%). La contra-transferencia ?matiza? la objetividad expresada en los informes. 1 de cada 4 pacientes de las USM encuentra muchas dificultades a la hora de ejercer su derecho a la libre elección de especialista. El 86% de los profesionales, ?siempre? o ?generalmente? basan los tratamientos que prescriben en la evidencia científica. Las variables identificadas como áreas de conflicto por el mayor número de profesionales son: ?rechazo al tratamiento? (71,2%), ?información? (67,1 %) Hay una mayoría que entiende que las siguientes áreas no son fuente de conflictos: ?consentimiento informado? (91,8 %), Hª clínica (71,2%), ?incapacidades? (68,5%) e ?ingreso? (67,1%). Los profesionales, psiquiatras y psicólogos clínicos, de la Salud Mental en Castilla la Mancha se perciben capacitados para la identificación de los problemas bioéticos, y muestran una actitud muy favorable hacia el desarrollo de la autonomía del paciente de los Servicios de Salud Mental. Tradicionalmente, a lo largo de la historia de la Psiquiatría, esta ha sido un área donde los profesionales han incurrido con frecuencia en sesgos paternalistas, haciendo prevalecer el principio de beneficencia sobre la autonomía del paciente, considerando que el enfermo mental no estaba capacitado para la toma de decisiones terapéuticas. Con el presente estudio podemos concluir que los profesionales son conscientes de que la autonomía del paciente es el límite de la beneficencia, y por tanto, mayoritariamente evalúan su capacidad, informan de los tratamientos, respetan el rechazo del mismo por parte del paciente, incluido el ingreso hospitalario ? si este está capacitado-, respetan la confidencialidad de los datos ?el porcentaje disminuye a la mitad si el paciente no está capacitado-, y se apoyan en la evidencia científica. Las áreas sugeridas, en el cuestionario, donde pueden aparecer conflictos bioéticos, reflejan la realidad clínica, y así lo manifiestan los profesionales al no señalar ninguna otra fuente de conflicto. Es importante destacar que el consentimiento informado no suponga un área de conflicto teniendo en cuenta el sesgo paternalista en la práctica psiquiátrica. Hecho que refleja la evolución producida en la atención a los trastornos mentales. No he encontrado en la bibliografía estudios de campo que se propongan conocer las opiniones de los profesionales y su actitud ante los conflictos bioéticos en la atención a los trastornos mentales en Castilla-La Mancha.