El procesamiento aberrante de las emociones es un sello distintivo del trastorno de estrés postraumático (TEPT), con modelos neurobiológicos que sugieren una mayor reactividad neuronal y una disminución de la habituación a los estímulos aversivos. Sin embargo, el trabajo empírico sugiere que estos patrones de respuesta pueden ser específicos de subconjuntos de personas con TEPT. Este estudio investiga las contribuciones únicas de los grupos de síntomas de TEPT (reexperimentación, evitación y adormecimiento e hiperactivación) a la reactividad neuronal y la habituación a estímulos negativos en veteranos expuestos al combate.
Noventa y cinco veteranos expuestos al combate (46 con TEPT) y 53 voluntarios de la comunidad se sometieron a imágenes de resonancia magnética funcional mientras veían imágenes emocionales. Este estudio examinó la relación entre la gravedad del grupo de síntomas y las respuestas hemodinámicas a imágenes negativas en comparación con imágenes neutrales (NEG> NEU).
Los veteranos exhibieron respuestas medias y relacionadas con la habituación para NEG> NEU, en relación con los civiles. Sin embargo, entre los veteranos, la habituación, pero no la respuesta media, se relacionó de manera diferencial con la gravedad de los síntomas de TEPT. Los síntomas de hiperactivación se relacionaron con una disminución de la habituación de NEG> NEU en una red de regiones, incluidas las circunvoluciones frontales superior e inferior, la corteza prefrontal ventromedial, las circunvoluciones temporal superior y media y la ínsula anterior. En contraste, los síntomas de reexperimentación se asociaron con una mayor habituación en una red similar. Además, volver a experimentar la gravedad se relacionó positivamente con la conectividad funcional amigdalar con la circunvolución frontal inferior izquierda y la corteza cingulada anterior dorsal para NEG> NEU.
Estos resultados indican que los síntomas de hiperactivación en el TEPT relacionado con el combate están asociados con una disminución de la habituación neural a los estímulos aversivos. Estas deficiencias se mitigan parcialmente en presencia de síntomas de reexperimentación, de modo que durante la exposición a estímulos negativos, los síntomas de reexperimentación se asocian positivamente con la conectividad amigdalar a las regiones prefrontales implicadas en la supresión afectiva.
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