Resumen
Objetivo:
El consumo excesivo de alcohol durante la adolescencia puede alterar la trayectoria del desarrollo normal del cerebro. Los autores midieron dentro de los sujetos cambios en la morfometría cerebral regional durante intervalos más largos y en muestras más grandes de adolescentes que evaluaciones de diferencias previamente reportadas y entre adolescentes que no bebedores y aquellos que bebían en exceso durante la adolescencia, así como las diferencias entre los sexos.
Método:
Los autores examinaron las trayectorias de volumen de la materia gris y blanca en 134 adolescentes, de los cuales 75 transitaron hacia el consumo excesivo de alcohol y 59 fueron no bebedores o poco bebedores durante más de aproximadamente 3,5 años. Cada uno, con edades entre 12 y 24 años, se sometió a resonancia magnética de 2 a 6 veces y fue seguido hasta durante 8 años. Los volúmenes de la neocorteza, allocortex y estructuras de la materia blanca se midieron utilizando atlas basados en parcelación con registro longitudinal. Modelos lineales de efectos mixtos describieron las diferencias en las trayectorias de los grandes bebedores y los no bebedores de más edad; análisis secundarios consideraron la contribución de otras drogas a los efectos identificados del uso del alcohol.
Resultados:
Los adolescentes con consumo excesivo de alcohol mostraron una reducción acelerada de la materia gris en el frontal lateral cortical y los volúmenes temporales y un atenuado el crecimiento de la materia blanca del cuerpo calloso y del puente troncoencefálico en relación con los no bebedores. En gran parte, estos resultados permanecieron sin cambios cuando se examinó el uso de la marihuana y otras drogas. Bebedores masculinos y femeninos mostraron patrones similares de anomalías en la trayectoria de desarrollo.
Conclusiones:
El análisis longitudinal permitió la detección de la disminución del volumen típico acelerado en los volúmenes corticales frontales y temporales y el crecimiento atenuado en las principales estructuras de la materia blanca entre adolescentes que comenzaron a beber en exceso. Estos resultados proporcionan una llamada a la prudencia con respecto al uso excesivo de alcohol durante la adolescencia, si el consumo excesivo de alcohol es la causa única o uno de varias de estas alteraciones en el desarrollo del cerebro.
Para acceder al texto completo es necesario consultar las características de suscripción de la fuente original: http://ajp.psychiatryonline.org/
