S
e revisa el uso de ansiolíticos e hipnóticos durante el embarazo y la lactancia, analizando su efecto teratógenico, así como los síndromes perinatales descritos y los posibles efectos en el desarrollo del neonato, concluyéndose que la evidencia de los estudios es insuficiente para garantizar que no existirán problemas relevantes, pero estos parecen ser infrecuentes, en términos absolutos. En líneas generales, sería deseable evitar el uso de benzodiazepinas durante el primer trimestre, especialmente las semanas 3.a a 11.a, por el mayor riesgo de teratogenicidad, pero siempre que se disponga de otra opción alternativa que vaya a cumplirse y que la misma resulte eficaz. Sin embargo, pueden usarse si, estando indicadas, no existe la posibilidad de utilizar otras alternativas mejores, sean estas farmacológicas o no farmacológicas.Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:http://www.elsevier.es