El Documento Final de La Sesión Especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas de 2016 (UNGASS 2016) sobre drogas, de manera unánime aprobada por los 193 Estados Miembros ha reconocido “la adicción a las drogas como un trastorno de la salud multifactorial complejo caracterizado por una naturaleza crónica y con recaídas” que es evitable y tratable y no el resultado de una deficiencia moral o una conducta delictiva. Teóricamente, la mayor parte de las estrategias de las naciones para abordar los trastornos relacionados con sustancias se han centrado en el castigo y de ahí que el reconocimiento de la necesidad de un cambio desde un enfoque de justicia penal a un enfoque de salud pública representa un cambio importante en la mentalidad por los Estados Miembros de las Naciones Unidas. El logro fue resultado de un diálogo continuo entre autoridades sanitarias y la comunidad científica durante sesiones recientes en la Comisión de las Naciones Unidas sobre Drogas Narcóticas. En 2015, la Oficina de Drogas y Delitos de las Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud crearon una Red Científica Internacional Informal integrada por expertos en ciencia de la adicción para que asesoraran a la comisión. Los miembros de la red fueron asignados por los Estados Miembros y representaron regiones geográficas, culturas y sistemas políticos muy diversos. La representación de la red para la preparación de la UNGASS 2016 por la comisión proporcionó el apoyo científico para el concepto de que los trastornos relacionados con sustancias son trastornos cerebrales1 ; que se pueden tratar; que las personas que tienen incluso las formas más graves pueden restablecerse con acceso a tratamiento basado en evidencia y apoyos sociales2 ; y que las sanciones penales son ineficaces para prevenir o resolver estos trastornos. También resaltó enfoques basados en evidencia en la normativa sobre drogas con base en principios de salud pública, resaltando la protección social y la atención sanitaria en vez de la condena y el castigo. La red emitió ocho recomendaciones, que fueron adoptadas de manera unánime por todos los países miembros de las Naciones Unidas en UNGASS 2016 y resumidas en el Documento Final de ese congreso. Estas recomendaciones son un testimonio de un cambio oportuno en la mentalidad, al cual han contribuido la ciencia y la red...
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