Autor/autores:
Rachel Yehuda y Amy Lehrner
Este artículo revisa la evidencia de la investigación sobre la transmisión intergeneracional de los efectos del trauma y el posible papel de los mecanismos epigenéticos en esta transmisión. Se destacan dos amplias categorías de efectos mediados por epigenética. El primero involucra efectos programados en el desarrollo. Estos pueden ser el resultado ...
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Este artículo revisa la evidencia de la investigación sobre la transmisión intergeneracional de los efectos del trauma y el posible papel de los mecanismos epigenéticos en esta transmisión. Se destacan dos amplias categorías de efectos mediados por epigenética. El primero involucra efectos programados en el desarrollo. Estos pueden ser el resultado de la influencia de las exposiciones ambientales tempranas de la descendencia, incluida la atención materna postnatal, así como la exposición en el útero que refleja el estrés materno durante el embarazo. El segundo incluye cambios epigenéticos asociados con un trauma preconcepcional en los padres que pueden afectar la línea germinal e impactar las interacciones fetoplacentarias. Varios factores, como los efectos epigenéticos específicos del sexo después de la exposición al trauma y el estadio de desarrollo parental en el momento de la exposición, explican los diferentes efectos del trauma materno y paterno. El trabajo más convincente hasta la fecha se ha realizado en modelos animales, donde la oportunidad de diseños controlados permite interpretaciones claras de los efectos transmisibles. Dada la escasez de estudios en humanos y los desafíos metodológicos en la realización de tales estudios, no es posible atribuir los efectos intergeneracionales en humanos a un único conjunto de determinantes biológicos u otros en este momento. Elucidar el papel de los mecanismos epigenéticos en los efectos intergeneracionales a través de estudios prospectivos y multigeneracionales puede, en última instancia, producir una comprensión convincente de cómo las experiencias individuales, culturales y sociales impregnan nuestra biología.
Ahora hay evidencia convergente que respalda la idea de que los descendientes se ven afectados por las exposiciones de trauma parental que ocurren antes de su nacimiento, y posiblemente incluso antes de su concepción.
En el nivel más simple, el concepto de trauma intergeneracional reconoce que la exposición a eventos extremadamente adversos impacta tanto en los individuos que sus descendientes se encuentran lidiando con el estado postraumático de sus padres. Una afirmación más reciente y provocadora es que la experiencia del trauma -o más exactamente el efecto de esa experiencia- se "transmite" de una generación a otra a través de mecanismos no genómicos, posiblemente epigenéticos, que afectan la función del ADN o la transcripción génica1-6.
Aunque tanto la transmisión intergeneracional (de F0 a F1) como transgeneracional (de F0 a F3 o F4) de los efectos de adversidad ambiental se han establecido en modelos animales, los estudios en humanos aún no han demostrado que los efectos del trauma sean hereditarios a través de genómica ( es decir, mecanismos epigenéticos). Sin embargo, ha habido mucha expectación e incluso promulgación prematura de la idea de que esos efectos se transmiten a través de modificaciones en el ADN, lo que explica el impacto de la experiencia familiar7.
La inclinación a atribuir los efectos de la descendencia a los mecanismos epigenéticos refleja en parte el uso inexacto y variado del término "transmisión". El uso original era descriptivo, y sin inferencias mecanicistas. Ahora que la investigación con animales ha definido una vía molecular a través de la cual puede ocurrir la transmisión de los efectos del trauma, se justifica un lenguaje más preciso para distinguir entre la observación clínica y el mecanismo biológico. En la actualidad, la idea de que los mecanismos epigenéticos subyacen a las observaciones clínicas en la descendencia de los supervivientes de traumatismos representa una hipótesis que debe probarse.
Esta revisión delinea los posibles mecanismos epigenéticos que podrían examinarse en relación con los efectos de la descendencia, y proporciona información sobre el tipo de estudios que podrían ser más informativos.
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