PUBLICIDAD-

Prevalencia del Trastorno por Déficit de Atención con y sin Hiperactividad y la Violencia. Reporte Preliminar

Autor/autores: José Francisco Rangel Araiza , Jaime Romero Gonzalez
Fecha Publicación: 17/12/2015
Área temática: .
Tipo de trabajo:  Artículo original

RESUMEN

Se investiga en Ciudad Juárez, Chihuahua, el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDA/H), el cual es una entidad clínica neuropsiquiátrica, que tiene una prevalencia muy alta en la infancia, persiste en el adolescente y aún en el adulto, su etiología es tanto genética, como medioambiental y  psicosocial y se caracteriza por conductas de inatención, impulsividad e hiperactividad en grados variables, afecta además el aprendizaje, las relaciones interpersonales, la estabilidad laboral y emocional, entre otras variables sociales y se asocia a diferentes niveles de agresividad sobre todo en la adolescencia y la adultez, llegando a la criminalidad; tiene alto porcentaje de comorbilidad psiquiátrica entre ellos la farmacodependencia, por todo ello debe considerarse como problema de salud pública y medir estos aspectos del trastorno es el objetivo del estudio.

Palabras clave: attention deficit; hyperactivity; impulsiveness; aggression; violence


VOLVER AL INDICE

Url corta de esta página: http://psiqu.com/1-7140

Contenido completo: Texto generado a partir de PDf original o archivos en html procedentes de compilaciones, puede contener errores de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13.

Artículo original
Prevalencia del Trastorno por Déficit de Atención con y sin
Hiperactividad y la violencia. Reporte preliminar
Prevalence of the Attention Deficit Disorder with and without Hyperactivity and violence. Preliminary report

José Francisco Rangel Araiza1 Jaime Romero Gonzalez2
Resumen
Se investiga en Ciudad Juárez, Chihuahua, el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad
(TDA/H), el cual es una entidad clínica neuropsiquiátrica, que tiene una prevalencia muy alta en
la infancia, persiste en el adolescente y aún en el adulto, su etiología es tanto genética, como
medioambiental y psicosocial y se caracteriza por conductas de inatención, impulsividad e
hiperactividad en grados variables, afecta además el aprendizaje, las relaciones interpersonales,
la estabilidad laboral y emocional, entre otras variables sociales y se asocia a diferentes niveles de
agresividad sobre todo en la adolescencia y la adultez, llegando a la criminalidad; tiene alto
porcentaje de comorbilidad psiquiátrica entre ellos la farmacodependencia, por todo ello debe
considerarse como problema de salud pública y medir estos aspectos del trastorno es el objetivo
del estudio.
Palabras claves: Déficit de atención, Hiperactividad, Impulsividad, Agresión, Violencia
Abstract
We investigate in Ciudad Juarez, Chihuahua Disorder Attention Deficit Hyperactivity Disorder
(AD / HD), which is a neuropsychiatric clinical entity, which has a very high prevalence in
childhood, in adolescence and persists even in the adult, its etiology is both genetic,
environmental and psychosocial behavior is characterized by inattention, impulsivity and
hyperactivity in varying degrees, also affects learning, interpersonal relationships, work and
emotional stability, among other social variables associated with different levels especially
aggressive in adolescence and adulthood, reaching crime; has high percentage of psychiatric
comorbidity among them drug dependency, all this must be seen as a public health problem and
measure these aspects of the disorder is the aim of the study.
Keywords: Attention Deficit, Hyperactivity, Impulsiveness, Aggression, Violence.

Recibido: 18/02/2015 ­ Aceptado: 01/04/2015 ­ Publicado: 07/09/2015

* Correspondencia: drjfrangel2010@hotmail.com
1 El Colegio de Chihuahua. Médico, Especialista en Psiquiatría y en Perfiles Criminales, Maestría en Docencia
Biomédica y Estudiante del Doctorado en Investigación.
2 Profesor investigador de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez A.C.

Psiquiatria.com ­ ISSN: 1137-3148
© 2015 Rangel Araiza JF, Romero González J

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Introducción
A modo de definición: "El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDA/H) es una
patología neuro-psiquiátrica con una elevada prevalencia, tanto en la infancia como en la edad
adulta, que provoca importantes alteraciones en diferentes áreas vitales".(1). El diagnóstico es
clínico, en base a tres comportamientos principales: Inatención, Hiperactividad e Impulsividad,
esto mismo permite identificar tres subtipos, el Predominantemente inatento, el
Predominantemente Hiperactivo-Impulsivo y el Combinado (2). En el afán por detectar la
prevalencia del TDA/H en Ciudad Juárez, Chih. México y su posible relación con la violencia, tras
revisar la literatura nacional e internacional y no encontrar localmente algo al respecto se planea
el presente estudio. En las publicaciones nacionales se dan cifras que mencionan que la
prevalencia va del 5 hasta el 12% de niños en edad escolar y variables desde 2.5 hasta de 20% en
población general, aunque el consenso es de entre 3 y 9%(3) y de hasta 30% (4) en población
psiquiátrica infantil; en México se detectó 26.8% (5). El TDAH, habitualmente diagnosticado en
edad escolar, parece incrementarse con las exigencias académicas crecientes con los años
escolares transcurridos, se continúa en la adolescencia y aun en la adultez (6). En relación al
género es más común en niños que niñas con cifras de 4-6 por cada niña afectada aunque parece
incrementarse (7). Se asocian al TDAH un sinfín de sintomatología tales como trastornos en el
aprendizaje y el rendimiento académico (8,9), agresividad y violencia y propensión a los
accidentes (10, 11), fracasos en las interacciones sociales tanto intra como extrafamiliares (12), y
se ha detectado comorbilidad psiquiátrica entre las que se incluyen: trastornos del estado de
ánimo con ansiedad y depresión, uso y abuso de tabaco, alcohol, drogas, ludopatía, tics; en el área
emocional, hay baja autoestima, poca habilidad para las relaciones sociales, sentimientos de
fracaso y culpa y gran problemática en el entorno familiar (13,14). Y en la adultez bajo rendimiento
académico, abandono de estudios, empleos de baja calidad, despidos y rotación, fracaso en las
relaciones de pareja y sociales, criminalidad y trastornos de la personalidad (15,16).
En su etiología se invocan factores genéticos observándose con frecuencia la presencia del
trastorno en la descendencia de quienes tienen el TDA/H, involucrándose genes ­entre otroscomo los DAT1, DRD4, DRD5, 5HTT, HTR1B o SNAP25(17). Así, se habla de la presencia del alelo
de siete repeticiones del DRD4 que es el gen que codifica el receptor D4 de dopamina(18), también
se halló asociación entre el genotipo COMT Val Met y conductas antisociales extremas así como
alteraciones de la función ejecutiva (19). Un estudio muestra mutaciones que afectan a las enzimas
hidrolasas de triptófano TH1 y TH2 que incrementan el riesgo de padecer TDA/H (20). Se
continua investigando intensamente en genética y biología molecular, para encontrar
endofenotipos y también en las variantes comunes y raras y pareciera haber diferencia entre el
TDA/H (cADH/D) infantil y el TDA/H (aADH/D) adulto(21, 22). Se mencionan también en la
etiología factores como los metales pesados (23,24,25);gestacionales como tabaquismo materno,
bajo peso al nacer y prematurez y factores psicosociales asociados como medio socioeconómico,
nutricionales, etc. (26,27). Se han visto en estudios de gabinete en particular EEG (28,29,30), e
imagenología, alteración, ya funcional ya estructural, en áreas del cerebro como lóbulo frontal,
cuerpo calloso, cerebelo (31,32,33,34,35,36). En lo referente a la violencia el niño con TDA/H de
los subtipos predominantemente hiperactivo-impulsivo y el combinado tiende a ser agresivo,
destructivo y maltrata animales, tiene datos neurológicos disfuncionales leves y es lábil emocional
todo ello lo predispone a asociarse a otros Trastornos de la conducta infantil; la mitad de los niños
con TDA/H desarrollan Trastornos de la Conducta (37,38 ,39 ,40).
En 2003 Swann definió agresión como "toda conducta dirigida a destruir a sí mismo, a otros u
objetos", y en 2002 Volavka usó "conducta destructiva" como aquella que incluiría "toda conducta
cuyo resultado es una lesión total o parcial a la integridad física o psicológica de una persona u
objeto" (41).

2

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

En lo niños menores que cursan la educación primaria, aparece el Trastorno Oposicionista
Desafiante (TOD), en inglés Oppositional Defiant Disorder (ODD), con comportamientos como
ser tercos, discutir por todo, no obedecer órdenes, retardo en cumplir con las tareas o no hacerlo,
hacer rabietas; los niños estudiantes de primaria de mayor edad cometen bullying y algunas
conductas destructivas y desafían, retando a los adultos; en los que cursan educación secundaria,
aparece, o bien es una progresión, el Trastorno de la conducta CD en inglés Conduct Disorder
(CD) con comportamientos agresivos y antisociales como desafiar provocativamente a todo tipo
de adulto con autoridad, gritando o insultando; fuman, beben, destruyen propiedad pública o
privada, provocan o participan en peleas, agresiones verbales y físicas, robo de autos y
farmacodependencia; como característica de la agresión-violencia en estos niños TDA/H es que
su agresión-violencia es del tipo reactivo, mientras que en el Trastorno Negativista Desafiante y
en el Trastorno Disocial la expresión de la agresión-violencia es del tipo proactivo pueden usar
armas y llegar al homicidio(42, 43,44, 45, 46, 47, 48,49,50). Además de la violencia, se
investigarán otra serie de características comunes en el TDA/H como son los datos de disfunción
cerebral mínima, la comorbilidad y otros sentimientos y conductas que presentan.
Material y métodos
Se programa un estudio piloto para afinar los instrumentos y sólo se aplicará a profesores y
alumnos, en una segunda fase de la investigación se incluirá a los padres. Se diseñan siete escalas,
usando como base las preguntas del DSM-IV TR para medir: I Déficit de atención, 9 ítems y con
escala tipo Likert que mide el peso específico de cada respuesta, así 1=nunca, 2=Rara vez,
3=Ocasionalmente, 4=Frecuentemente y 5=Muy frecuentemente o siempre. Seis o más
respuestas positivas significan Déficit de atención.
II. Escala de Hiperactividad 6 ítems y III Escala de hiperactividad 3 ítems, la suma de ambas si
son positivas seis o más significa Hiperactividad. Se mide el peso específico con la escala Likert.
IV Escala para medir Daño Cerebral Mínimo a través de preguntas que lo configuran como sería:
Intolerancia a luz muy brillante, olores penetrantes, labilidad emocional, torpeza al caminar y
chocar con objetos del entorno, torpeza deportiva, etc. 24 ítems. Escala Likert asociada. La base
de normalidad es cero.
V. Tomando como base las preguntas de ODD y CD del DSM-IV TR, se elabora escala de 61
preguntas para evaluar agresividad-violencia. Escala Likert asociada. La base de normalidad es
cero.
VI. Comorbilidad Psiquiátrica. Escala de 26 preguntas acerca de patología psiquiátrica que
frecuentemente se liga a TDA/H. Escala Likert complementaria. La base de normalidad es cero.
VII. Escala de otros sentimientos y conductas que se describen en la literatura tales como baja
autoestima, sensación de poco logro, fallas en relaciones interpersonales, etc. Escala Likert de
cinco puntos para medir intensidad. La base de normalidad es cero. (Ver anexos).
Se solicitan los permisos respectivos a la autoridad educativa y se seleccionan dos escuelas de
educación primaria en Ciudad Juárez, Chih., una de ellas de nivel socioeconómico bajo y alto nivel
de violencia y otra de nivel socioeconómico alto y bajo nivel de violencia. En cada escuela se pide
autorización para el estudio a los padres y de cada salón de clase de primero a sexto, se seleccionan
de manera aleatoria, diez niños a los que se les aplicaran las escalas. El maestro llena las escalas
de todos los niños del estudio. Los niños de cuarto, quinto y sexto, también llenan sus propias
escalas.

3

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Se vacían los datos en hoja tipo Excel y se procesa estadísticamente para lo cual se validó por
medio de la herramienta estadística del coeficiente alfa de Cronbach, obteniéndose una
confiabilidad de .95 bajo el formato de una escala tipo Likert de frecuencia.
Resultados
A las respuestas dadas a las preguntas estructuradas y cerradas, les fueron asignados valores de
acuerdo a la siguiente escala conceptual: 1=Nunca, 2=Rara vez, 3= Ocasionalmente, 4=
Frecuentemente, 4=Casi siempre. Se detectaron tres tendencias, una positiva (determinada pro
al suma de frecuencias en las respuestas de frecuentemente y siempre, donde son igual o más del
50% de los evaluados en las que concuerdan), la cual determinamos en calidad como aceptable;
una neutra (con la suma de frecuencias de respuestas como ocasionalmente)donde la calidad se
considera indefinida claramente y una negativa (determinada por la suma de las frecuencias de
respuestas como nunca o rara vez, donde son igual o más del 50% los evaluados que concuerdan)
la cual determinamos como de calidad deficiente o mal. En el diseño del instrumento se hace la
observación y el hallazgo inesperado de que en la tendencia negativa influyen las preguntas que
se presentan hechas en forma negativa y al cambiar las preguntas de la forma negativa a la
positiva, la tendencia se hizo positiva y sobre todo la calidad se facilita, se hace más objetiva,
persistiendo la confiabilidad en dicho instrumento del .95 o lo que es lo mismo un 95% de
confiabilidad. LA fórmula aplicada fue la siguiente:


Donde:

2
Si
K

1

2
K 1
S

T


K= El número de ítems
Si2= Sumatoria de Varianzas de los Ítems
ST2= Varianza de la suma de los Ítems
a= Coeficiente de Alfa de Cronbach
el Alfa es por tanto un coeficiente de correlación al cuadrado que, a grandes rasgos, mide la
homogeneidad de las preguntas promediando todas las correlaciones entre todos los ítems para
ver que, efectivamente, se parecen. Su interpretación será que, cuanto más se acerque el índice al
extremo 1, mejor es la fiabilidad, considerando una fiabilidad respetable a partir de 0.80.
Dicho instrumento se aplicó a 120 estudiantes poniéndose énfasis en el objetivo específico que fue
el de analizar la prevalencia del Trastorno por Déficit de Atención, la hiperactividad-impulsividad,
el daño cerebral mínimo, la agresividad-violencia, la comorbilidad y otras conductas y
sentimientos asociados. El análisis de las respuestas en este estudio, revelaron hallazgos
importantes, que para poderlos describir tomaremos el orden de acuerdo a la medición que cada
escala determinó.
En las escalas de Déficit de atención o inatención (Anexo 1) y las de Hiperactividad e impulsividad
(anexo 2), se documentan juntas y comparativas entre las dos escuelas estudiadas, una de nivel
socioeconómico bajo y alta violencia y la otra de nivel socioeconómico alto y baja violencia como
se observa en el cuadro 1 (Ver cuadro 1).

4

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Cuadro 1. Prevalencia por grado escolar y por escuela, así como por subtipos del TDA/H.

ANALISIS RESULTADOS PLAN PILOTO 2013. EVALUACION DEL MAESTRO.
ESC. NIVEL SOCIOECONOMICO BAJO ALTA VIOLENCIA

ESC NIVEL SOCIOECONOMICO ALTO BAJA VIOLENCIA

GRADO
1o. 6, 12%
2o. 10,20%
3o. 7,14%
4o. 6,12%
5o. 7,14
6o.10, 20%
Prom. 7.6, 15%

GRADO
1o. 9=18%
2o. 10=20%
3o. 6=12%
4o. 8=16%
5o. 7=14
6o. 4=8%
7.3, 13%

>IN
5 (10%)
0 (0%)
4 (8%)
4 (8%)
2 (4%)
1 (2%)
2.6, 5.3%

>HK
0 (0%)
2 (4%)
0 (0%)
1 (2%)
2 (4%)
3 (6%)
1.3, 2.6%

MIXTO
1 (2%)
8 (16%)
3(6%)
1 (2%)
3 (6%)
6 (12%)
3.6, 7.3%

>IN
2 (4%)
3 (6%)
1 (2%)
0 (0%)
4 (8%)
1 (2%)
1.8, 3.6%

>HK
0 (0%)
0 (0%)
2 (4%)
0 (0%)
0 (0%)
0 (0%)
.3, .6%

MIXTO
7 (14%)
7 (14%)
3 (6%)
8 (16%)
3 (6%)
3 (6%)
5.1, 10%

El porcentaje de TDA con o sin hiperactividad, es alto, y se encontró en 90 alumnos, el promedio
de los seis grupos de cada escuela, es del 14% cifra un poco por encima de lo reportado en la
literatura.
Se aprecian también los porcentajes y promedios de cada subtipo del TDA/H, siendo más notorio
el combinado en ambas escuelas; así, se encuentran: Predominantemente inatento 30%, el
predominantemente hiperactivo con 11% y el mixto con promedio de 59%. (Ver cuadros 2 Y 3).

Cuadro 2. Prevalencia por subtipos en porcentaje.
Esc. Nivel Socioec. bajo.
8%
6%
4%
2%
0%
>IN

>HK

MIXTO

ESC NIVEL SOCIOEC BAJO

Cuadro 3. Prevalencia por subtipos en porcentaje.
Esc. Nivel Socioec. alto.
10%
5%
0%
>IN

>HK

MIXTO

ESC NIVEL SOCIOEC. ALTO

5

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Cuadro 4. Prevalencia por sexo y subtipos en ambas escuelas.
ESC. NIVEL SOCIOECONOMICO BAJO
>IN


>HK


ESC. NIVEL SOCIOECONOMICO ALTO

MIXTO







>IN


>HK







MIXTO






1o.

2

3

0

0

1

0

2

0

0

0

6

1

2o.

0

0

0

2

5

3

2

1

0

0

6

1

3o.

2

2

0

0

2

1

1

0

2

0

3

0

4o.

2

2

1

0

1

0

0

0

0

0

4

4

5o.

1

1

2

0

1

2

1

3

0

0

2

1

6o.

1

0

2

1

4

2

0

1

0

0

2

1

No.

8

8

5

3

14

8

6

5

2

0

23

8

=58

=32

Proporción =1.8:1

En cuanto al sexo la prevalencia es: 1.8 niños por cada niña. En el predominantemente inatento
hubo el mismo número de niños y de niñas; en el predominantemente hiperactivo siete niños y
tres niñas y en el mixto hubo mayoría de niños 37 vs 16. En cuanto a la proporción entre las
escuelas, no hubo diferencia (Ver cuadro 1).
En la escala 4 (Anexo 3) sobre preguntas relativas a Daño Cerebral Mínimo, en la escuela de nivel
socioeconómico bajo, dieron respuestas con puntaje promedio de 11 de 24 respuestas posibles y
puntaje de 21 de 96 posibles, arbitrariamente consideradas como mínimo entre 0 y 8, y entre 9 y
18 valoradas como regular, de 19 a 27 moderado y severo de 28 a 36. La base es cero. Fueron más
altas las respuestas y puntajes en la escuela de nivel socioeconómico alto. Es importante hacer
notar que el 27% de las respuestas a las preguntas eran ignoradas por los maestros, -lo que podría
aumentar el posible valor diagnóstico de la prueba- esta falla se podría subsanar con la evaluación
de los padres que se hará en la investigación.
La escala 5 sobre agresividad (anexo 4), en ambas escuelas, de 61 preguntas y peso total de hasta
244 puntos, arbitrariamente se asignan valores de 0 a 15 para mínima, 16 a 30 para regular 31 a
45 para moderada y severa de 46 a 61 puntos. Los maestros ignoraron la respuesta al 31% de las
preguntas. En puntaje tuvieron en promedio 13% (8 de 61) y peso específico de 5%. No se confirma
haya agresividad-violencia detectable, con las variables del desconocimiento de conductas de ese
tipo por el maestro en 1 de cada 3 reactivos y la falta de la evaluación paterna que podrían o no
modificar esto.
La escala 6 Comorbilidad Psiquiátrica tiene 26 reactivos como puntaje y como valores de peso
específico arbitrarios calificados como de mínimo del 0-6, regular de 7-12, moderado de 13-19 y
de 20-26 severo y en general manejó puntajes bajos tanto en respuestas como en intensidad y en
los grupos donde hubo mayor número de respuestas dadas por los profesores fue en segundo año
de ambas escuelas, sin ser significativos. De los niños del 4º. al 6º. grado que se autoevaluaron,
tampoco fue significativo ni el número de respuestas ni el puntaje de los mismos. Lo único notable
es que los profesores ignoraron la respuesta al 46% de las preguntas. La base es cero.
La séptima escala: Otros sentimientos y Conductas (anexo 6), en donde hay 25 reactivos y pesos
arbitrarios de 0 a6 mínimo, regular de 7 a 12, moderado de 13 a 18 y severo de 19 a 25, aquí los
profesores desconocen en promedio el 60% de las respuestas, y sus puntajes son en promedio del
25% y el peso específico del orden de 5%, datos encontrados en mayor número en la escuela de

6

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

nivel socioeconómico alto, lo que podría implicar mayor conocimiento e interacción de los todos
los profesores de esa escuela con sus alumnos. La base es cero.
Discusión
Revisando los criterios del DSM-IV TR para diagnosticar TDA/H que son los mismos usados en
la presente investigación, por arriba del 70%, mientras que en la literatura hay cifras de hasta 10%
(5),12% (l,52), 16% (53,54), 17% (7,55), 20% (56), 29% (57),33% (4) y 35% (58) entre población
general y población escolar de primaria. En población psiquiátrica infantil la prevalencia es del
orden del 31 al 50% (50, 59, 60). Sin embargo en la mayor parte de los autores revisados (ver
bibliografía), las cifras van del 3 al 9%.
En cuanto al Déficit de atención, los criterios diagnósticos son los siguientes: /1.A menudo no
presta la debida atención a los detalles o por descuido, comete errores en las tareas de la escuela,
el trabajo y otras actividades./2. A menudo tiene problemas para concentrarse en las tareas o en
los juegos./3. A menudo parece que no escucha cuando se le habla directamente./4. A menudo no
sigue las instrucciones y no termina las tareas de la escuela, los quehaceres o cualquier otra
responsabilidad en el trabajo (por conducta oposicionista o por no entender las
instrucciones)./5.A menudo le cuesta organizar actividades./6.A menudo evita, rechaza o se niega
a hacer cosas que requieren mucho esfuerzo mental por mucho tiempo (como tareas escolares o
quehaceres de la casa). /7. A menudo pierde las cosas que necesita para hacer ciertas tareas o
actividades (p. ej. juguetes, trabajos escolares, lápices, libros, o herramientas)./8.Se distrae con
frecuencia./9.Tiende a ser olvidadizo en la vida diaria (51) y son los mismos que se encuentran en
la escala diseñada para medir inatención en el presente trabajo, y la prevalencia encontrada es en
la escuela de nivel socioeconómico bajo, del 64% y en la de nivel socioeconómico alto, del 36%
(cuadro 1) con 27 alumnos inatentos para un 30% del total; y por sexo, en la escuela de nivel
socioeconómico bajo, la proporción fue de 1.5 niños por 1 niña en tanto que en la otra escuela, la
proporción fue de 2.4:1 el promedio de ambas escuelas es de 2 niños por cada niña. La literatura
reporta autores que no encuentran diferencia entre los subtipos (60,61) y hay quienes detectan
la inatención como el subtipo más frecuente (7, 53,62).
En las escalas 2 y 3 sobre hiperactividad-impulsividad, los criterios del DSM IV TR y del presente
estudio son los siguientes: Hiperactividad.1.A menudo no deja de mover las manos ni los pies
mientras está sentado./ 2.A menudo se levanta de la silla cuando se quiere que permanezca
sentado./3.A menudo corre o trepa en lugares y en momentos inoportunos (es posible que los
adultos y adolescentes se sientan muy inquietos)./4.A menudo, tiene problemas para jugar o
disfrutar tranquilamente de las actividades de recreación./5.A menudo, "está en constante
movimiento" o parece que tuviera "un motor en los pies"./6.A menudo habla demasiado.
Impulsividad.1.A menudo suelta una respuesta sin haber oído antes toda la pregunta./2.A
menudo le cuesta esperar su turno./3.A menudo interrumpe al que esté hablando o se entromete,
por ejemplo, en una conversación o juego.
Y se obtuvieron los siguientes datos: De los 90 alumnos con TDA/H, 63 son de este grupo, 10
fueron del tipo predominantemente hiperactivo-impulsivo con un 11% y el tipo mixto o
combinado totalizó 53 alumnos para ser el más frecuente con 59%. Se reporta también en la
literatura como el tipo más frecuente al combinado (63, 64,65).
En cuanto a la escala del Daño Cerebral Mínimo, se detectaron en promedio en la escuela de
nivel socioeconómico bajo, en promedio 37% de respuestas positivas (vs base 0 o normalidad) y
con puntaje específico del 20%, en la escuela de nivel socioeconómico alto el porcentaje de
respuestas fue del 39% y el puntaje del 27%, pudiendo explicarse este incremento en base a que

7

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

hay mayor contacto con los padres de los niños sobre información respecto a ellos. En la literatura
se mencionan como datos de disfunción cerebral, entre otros, la urgencia urinaria y la enuresis
(66, 67) déficit inhibitorio en los movimientos oculares (68).
De los 93 niños con TDA/H evaluados con la escala agresividad siete se califican con cero y el
resto dan puntaje en 13% de los casos y el peso específico en promedio es del 5%. Cabe hacer notar
que los maestros desconocen el 31 % de las preguntas en cuanto a conductas de agresividad en
sus alumnos. De los estudiantes de 4º. a 6º. autoevaluados los porcentajes en puntaje y peso
específico fueron de 36% y 12% respectivamente y comparando la evaluación de los maestros y
los alumnos no hay diferencia significativa. La escuela de nivel socioeconómico alto tuvo más
respuestas lo que no necesariamente significa más agresividad sino más conocimiento por los
maestros acerca de sus alumnos. Esto pudiera ponderarse adecuadamente con la evaluación de
los padres. Los niños con predominio de inatención prácticamente dan nula o mínima respuesta
agresiva. Hubo cinco alumnos, varones, del tipo mixto con los valores más altos encontrados: de
entre 16 y 30 respuestas (de 61) y peso específico del 26 al 50% (de 244) y en los cinco hubo
preguntas no contestadas por el maestro por desconocerlas, lo cual es un sesgo. Revisando las
autoevaluaciones de estos alumnos ellos tienden a disminuir el número de respuestas aunque las
contestan todas.
En la literatura se mencionan conductas agresivas y destructivas de los niños con TDA/H (37,69)
y hay muchos artículos sobre TOD y/o TD asociados (13,39,44,45,46,70), sin embargo no hay una
sistematización sobre las conductas más comunes o específicas adscriptibles al TDA/H y que
puedan ser sistemáticamente tomadas en cuenta durante la evaluación del mismo, si bien hay
escalas sobre agresividad que se aplican en los estudios (71,72,73). Es común la autoagresividad
inconsciente (propensión a los accidentes)(74)y hasta el autolesionarse (cortarse
propositivamente) (69), e intentos suicidas)(74) que pudieran ser mediados tanto por la
impulsividad (10,75,76) como por la comorbilidad: ansiedad, depresión, abuso de alcohol o de
drogas (77,78).
Con respecto a la comorbilidad esta va del 50 al 70% en los reportes de las investigaciones
(2,45,77,78) en el presente estudio, se encuentran muy escasas respuestas y de puntaje bajo,
llamando la atención que la mayor parte de las respuestas no se contestan por ignorarlas los
maestros.
La escala siete, en la que se miden Otras conductas y sentimientos, es un área descrita en muchos
trabajos de investigación, pero no sistematizada para ser parte de la evaluación de todo afectado
por TDA/H tales como sensación de fracaso, de poco logro general, de ser y sentirse diferente, de
no encajar socialmente, baja autoestima, que a pesar del gran esfuerzo aplicado en la tarea es poco
lo alcanzado, el rechazo y ostracismo social, el frecuente aburrimiento, tendencia a la futilidad,
todo ello provoca gran malestar emocional y social, incluso con los familiares y amigos cercanos,
que detectado permitiría la canalización a manejo psicológico temprano y aliviar en parte el gran
peso que lleva el individuo con TDA/H (79,80,81). En nuestro estudio tanto el puntaje como el
peso específico son bajos.
En las escalas de Daño cerebral mínimo, agresividad, comorbilidad y otros sentimientos y
conductas, hay puntajes variables y peso específico variable, lo que indica que deberán medirse
con mayor acuciosidad y que las respuestas de los padres a los reactivos permitirán valorar
adecuadamente estas mediciones y tomarlas en cuenta en forma sistemática en el futuro en el
diagnóstico de un niño ­o joven o adulto-

8

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Conclusiones
Este reporte preliminar del estudio piloto muestra mayor prevalencia en Ciudad Juárez que en
otros enclaves del entorno nacional, pero que estudios semejantes podrán aclarar esto. De las
escalas de medición de Daño Cerebral Mínimo, Agresividad, Comorbilidad y Otros sentimientos
y conductas, cuyas respuestas fueron en general bajas, pero no nulas, han de compararse con la
aplicación de las mismas a los padres quienes tienen más información vivencial con sus hijos y
entonces podrán contrastarse los resultados.

9

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Anexos
Anexo 1

I

Déficit de Atención.
Niños de Primaria.

Nunca Muy A
Seguido Casi
Rara veces
Siempre
Vez
0
1
2
3
4

1 No presta atención suficiente a los
detalles y comete errores en las tareas
o trabajos escolares u otras labores.
2 Presenta dificultad para mantener la
atención en los trabajos escolares que
son sucios, descuidados, hechos sin
pensar, no mantiene la atención en los
juegos.
3 Parece no oír cuando se les habla, aún
de frente y mirándolo a los ojos, como
si su mente estuviera en blanco o en
otro lugar.
4 Se les dificulta la lectura comprensiva
y retentiva y no siguen las órdenes o
instrucciones de los profesores o
padres y no termina tareas escolares u
otros encargos..
5 Tiene dificultad para organizar tareas
o actividades comunes del hogar, la
escuela o del juego.
6 No le gustan las tareas que exigen
esfuerzo mental o dedicación personal
sostenida.
7 Es mal organizado, sus útiles y cosas
personales están tirados, sucios,
maltratados y pierde útiles escolares,
juguetes, dinero, herramientas, cosas.
8 Se distrae fácilmente por cualquier
cosa o ruido irrelevante e interrumpe
su trabajo por eso.
9 Es descuidado en las actividades
diarias, en su persona, cosas,
relaciones interpersonales, etc.

10

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Anexo 2

II

Hiperactividad.
Niños de Primaria.

Nunca Muy A
Seguido Casi
rara Veces
siempre
vez
0
1
2
3
4

1

Sentado se mueve en exceso, se
retuerce, mueve manos y pies,
zapatea.
2 No permanece sentado cuando se
espera lo haga (clase, iglesia, cine,
etc.).
3 Salta, corre, brinca en situaciones
que resulta incorrecto hacerlo (cine,
clase, iglesia, espectáculo, calle, etc.)
4 Experimenta dificultades para jugar
tranquilo o para relajarse y
mantenerse ociosamente quieto.
5 Pareciera estar "con un motor
interno" en movimiento permanente,
se levanta de su lugar, de la mesa al
comer, de la TV, le cambia de canal,
hacen varias cosas a la vez. Son una
molestia constante.
6 Habla excesivamente y distrae a los
demás cuando debiera estar callado y
tranquilo.
III Impulsividad.
Nunca Muy A
Niños de Primaria.
rara veces
vez
0
1
2
7 Responde rápidamente antes de que
hayan terminado de hacerle la
pregunta
8 Tiene dificultad para esperar su turno
en la fila, la cola, el juego; anda
siempre apurado y llegando tarde.
9 Interrumpe o se inmiscuye en las
conversaciones o asuntos de los
demás; molesta a quién esté cerca; no
mide las consecuencias de lo que
dice o hace; temerario, no mide el
peligro
y
sufre
accidentes
frecuentemente.

Seguido Casi
siempre
3

4

ANEXO 3 Anexo 2

11

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Anexo 3

IV Daño cerebral mínimo.
Niños de Primaria.
1
2
3
4

5

6

7

8

9

10
11

12
13
14
15

Nunca Rara Ocasional Seguido Casi
vez mente
siempre

Se orina y moja la cama después
de los 5 años de edad.
Se
encoleriza
fácilmente,
presentando ataques de rabia.
En los berrinches se pone
"morado" y se desmaya.
Ante contratiempos o enojos por
coraje: arroja, golpea o destruye
lo que esté a su alrededor.
Enojado, se golpea con los puños
o golpea la pared o las cosas con
los puños o los pies o con la
cabeza.
Torpe, al ir caminando se golpea
involuntariamente contra los
muebles, puertas o personas al
pasar junto a ellos.
Tiene dificultad en la capacidad
visual y motora y por ello es
inepto en los deportes (no le pega
a la pelota con el bat, no encesta
en el aro, no mete goles).
Siente necesidad imperiosa de
tocar las cosas que están a su
alrededor.
Muestra intolerancia a los olores
fuertes, penetrantes (drenaje,
perfumes).
Le desagrada la luz intensa o
muy brillante.
Le molestan los sonidos intensos
(bocinas)
o
sonidos
desagradables como el rechinar
de uñas en metales o de metales
entre sí.
Reacciona repentinamente ante
estímulos reales o imaginarios.
Es muy temperamental.
Es dado a los berrinches
exhibicionistas.
Es sentimental.

12

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

16 Cuando ve el sufrimiento de
otros, llora, como al ver
películas.
17 Grita, gruñe, hace sonidos con la
nariz, o guturaliza.
18 Tiene poca habilidad para hacer
trabajos escritos.
19 Escribe con muchas faltas de
ortografía.
20 Tiene fea letra.
21 No sabe dibujar, aún copiando el
modelo.
22 Todo lo anterior empeora si está
nervioso o deprimido.
23 Cuando está bajo presión,
disminuye el rendimiento en las
tareas escolares o domésticas.
24 Aunque lo intente, no logra
controlarse.
Anexo 4

V

Agresividad.
Niños de primaria.

1

¿Tortura, lastima, maltrata o ha
matado animales o mascotas?
¿Le gusta jugar rudo, pesado, o a
pedradas, con resortera, con honda,
con rifle de municiones o de postas,
con cuchillos, navajas, arco, flechas,
lanzas, espadas?
¿Es abusivo con los demás,
insultándolos,
apodándolos,
burlándose, haciéndolos sentirse
mal?
¿Tiende a causar problemas o
conflictos?
¿Es peleonero, le gusta comenzar
discusiones o pleitos nomás de puro
gusto?
¿Intimida o amenaza a otros?
¿La amenaza es de palabras?
¿Amenaza con armas?
¿Armas blancas (cuchillos, navajas,
dagas, manoplas de fierro, otros)?

Nunca Muy A
Seguido Casi
Rara Veces
siempre
Vez
0

2

3

4
5

6
7
8
9

1

2

3

4

13

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

10 ¿Armas de fuego?
11 ¿Ha golpeado físicamente o herido a
alguien?
12 ¿En la escuela agrede o molesta a
otros compañeros (bullying)?
13 ¿Agrede en pandilla?
14 ¿Ha pedido o exigido dinero o cosas
a
otros para no dañarlos físicamente o
a sus familiares o en sus
propiedades?
15 ¿Ha destruido o roto vidrios, cosas,
casas, carros u otras propiedades de
otras personas?
16 ¿Le gusta jugar con lumbre, cerillos,
encendedores, hacer fogatas, quemar
llantas?
17 ¿Prende fuego o juega con lumbre
dentro de la casa?
18 ¿Ha quemado o incendiado cosas,
muebles, propiedades de otras
personas?
19 ¿Ha
quemado
o
incendiado
propiedades públicas (escuelas,
comercios,
oficinas,
parques,
camiones, etc.?
20 ¿Roba o ha robado dinero o cosas de
la casa o de los padres o parientes?
21 ¿Ha tomado dinero en efectivo u
objetos ajenos?
22 ¿Los robos los ha hecho Usted sólo?
23 ¿Robó en compañía de otros?
24 ¿El robo fue a mano armada?
25 ¿Lo robado fue en tiendas,
comercios, fábricas, otros lugares?
26 ¿Miente usted?
27 ¿Miente para justificarse, para que
no lo regañen ni castiguen?
28 ¿Miente para echar la culpar a otros?
29 ¿Es miembro de un grupo o pandilla?
30 ¿Lo obligaron a ser miembro de la
pandilla?
31 ¿Falta seguido a la escuela'
32 ¿Se escapa de la escuela o de la casa
de sus padres?
33 ¿Hace bromas pesadas'

14

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

34 ¿Ha tenido tocamientos, manoseos,
juegos, besos sexuales con una
pareja (amiga, vecina, novia,
familiar, compañera, otra?
35 ¿Ha tenido tocamientos, juegos,
besos sexuales con una persona del
mismo sexo (amiga, vecina, novia,
familiar, compañera, otra?
36 ¿Ha obligado a esa pareja a tener
actividad sexual con Usted?
37 ¿Lo han obligado a juegos sexuales a
Usted?
38 ¿Se comporta con arrogancia?
39 ¿Es irrespetuoso con los padres,
maestros, adultos, policías, ministros
religiosos, personas mayores?
40 ¿Ha tenido problemas con la
autoridad: maestros, padres, policía,
entrenadores, etc.?
41 ¿Acepta de mala gana las
indicaciones del maestro, los padres,
otros adultos?
42 ¿Desobedece lo que le ordenan?
43 ¿Contesta o retoba cuando le llaman
la atención, le reprenden o le
castigan por su mala conducta?
44 ¿Culpa a otros por sus errores o por
no haber hecho lo que le
correspondía hacer?
45 ¿Le pegan, maltratan, humillan, no
cuidan, no alimentan, no le dan
dinero en su familia?
46 ¿Siente deseos de lastimar o de matar
a alguien?
47 ¿Es negativo, otros le dicen que es
negativo o lo critican por ser
negativo, malo, rencoroso y
vengativo?
48 ¿Su agresividad le causa problemas?
49 ¿Cree Usted que la agresión que hizo
a algunas personas, se lo merecían?
50 ¿Se le dificulta entender las
necesidades, sentimientos o intereses
de los demás?
51 ¿No tiene sentimientos de culpa ni
remordimiento por sus conductas
agresivas?

15

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

52 No le importan ni el dolor ajeno ni
los sentimientos de los demás.
53 No le importa salir herido con tal de
lastimar a otros.
54 No siente compasión por nadie.
55 ¿Tiene discusiones con los adultos?
56 Se niega a cumplir las demandas de
los adultos.
57 ¿Se siente molestado por los demás?.
58 ¿Usted
molesta
y
provoca
deliberadamente a los demás?.
59 ¿Frecuentemente está enojado y
fácilmente se torna iracundo?.
60 ¿Ha sido detenido por la policía?
61 ¿A causa de su conducta ha estado en
la
cárcel, internados, Tribunal para
Menores, DIF u otra institución?
Anexo 5

VI. Co-morbilidad Psiquiátrica.
Niños de Primaria.

1

2
3
4
5
6
7
8
8
9
10
11

Nunca Muy A
Seguido Casi
Rara Veces
Siempre
Vez
0
1
2
3
4

¿Ha
recibido
tratamientos
psicológicos o psiquiátricos o lo ha
atendido el médico general o el
pediatra
por
padecimientos
nerviosos, mentales o de conducta?
¿En la familia alguien usa o abusa
de cigarrillos, alcohol o de drogas?
¿Fuma?
¿Bebe cerveza o alcohol?
¿Se ha emborrachado, embriagado?
¿Toma pastillas o tachas?
¿Inhala
thinner,
pegamento,
gasolina, cemento, resistol?
¿Usa agua celeste?
¿Fuma marihuana?
¿Fuma metanfetaminas?
¿Fuma otro tipo de drogas?
¿Muestra cambios bruscos del
estado de ánimo como -triste,
alegre, enojado, angustiado- con
mucha frecuencia?

16

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

12

13

14

15
16
17

18

19
20
21

22

23
24
25
26

¿Tiene épocas en que por muchos
días está como acelerado, activo,
con mucha energía, platicador y
otras veces que por muchos días
está cansado, sin ánimo, desganado,
triste, sin apetito, sin poder con la
escuela?
¿Padece insomnio, que no pueda
dormir por las noches nomás
pensando y pensando?
¿Ha pensado en no querer vivir
más, mejor descansar ya de esta
vida?
¿Ha pensado en quitarse la vida,
matarse, suicidarse?
¿Ha intentado quitarse la vida?
¿Es preocupón y siempre revisa
puertas,
ventanas,
llaves,
cerraduras?
¿Le gusta jugar con lumbre,
cerillos, encendedores, velas o
fuego?
¿Le gusta apostar a todo, aunque
siempre pierda?
¿Tiene o ha tenido tics nerviosos?
¿Es muy nervioso, todo le preocupa
siempre, suda, tiembla, tiene
palpitaciones en el corazón, le falta
aire, se come las uñas?
¿Se deprime con frecuencia estando
sin apetito, triste, llora, no quiere
jugar, no quiere salir, se encierra en
casa?
¿Han abusado de usted físicamente
golpeándolo?
¿Lo
han
maltratado
emocionalmente?
¿Lo
tocaron
o
abusaron
sexualmente?
¿Se lastima o sufre accidentes con
frecuencia?

17

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

Anexo 6

VII Otros sentimientos y conductas Nunca Muy A
Seguido Casi
asociadas. Niños de Primaria.
Rara Veces
siempre
Vez
0
1
2
3
4
1
¿Es egocentrista en exceso, piensa
que Usted es la única persona que
importa?
2
¿Le gusta que otros dependan de
Usted, que Usted sea el líder, que
los otros le hagan caso?
3
¿Es autoritario, es mandón?
4
¿Muestra
tendencias
perfeccionistas, todo lo quiere bien
hecho y pronto?
5
¿Se
siente
aburrido
frecuentemente?
6
¿Tiende a preocuparse por todo
aunque no haya manera de resolver
las cosas?
7
¿Seguido se siente desmoralizado,
percibe que las cosas no le salen
como quiere?
8
¿Tiene la sensación desde más
chico, el sentimiento de no tener o
de no haber alcanzado lo que
quería?
9
¿Tiene la sensación de que Usted
puede ser mucho más de lo que es
en su casa y en la escuela y no lo
logra?
10 ¿Siente valer menos que otras
personas, se siente inferior, con
baja autoestima?
11 ¿Ha sido suspendido o expulsado
de la escuela?
12 ¿Siente que sus gustos y deseos no
los comparten las demás personas?
13 ¿Siente que su manera de ver las
cosas es diferente al de las otras
personas?
14 ¿Se le dificulta mantener las
amistades?
15 ¿Tiene bajas calificaciones y poco
avance escolar?

18

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

16

17
18
19

20
21

22

23

24
25

¿Aguanta
poco
ante
las
frustraciones, cuando no consigue
lo que quiere?
¿Es testarudo?
¿No se lleva bien con las personas
sean compañeros o adultos?
¿Por su forma de ser, lo rechazan,
no lo invitan a jugar o a fiestas, lo
apodan, se burlan de Usted?
¿Tiene dificultad para hacerse de
amigos?
A veces es el chivo expiatorio entre
sus compañeros quienes se alían
contra Usted.
Como consecuencia de su
conducta se aísla de sus
compañeros.
Parece
que
sufre
como
consecuencia del rechazo de sus
compañeros
Tiene muy baja tolerancia a la
frustración.
Tiene problemas con todos, con la
familia, los amigos, la sociedad.

Referencias
1.

Ramos-Quiroga JA, Chalita P J, Vidal R, Bosch R, Palomar G, Prats L, Casas M. Diagnóstico y tratamiento
del trastorno por déficit de atención/hiperactividad en adultos. Rev. Neurol 2012; 54 (Supl 1): S195-S115.

2.

Igual L, Soliva JC, Escalera S, Gimeno R, Milaroyua O, Radera P. Automatic brain caudate nucelei
segmentation
and
classification
in
diagnostic
of
ADHD
disorder.
http://dx.doi.org/10.1016/j.compendimag.2012.08.02 [Ultima entrada 28 Agosto 2013] .

3.

Bidwel LC, Mc Claron F J, Rollins S H. Cognitive enhancers for the treatment of ADHD. Pharmacol
Biochem Behav 2011; 99:262-274.

4.

Mas C. El TDAH en la Práctica Clínica Psicológica, Clínica y Salud. 2009; 20: 249-259.

5.

Joffre-Velázquez VM, García-Maldonado G, Martínez-Perales G. Trastorno por déficit de atención e
hiperactividad. Un estudio descriptivo en niños mexicanos atendidos en un hospital psiquiátrico. Bol Med
Hosp Infant Mex 2007; 64:153-160.

6.

Biederman J, Petty CR, Monuteaux MC, Fried R, Byrne D, Mirto T, Spencer T, Wilens T, Faraone S V. Adult
outcomes of girls with attention deficit an hyperactive disorder: 11-year follow-up in a longitudinal casecontrol study. Am J psychiatry 2010; 409-417.

7.

Sánchez O, Vázquez AR. Frecuencia del trastorno por déficit de atención con hiperactividad en alumnos de
una escuela primaria de Cd. Obregón, Son. Atención Familiar 2009; 16: 28-31.

8.

Burgos C M. Enfoque cognitivo-conductual: Estrategia de intervención para el manejo de niños
diagnosticados con el Trastorno de déficit de atención con hiperactividad en el nivel de la escuela elemental.
Tesis de Maestría. Universidad Metropolitana. México, D. F. 65 p.

19

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

9.

Washbrook E, Propper C, Sayal K. Pre-schoolar hyperactivity/attention problems and educational outcomes
in
adolescence:
prospective
longitudinal
study.
Br.
J
of
Psych
2013;
265-271.
http://www.psiquiatria.com/articulos/trastornos_infantiles/hiperactividad/tdah_y_comportamiento_pe
rturbador/60626/ [Ultima entrada 17/10/2013].

10.

Álvarez-García D, Menéndez S, González-Castro P, Rodríguez C. Hiperactividad-Impulsividad y Déficit de
Atención como predictores de participación en situaciones de violencia escolar. Internacional Journal of
Psychology and Psychological Therapy. 2012; 12: 185-202.

11.

Kuhn, E. Decision-making, impulsivity and self-control: Between-person and within-person predictors of
risk taking behavior. University of New Orleans Theses and Dissertations. 2013. Paper 1643. Pp 109.

12.

Harpin V A. The effect of ADHD on the life of an individual, their family, and community from preschool to
adult life. Arch Dis Child 2005 (Supl 1): S2-S7.

13.

Sciberras E, Ohan G, Anderson V. Bulluying and peer victimisation in adolescent girls with attention
deficit/hyperactivity disorder. Child Psych Hum Dev 2012; 43: 254-270

14.

Biderman J, Mick, Faraone S V, Braaten E, Doyle A, Spencer T, Wilens T E, Frazier E, Johnson M A.
Influence on gender on attention deficit hyperactivity disorder in children referred to a psychiatric clinic.
Am J Psych 2002; 159:36-42.

15.

Mc Gough J J, Barkley R A. Diagnostic controversies in adult deficit hyperactivity disorder. Am J Psychiatry
2004; 161: 1948-1956.

16.

Moya J, Strangiris A K, Asherson P, Sandberg S, Taylor E. The impact of persisting social relationships: A
community-based controlled 20-year follow up study. J of Att. Dis. 2012; 20: 10-20.

17.

Fernández- Jaén A, Fernández-Mayoralas D M, Calleja-Pérez Beatriz, Muñoz-Jareño N. Endofenotipos
genómicos del trastorno por déficit de atención/hiperactividad. Rev. Neurol 2012; 54 (Supl) S81-S87

18.

Faraone SV, Mick E. Molecular genetics of Attention Deficit Hyperactivity Disorder. Psychiatr Clin North
Am 2010; 33: 159-180.

19.

Langley K, Heron J, O´Donovan MC, Owen M J, Taphar A. Genotype link with extreme antisocial behavior.
The contribution of cognitive pathways. Arch Gen Psych 2010; 67:1317-1323.

20.

Halmøy A, Johanssen J, Winge I, Mc Kinney J, Knappskog PM, Haavik J. Attention-deficit/hyperactivity
disorder symptoms in offsprings of mothers with impaired serotonin production. Arch Gen Psych 2010; 671033-1043.

21.

Franke B, Faraone SV, Asherson P, Buitelaar J, Chau CHD, Ramos-Quiroga JA, et al. The genetics of
attention deficit/hyperactivity disorder in adults, a review. Mol Psychiatry 2012; 17:960-987.

22.

Jacob CP, Weber H, Retz W, Kittel-Schneider S, Heupel J, Renner T, Lesch K-P, Reif A. Acetylcholinemetabolizing butyrylcholinesterase (BCGE) copy number and single nucleotide polymorphisms and their
role in attention-deficit/hyperactivity syndrome. Journal of Psychiatric Research (2013), doi;
10.1016/j.psychires.2013.08.006. [Última entrada 27 octubre 2013].

23.

Acosta-Saavedra L, Moreno M E, Rodríguez-Kessler T, Luna A, Gómez R, Arias-Salvatierra D, CalderónAranda ES. Environmental exposure to lead and mercury in Mexican Children: A real health problem.
Toxicol Mech Methods 2011; 21: 656-666.

24.

Ha M, Kwon HJ, Lim MH Jee YK, Hong YC, Sakong J et al. Low Blood Levels of Lead and Mercury and
Symptoms of Attention Deficit Hyperactivity in children: A report of the Children`s Helath and
Environment Research (CHEER). Neurotoxicology 2009; 30:31-36.

25.

Menezes-Filho JA, Bouchard M, Sarcinelli PN Moreinra JC. Manganese exposure and the
neuropsychological effects on children and adolescents: a review. Rev Panam Salud Pública 2009;26:541548.

26.

Lindberg F, Hjern A. ADHD After Fetal Exposure to Maternal Smoking. Nicotine Tob Res 2010;12:408-415.

20

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

27.

Zuliani L, Uribe M, Cardona JC, Cornejo Ochoa JW. Características Clínicas, Neuropsicológicas y
Sociodemográficas de Niños Varones con Déficit e Atención/Hiperactividad de Tipo Inatento en Medellín,
Colombia 2004-2005. IATREIA 2008; 21:375-385.

28.

Loo S, Hale ST, Hanada G Maciun J, Shresta A, Mc Gough JJ et al. Familial Clustering and DRD4 Effects
on EEG Measures in Multiplex Families with Attention-Deficit Hiperactivity Disorder. J Am Acad Child
Adolesc Psychitry 2010; 49: 368-377.

29.

Keune PM, Schenberg M, Wyckoff S, Mayer K, Riemann S, Hautzinger M. Frontal Alpha-Asymmetry in
Adults with Attention Deficit Hiperactivity Disorder: Replication and Specification. Biol Psychol 2011;
87:306-310.

30.

Rojas Y, Calzada A, Rojas L. Diferencias Electroencefalográficas en Niños con Dos Subtipos del Trastorno
por Déficit de Atención con Hiperactividad. Revista Habanera de Ciencias Médicas 2010; 9: 491-499.

31.

Bush G. Cingulate, Frontal, and parietal Cortical Dysfunction in Attention-Deficit / Hyperactivity Disorder.
Biol Psychiatry 2011; 69: 1160-1167.

32.

Colomer- Diago C, Miranda-Casas A, Herdoiza-Arroyo P, Presentación-Herrero MJ. Funciones ejecutivas y
características estresantes de niños con trastorno por déficit de atención/hiperactividad: Influencia en los
resultados durante la adolescencia, Rev Neurol 2012; 54 (Supl1):S117-S126.

33.

Cubillo A, Halari R, Ecker C, Gianpetro V, Talor E, Rubia K. Reduced Activation and Inter-Regional
Functional Connectivity of Fronto-StriatalNetworks in Adults with Chilhood Attention-Deficit
Hyperactivity Disorder (ADHD) and Persisting Symptoms During Motor Inhibition and Cognitive
Switching. J Psychiatr Res 2010; 44:629-639.

34.

Schnoebelen S, Semrud-Clickman M, Pliszka SR. Corpus Callosum Anatomy in Chronically Treated and
Stimulant Naïve ADHD. J Atten Disor 2010; 14:256-266.

35.

Bledose JC, Semrud-Clickman M, Pliszka SR. Neuroanatomical and Neuropsychological Correlates of the
Cerebellum in Children with Attention- Deficit/Hyperactivity Disorder-Combined Type. J Am Acad Child
Adolesc Psychiatry 2011; 50:593-601.

36.

Chamberlain SR, Robbins TW, Winder-Rhodes S, Müller U, Sahakian BJ, Blackwell AD et al. Translational
Approaches to frontostriatal Dysfunction in Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder Using a
Computarized Neuropsychological Battery. Biol. Psychiatry 2011;69:1192-1203.

37.

Connor DF, Doerfler LA. ADHD with comorbid Oppositional Defiant Disorder or Conduct Disorder:
Discrete or nondistinct disruptive behavior disoreders? J Atten Disord 2008; 12: 126-134.

38.

Coles EK, Slavec J, Bernstein M, Baroni E. Exploring the gender gap in referrals for children with ADHD
and other Disruptive Behavior Disorders. J Atten Disord 2012; 16: 101-108.

39.

Bezdjian S, Krueger RF, Derringer, Malone S, Mc Gue M, Iacono WGls. The structure of DSM-IV ADHD,
ODD and CD criteria in adolescent boys: A hierarchical approach. Psychiatry Res 2011; 188: 411-421.

40.

Garrido L. El trastorno por déficit de atención e hiperactividad. Revista Digital Transversalidad Educativa
2009; 26: 43-54.

41.

Dresdner CR. Agresión: La necesidad de contar con un concepto operacional en psiquiatría forense. Revista
de Medicina y Humanidades. 2009; 1:63-69.

42.

Pardini DA, Frick PJ, Moffitt TE. Building an evidence base for DSM-5 conceptulizations of Oppostitional
Defiant Disorder and Conduct Disorder: Introduction to the special section. J Abnorm Psychol 2010; 119:
683-688.

43.

Loh PR, Piek JP, Barret NC. Comorbid ADHD and DCD: Examining cognitive functions using the WISC-IV.
Res Dev Disabil 2010; 32: 1260-1269.

44.

Sibley MH, Pelham WE, Molina SG, Gnagy EM, Washbush DA, Biswas A et al. The delincuency outcomes
of boys with ADHD with and without comorbidity. J Abnorm Child Psychol 2011; 39: 21-32.

21

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

45.

Hummer TA, Kronenberg NG, Wang Y, Dan DW, Moiser KM, Kalnin AJ et al. Executive functioning
characteristics associated wit ADHD comorbidity in adolescents with Disruptive Behavior Disorders. J
Abnorm Child Psychol. 2011; 39-11-19.

46.

Passtoors, Laurien MW. The predictive value of callous-unemotional traits and empahty on the stability of
conduct problems in a 6 and 7 year old children with ADHD and/or ODD. (2011). Mastertheses. Ultrecht
University. [Última entrada 11 Noviembre 2013].

47.

Frick PJ, Cornell AH, Barry CT, Bodin SD, Heather ED. Callous-unemotional traits and conduct problems
in the prediction of conduct problem severity, aggression, and self-report of delinquency". J of Abnorm child
Psychology 2003; 31:457-470.

48.

Lobby A. Childhood Attention Deficit Hiperactivity Disorder and the development of substance use
disorders: Valid concern or exaggeration? Addic Behav 2008; 33: 451-463.

49.

Wymbs B, Molina B, Pelham W, Cheong JW, Gregory E, Belandiuk K et al. Risk of intimate partner violence
among youth adult males with childhood ADHD. J Atten Disord 201; 16: 373-383.

50.

Michanie C, Kunst G, Margulies DS, Yakhkind A. Symptom prevalence of ADHD and ODD in a pediatric
population in Argentina. J Atten Disord 2007; 11: 363-367.

51.

American Psychiatric Association. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, 4 ed., texto
revisado, DSM-IV-TR. Barcelona: Masson; 2002

52.

Alcántara P, García A. Yañez JT. Funcionalidad de Familias con Niños que Presentan Déficit de Atención e
Hiperactividad o sin él, en la Unidad de Medicina Familiar No. 21 del IMSS. Psiquis 2008;17:129-139.

53.

Tellez-Villagra C. Valencia FM, Beauroyre HR. Cronología Conceptual del Trastorno por Déficit de Atención
e Hiperactividad. Revista de Especialidades Médico-Quirúrgicas 2011; 16:39-44.

54.

Cornejo Ochoa W, Sánchez Mosqueira Y, Gómez Navas MP. Desempeño diagnóstico del cuestionario lista
de síntomas del DSM IV para el tamizaje del trastorno de hiperactividad con déficit de atención (TDAH) en
niños y adolescentes escolares. Acta Neurol Colomb 2010; 26:134-141.

55.

Salamanca LM. Construcción, Validación y Confiabilidad de un Cuestionario Sobre Niños y Niñas con
TDAH. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales Niñez y Juventud 2010; 8:1117-1129.

56.

López Villalobos JA, Serrano Pintado I, Delgado Sánchez-Mateos J. Trastorno por déficit de atención con
hiperactividad: Un modelo predictor de comorbilidad con trastornos del comportamiento. Clínica y Salud.
2004; 15: 9-13.

57.

De la Peña F, Palacio J D, Barragán E. Declaración de Cartagena para el Trastorno por Déficit de Atención
con Hiperactividad (TDAH): Rompiendo el Estigma. Revista Ciencias de la Salud. 2010; 8:93-98.

58.

Rangel Araiza JF. Tesis de maestría. El trastorno por déficit de atención e hiperactividad en estudiantes de
medicina del ICB de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, AC. 2008.

59.

Romero Ogawa T, Lara Muñoz C, Herrera S. Estudio familiar del trastorno por deficit de atención e
hiperactividad. Salud Mental 2002; 25: 41-46.

60.

Di Trani M, Casini M P, Capuzzo F y cols. Executive and Intellectual Functions in AttentionDeficit/Hyperactivity Disorder with and Without Comorbidity. Brain Dev 2011; 33: 462-469.

61.

Rodríguez C, Fernández-Cueli M, González-Castro MP y cols. Diferencias en la Fluidez Sanguínea Cortical
en los Subtipos de TDAH. Un Estudio Piloto. Aula Abierta 2011; 39:25-36.

62.

Koneski JA, Casella EB, Agertt F, Ferreira MG. Efficacy and Safety of Methylphenidate in Treating ADHD
Symptoms in Children and Adolescents with Uncontrolled Seizures: A Brazilian Sample Study and
Literature Review. Epilepsy Behav 2011;21:228-232.

63.

Farhoodi F, Rostami R, Abdolmanafi A, Amori M. Study and Comparison of the Symptoms of Attention
Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD) Among Patients with Substance use Disorder and normal people.
Procedia Social and Behavioral Sciences 2010: 5: 892-895.

22

Rangel Araiza JF. Psiquiatria.com. 2015; 19:13

64.

Loufti KS, Carvalho AM, Lamounier JA, Nascimento JdeA. ADHD and epilepsy: Contributions from the use
of behavioral ratin

Comentarios/ Valoraciones de los usuarios



¡Se el primero en comentar!

La información proporcionada en el sitio web no remplaza si no que complementa la relación entre el profesional de salud y su paciente o visitante y en caso de duda debe consultar con su profesional de salud de referencia.