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En los últimos años, comienza a aparecer, dentro del ámbito psiquiátrico un número cada vez más importante de artículos que tratan de relacionar la Teoría del Caos con determinados aspectos clínicos y terapéuticos de la Psiquiatría. Los primeros trabajos sencillamente incorporaban la terminología, la cual resulta muy atractiva para definir algunos comportamientos psicopatológicos, pero los trabajos realizados durante la última década contienen específicos y rigurosos análisis matemáticos de esta teoría. Un paciente psiquiátrico podría considerarse como un sistema dinámico en el cual la alteración psicopatológica sigue una evolución en el tiempo, con lo cual, su diagnóstico podría considerarse equivalente al estado del sistema y el pronóstico a la dinámica del mismo. En este ámbito surge nuestro trabajo, cuyo principal objetivo es extraer la mayor cantidad de información posible de la serie temporal del peso en pacientes diagnosticadas de anorexia nerviosa. Sería muy optimista pensar que procesos tan complejos, como los trastornos alimentarios, pudieran ser descritos completamente usando solamente la variación de peso a lo largo del tiempo. Sin embargo, estas series caracterizan una importante faceta de la enfermedad y su estudio puede llevarnos a obtener información clínicamente útil.
Son estudiadas las series temporales correspondientes al peso diario de 12 pacientes, algunos de ellos con varios ingresos, utilizando medidas estadísticas tradicionales (media, varianza, MSSD...), distribución de frecuencias, modelos ARIMA, análisis espectral, así como las propias de la teoría de caos como la dimensión fractal de los posibles atractores que aparecen en el espacio de fases (utilizando las tres definiciones estándar: dimensión de capacidad, de información y de correlación) y finalmente la "embedding dimension". (2)
Los resultados nos hacen pensar que el comportamiento de estos pacientes respecto al peso y su variación es caótico. La dimensión fractal nos proporciona una medida para caracterizar la evolución del peso, que está directamente relacionada con la gravedad del paciente. Estos modelos, junto con investigaciones sobre las rutas hacia el caos de pacientes de riesgo, y el estudio de otras variables psicológicas pueden conducir a obtener una nueva información que nos lleve a métodos para predecir y tratar los trastornos alimentarios.