La Consellería de Sanidad ha lanzado recientemente una propuesta en la que plantea la posibilidad de pagar un extra a los profesionales de atención Primaria que consiguiesen, al menos, el 60 por ciento de las consultas sean presenciales. Pero la proposición no ha gustado mucho a los médicos de Familia que, lejos de tentarles, lo tachan de "falta de respeto".
"Pienso que quien ha propuesto este plan no ha pisado un centro de salud gallego ni no gallego", reponde Vicente Martín, vocal de la Junta Directiva Nacional de la Sociedad Española de Médicos de atención Primaria (Semergen). "La gran mayoría de las consultas son presenciales. Nunca se ha dejado la presencialidad en los centros atención Primaria. Es una falta de respeto a los profesionales que se han batido el cobre durante 15 meses", asegura.
"Además, esto va en desprestigio de la profesión y de los profesionales", añade. Considera que lo que se debe tener en cuenta es que haya un número suficiente de sanitarios y de líneas telefónicas para atender. "Porque somos médicos, no telefonistas. Y queremos lo mejor para nuestros pacientes. Creemos en la continuidad asistencial, en que cada paciente se merece un tiempo. Nuestro papel es escuchar. No hay ni un solo profesional de la atención Primaria de España que no piense así", afirma Martín, que recuerda la cantidad de pacientes que se suman día a día en la agenda y los trámites burocráticos que se añaden.
Quien sí trabaja en Galicia es Pilar Rodríguez Ledo, vicepresidenta de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), que asegura que "el camino no puede ser eso". Esta médica de Familia cree que no se puede proponer algo así "en serio".
"Es necesario incrementar consultas presenciales y, sobre todo, aumentar el control sobre la demanda. Estamos ante una oportunidad muy importante a la hora de ponerle sentido a esa demanda que durante tantos años hemos pensado que estaba desbocada", indica.
Para ella, con la pandemia se ha querido ir "del todo a la nada, y ahora se quiere volver al todo". "Pero el camino no puede ser eso, ni siendo primados por objetivos ni no siéndolo. El objetivo por parte de la administración debe ser regular que cada paciente reciba la atención que necesita y que se le puede ofrecer en el marco de la pandemia que tenemos. Aquella persona que deba ser vista presenialmente debe conseguirlo, y aquella que se benefice de una consulta telefónica o telemática bienvenido sea. Los recursos tienen que estar a disposición de las necesidades de los pacientes", afirma.
Los colegios médicos gallegos, el propio Servicio de Salud Gallego (Sergas) y el Consejo General de Colegios Médicos (Cgcom) también se han opuesto a esta proposición.
