E
l acto por el Día de la Constitución celebrado este miércoles en el Congreso de los Diputados ha dejado espacio para un recordatorio sanitario. La presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol, ha reivindicado en su discurso la necesidad de remover los obstáculos necesarios para situar a la salud mental en el centro de todas las políticas. Además, Armengol ha concluido su intervención insistiendo en que la celebración de la Constitución es un motivo de "salud democrática"."Centrémonos en blindar cada pilar de nuestro Estado de Bienestar para imposibilitar su erosión. Removamos los obstáculos que aún impiden la conciliación de la vida laboral y familiar y las trabas que hacen que la salud mental no esté en el centro de todas las políticas. Situemos también a la ciencia, la educación, la formación y la cultura donde se merecen, porque solo bebiendo de ellas nuestro pueblo será verdaderamente libre", ha señalado.
Armengol también ha recordado que en el artículo 43 de la Constitución se recoge el derecho a la salud, destacando que España cuenta con un Estado del Bienestar robusto, con un sistema público de salud, educación gratuita, además de un sistema de pensiones y leyes de dependencia, pero donde existen "grietas" por las que se escapa la desigualdad y se acentúa la vulnerabilidad: "Nuestra Constitución es garante del Estado de Bienestar, lo diseña y obliga a su permanencia".
Sin embargo, ha indicado la necesidad de ser conscientes de que no se podrán conseguir todos estos objetivos, que incluye a los sanitarios, si no se cumpe "a rajatabla" el artículo 31: "Todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica mediante un sistema tributario justo, inspirado en los principios de igualdad y progresividad, que en ningún caso tendrá alcance confiscatorio. Este artículo es el dibujo perfecto del reparto equilibrado de las riquezas, porque nuestra Constitución está pensada para que nuestra sociedad sea un lugar donde se viva en armonía, con justicia social y económica"; ha recordado.
Salud Mental en el epicentro político
La salud mental ha estado en el centro de los discursos políticos más recientes. El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mencionó en su debate de investidura, reforzó el papel de la misma: "Vamos a continuar reforzando la Atención Primaria, que es una de las asignaturas pendientes de nuestro sistema, vamos a ampliar la cartera de servicios públicos para incluir tratamientos bucodentales y también oftalmológicos para nuestros jóvenes, y vamos a promover un gran pacto de estado por la salud mental, que va a aumentar el número de psicólogos y psiquiatras en los centros públicos, va a reducir los tiempos de espera y va a garantizar que en España no haya un solo ciudadano que necesite ayuda psicológica y no pueda obtenerla".
Esta mención política es celebrada por los profesionales de la salud mental. Los psicólogos aplauden que, por primera vez en una declaración a este nivel, aparezca la Psicología y no solo la Psiquiatría cuando se habla de salud mental. "Es motivo de celebración que un presidente cite y detalle esto, tenemos que decir que estamos contentos de este señalamiento. Por supuesto, un pacto por la salud mental no solo lo debemos interpretar como un escenario para la generación de un modelo de atención, sino que requiere de un análisis estructural y sistémico de cuáles son las causas que nos han llevado a no disponer de este personal suficiente para atender no solo la cobertura de las jubilaciones, sino fundamentalmente la creación de nuevos dispositivos y de incremento de personal para reducir las listas de espera", recordó a Redacción Médica José Antonio Luengo, decano del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid y vicepresidente primero del Consejo General de la Psicología de España.