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00591
La Paz,
Este es el consultorio de Silvia Aleman Menduinna
Cuando tenía 16 años tuve un desafío muy grande. Entender la mente humana. Encontré a un chico, un poco mayor que yo. Él era muy gracioso y divertido. También tenía una mente prolija e inteligente. Era imposible pensar que él, intencionalmente iría a chocar su carro frente a un muro. Y así lo hizo.
Yo estaba en el carro e intenté desviar el volante del carro. Intenté evitar el choque. Pero chocamos. La gente se aglomeró en torno al carro, lo sacaron, le pusieron al suelo, alguien gritaba, pañuelo!, pañuelo!. Por primera vez en mi vida escuché una palabra: epilepsia.
Al otro día fui a visitarle y al otro día también, pero él, solo dormía. Yo observaba su cabeza, su frente, como queriendo obtener alguna respuesta que me permita comprender lo que pasó. Entendía, intuitivamente que algo había pasado, que ése hecho no fue intencional. Decidí investigar. Pasé horas y días en la Biblioteca Municipal de la Plaza del Estudiante en La Paz.
Allí, conocí a James, Bandura, Skinner, Freud, Fuster, Klein y otros grandes. Me vi envuelta en algo fascinante que me acompañaría toda la vida, la psicología y el psicoanálisis.
A mis 17 años, falleció mi padre cuando yo estaba fuera del país. Fue muy doloroso. Me imaginaba sus propósitos, deseos, sueños y angustias. Me interesaba saber como procesaba esa mente, como fueron sus afectos conmigo, con los otros. El fallecimiento de mi padre, más el evento del chico epiléptico, sellaron en mí, la dedicación a la psicología. Al cumplir 18 años, en enero ya estaba inscrita en el primer curso de psicología.
A los 19 años, combinaba clases, trabajo y crianza de una bebé. Todo un reto fascinante, pues estaba frente al escenario natural de los procesos mentales: la vida. Trabajaba en el área rural, pero como estudiante de psicología, mi rol era repartir refrescos y poner papelógrafos.
Sin embargo, David Brock, un miembro de la agencia de cooperación financiera del proyecto rural, me había ofrecido, concentrarme en entender el comportamiento humano de los beneficiarios frente a los proyectos de desarrollo. Eso hice. Desde ahí a la fecha, trato de comprender el comportamiento humano. No es fácil.
Entendí lo impredecibles que son los seres humanos, más en situaciones desconocidas. Estudié, que, los seres humanos somos un complejo neuronal, constituidos de herencias genéticas, de permanente interrelaciones con el entorno, con la familia, que siempre estamos en procesos aptativos. De ello, va a depender nuestra vida personal, familiar, afectiva, de pareja, de socialización con otros. De comprensión de nuestros propósitos y de los otros.
Este es el consultorio de Silvia Aleman. Yo soy tu psicóloga cognitiva y de interrelación de sistemas. Coordino, si es necesario con un equipo de psicólogos, médicos psiquiatras y neurólogos, si corresponde.
En el tiempo, estudie tambien economia. Ahora soy pscoterapeuta y profesora de neuroeconomia. Puedo comprender el comportamiento de los individuos en escenarios, complejos, como el desarrollo y las instituciones.
Ven contame.
Silvia Aleman estudio en:
- Universidad Católica Boliviana
- Universidad Francisco Marroquín
- Universidad Mayor de San Andrés: Post Grado de Ciencias del Desarrollos
Redes:
Red de Contactos de Consultorio SOL
Red Latinoamericana de Psicólogos Cognitivo- conductuales
Consultorio de Psicólogos Sistémicos- (COTESIT)- Miembro de Sociedad Latinoamericana de Terapia Sistémica: SOLFAM
Trabajo en
Prevención y apoyo terapéutico
i) Prevención primaria y Orientación:
Apoyo terapéutico:
Psicología
Ansiedad
Depresión
Tr. Control de impulsos
Tr. adaptativos
Tr. Infantiles/adolescencia
Tr. generalizados del desarrollo
Tratamientos