Valencia MJ. Psicologia.com. 2011; 15:9.
http://hdl.handle.net/10401/3449
Artículo original
Consumo de alcohol en estudiantes de educación
secundaria, aspectos personales y sociales relacionados
María Jazmín Valencia Guzmán1*, María Leticia Rubí García Valenzuela2*, María
Magdalena Lozano Zúñiga3*
Resumen
En México, la Encuesta Nacional de Adicciones (ENA, 2008), muestra que el problema más
importante de adicciones en el país, se relaciona con el consumo de bebidas alcohólicas,
aunado al consumo de tabaco, arraigados ambos en muchas poblaciones, tanto rurales como
urbanas. Se realizó estudio Prospectivo, Trasversal, Descriptivo y Observacional, con el objetivo
de: identificar las características familiares y personales relacionadas al consumo de alcohol en
adolescentes residentes de una comunidad rural. La muestra estuvo constituida por 161
estudiantes de educación secundaria. Para la colecta de los datos, se aplicó un cuestionario
individual, generado a partir de operacionalización de variables. Resultados: El 54 % de los
encuestados fueron del sexo masculino, las edades oscilaron entre 13 años (21 %), 14 años
(62%) y 15 años (17%). Se identificó que el 18% consume alcohol y la combinación de alcohol y
tabaco fue de 11.9%. Chi cuadrada con una significancia .000 se obtuvo en relación a que los
amigos los presionan a consumir alcohol. Considerar que la comunicación con sus padres y
amigos, relacionada con la comprensión de la familia. R=17.408, gl=1, sig .000. Consumo de
alcohol y afectación de las relaciones con sus padres R=7.957, gl=1, sig .005. Conclusiones:
Tener contacto con el alcohol a tan temprana edad, multiplica los factores de riesgo para un
desarrollo armonioso, además de que el rango en que están consumiéndolo es menor a lo que
manifiesta la OMS.
Palabras claves: Consumo, alcohol, adolescentes, educación, secundaria.
Abstract
In Mexico, the National Survey of Addictions (ENA, 2008), shows that the most important
problem of addiction in the country, is related to alcohol consumption, coupled with snuff
consumption, rooted both in many populations, both rural and urban. Prospective, transversal,
descriptive and observational study was conducted, with the aim of: identifying personal and
family characteristics related to alcohol use in adolescents living in a rural community. The
sample consisted of 161 secondary school student. For the collection of data, a questionnaire was
individually generated from operationalization of variables. Results: 54% of respondents were
male, ages ranging from 13 years (21%), 14 (62%) and 15 (17%). Identified that 18% consume
alcohol and the combination of alcohol and snuff was 11.9%. Chi square with a .000 significance
was obtained by reference to the press of friends to consume alcohol. Consider that the
communication with parents and friends, related to the understanding of the family. R = 17,408,
sig .000. Alcohol consumption and impairment of relationships with parents R = 7,957, , sig
.005. Conclusions: Having alcohol at a young age multiplies the risk factors for harmonious
development, in addition to the range in which they are consuming is less than what the WHO
says.
Psicologia.com ISSN: 1137-8492
© 2011 Valencia MJ, García MLR, Lozano MM.
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Keywords: Consumption, alcohol, adolescents, education, secondary.
Recibido: 09/12/10 - Aceptado: 09/01/11 Publicado: 16/06/11
* Correspondencia: jazvg@yahoo.com.mx, letyrubigv@yahoo.com.mx, lozanoz2003@yahoo.com.mx
1,2,3 CA Promoción de la Salud. Facultad de Enfermería de la Universidad Michoacana de San Nicolás de
Hidalgo.
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Introducción
El consumo de bebidas alcohólicas se encuentra presente a lo largo de la historia de la
humanidad y se asocia con frecuencia, a situaciones de convivencia que ocurren en la vida
cotidiana de muchas culturas. En México, el uso de bebidas alcohólicas es una práctica
sumamente arraigada en la población general y su origen se remonta al periodo prehispánico,
estando el alcohol vinculado a numerosas actividades sociales, políticas, económicas y religiosas
en los diversos pueblos que han habitado y habitan en este país. (Vargas, 2005)1
En México, la Encuesta Nacional de Adicciones(ENA, 2008)2, muestra que el problema más
importante en adicciones, está en el abuso del consumo de bebidas alcohólicas, con las graves
consecuencias familiares, sociales y comunitarias que esto representa, observando que en
ocasiones se complementa con el uso de tabaco, arraigados ambos en muchas poblaciones,
tanto rurales como urbanas, y que está cobrando víctimas, sobre todo en eventos traumáticos
relacionados con el consumo de alcohol en los jóvenes, que se inician en su consumo a edades
cada vez más tempranas.
La ENA (2008)2 reporta que, para el caso del consumo de alcohol, fueron los estados del centrooccidente los de alto consumo, donde se ubican Aguascalientes, Zacatecas, Nayarit, Michoacán,
Jalisco, Distrito Federal, Hidalgo, Tlaxcala, Puebla y Querétaro, de aquí la importancia de
realizar este estudio.
En virtud de la trascendencia y magnitud de lo que representa el consumo de alcohol en
adolescentes, ya se han realizado proyectos de investigación sobre este tema, encontrando que
Villatoro y colaboradores (2002)3, reconocen el inicio temprano en el consumo de tabaco y
alcohol, como una situación que incrementa las posibilidades de uso de mariguana, inhalables,
cocaína y otras drogas.
Destacan el bajo nivel de percepción de riesgo del tabaco y alcohol, como precursores para el uso
de otras drogas, particularmente cuando ese inicio es a edades tempranas, por lo que es
necesario diseñar y aplicar estrategias que ayuden a evitar o postergar el consumo en
adolescentes. Así mismo, Medina-Mora et al. (2003)4, refieren que si los jóvenes consideran
"muy peligroso" el uso de drogas, puede activarse un factor protector del riesgo de consumo,
observando que si bien, esta percepción no los limita a que decidan experimentar con drogas,
pero si es probable que los predisponga para que continúen usándolas después de haber
probado sus efectos. Por lo que estos autores recomiendan reforzar la percepción dañina de las
drogas sobre la salud, ya que es el principal motivo expresado por los adolescentes que ellos
estudiaron, para no acercarse a ellas.
Por su parte, Acosta y Casique (2007)5, en su estudio refieren que se demostró que un sistema
familiar protector disminuye las probabilidades de ser usuario de tabaco, alcohol, mariguana y
alucinógenos. Por lo tanto, el apoyo de la familia, amigos o las redes sociales son importantes
para ayudar a los adolescentes a resolver problemas, adaptarse ante la adversidad, así como
mantener un sentido de dominio y control de las circunstancias de su vida. La atención, el
respeto e interés por las cuestiones personales y de interacción social del adolescente,
promueven en él la seguridad y sensación de bienestar que actúan también como protectores
hacia las conductas de riesgo, entre ellas, las relacionadas con el consumo de alcohol y tabaco.
Respecto a los factores sociales relacionados con el consumo de sustancias adictivas, Blum
(2003)6, enfatiza que la disponibilidad de tiempo de los padres hacia sus hijos, la presencia de
rituales familiares y las actividades compartidas son factores protectores. En su estudio,
demuestra que el ambiente familiar juega un rol esencial en la adquisición de conductas de
riesgo, si existen pobres habilidades interpersonales, baja tolerancia al estrés, escasa
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responsabilidad, evasión de la interacción así como dificultades de comunicación entre padres e
hijos.
En este sentido, Santander et al (2008)7. Refieren la necesidad de promover acciones que
fortalezcan el vínculo familiar, como un factor protector importante en la prevención de
conductas de riesgo de los adolescentes, reforzando el papel educativo insustituible de la familia
en el crecimiento personal y social de sus integrantes.
En cuanto a la conducta de riesgo y el consumo de alcohol, Olveira y Luis (2005)8 en su estudio
sobre factores de riesgo para el consumo de alcohol en escolares de 10 a 18 años, mencionan al
grupo de pares o amigos como factor importante de riesgo para la experimentación en el
consumo de sustancias adictivas lícitas e ilícitas, así como en el mantenimiento del uso y abuso
de las mismas.
Metodología
Se realizó un estudio Prospectivo, Trasversal, Descriptivo y Observacional, con el objetivo de:
identificar las características familiares y personales relacionadas al consumo de alcohol en
adolescentes estudiantes de segundo y tercer año de educación secundaria, residentes de una
comunidad rural. La muestra estuvo constituida por 161 adolescentes de entre 13 y 15 años de
edad.
Para la colecta de los datos, se aplicó un cuestionario individual, generado a partir de una
operacionalización de variables , de dos segmentos, en la primera parte se contemplan los
aspectos socio-demográficos que permiten caracterizar a la muestra, la segunda parte
estructurada con preguntas cerradas, dicotómicas, y un total de 22 reactivos, de los cuales 13
se relacionan con los aspectos personales y 9 de aspectos familiares que pueden influir en el
consumo de alcohol de estos adolescentes estudiados.
En los aspectos Éticos, se observó que toda investigación del área de la salud se encuentra
normada por el reglamento de la Ley General de Salud para México, incluyendo la autorización
por el Comité de Bioética y la aplicación de un consentimiento libre y esclarecido que se hizo
extensivo, para su autorización, a los padres o tutores de los adolescentes estudiados.
Resultados
En cuanto al sexo, el de quienes se aplicó el cuestionario El 54.1% fueron del sexo masculino y el
45.9 % del sexo femenino. Respecto a la edad, el 21 % de 13 años, el 62% pertenecen a la edad
de 14 años y por último el 17% de 15 años. Su ubicación en el grado, el 51% pertenecen al 2°
grado y el 49% pertenecen al 3 grado.
Fue posible identificar que el 18% de los adolescentes encuestados reconoce que consume
alcohol, 11.9 % la combinación de alcohol y tabaco, y el 3% sólo tabaco.
Al cuestionarles qué edad tuvieron cuando consumieron alcohol por primera vez, el 11%
responde de 10 a 12 años, y el 68% después de los 13 años. 17% menciona que el primer contacto
con el alcohol fue en reuniones familiares, y el 6% manifiesta que tomo alcohol para "por
curiosidad". En este sentido, el 3% contestó que ingirió alcohol para evadirse de la realidad por
tener problemas en su familia y el 2% relacionó el consumo de alcohol con sentimientos de
soledad.
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El 20% de los adolescentes que consumen alcohol, refirieron que sus padres conocen de esta
práctica y el 3% manifestó que sus padres los reconocen como consumidores de alcohol y
tabaco.
Al preguntar sobre la compañía con la cuál realizan el consumo de alcohol, el 30% refirió a los
amigos, 8% con familiares como el papá, tíos o primos y el 4% manifestó que lo consumen a
solas.
Al cuestionarles si ellos saben o conocen que sus amigos consumen algún tipo de sustancia, el
23% refirió conocer a sus pares como consumidores de alcohol y tabaco juntos, 13 % los
identifica como consumidores de alcohol, tabaco y otro tipo de sustancia ilícita, sin especificar
cuál, y 8% es reconocido como consumidor sólo de alcohol.
Al preguntar si saben o conocen que en su familia consumen algún tipo de sustancia, el 17%
responde que en su familia se consume tabaco, 30% contesto que se consume alcohol y el 8%
refiere estas dos sustancias más alguna droga ilícita sin especificar cuál.
En cuanto a identificar que miembro de la familia es el que consume este tipo de sustancias, el
28% refiere al padre, 11 % a tío, 9% hermano y 3% primo.
De los 161 adolescentes encuestados, el 40% contestó que frecuentemente platica con sus
padres, sobre el tema de las adicciones, 40% contestaron que pocas veces lo hacen y el 20%
dijeron que nunca platican con ellos sobre este tema.
Esta misma población contesto en un 14% que frecuentemente platican con sus profesores sobre
temas de adicciones, 63% contestó que pocas veces y el 22% refirió que nunca lo hacen.
Para identificar el comportamiento de las variables, se elaboraron tablas de contingencia y se
aplicó un análisis inferencial con Chi-cuadrada, con los siguientes resultados
Considerar que la comunicación con sus padres y amigos está relacionada con la comprensión
que percibe por parte de su familia. R=17.408, gl=1, sig .000
Considerar que el consumo de alcohol no es perjudicial para él y el beber alcohol por que tus
amigos te presionaron a consumirlo. R= 16.689, gl =1, sig. .000
Considerar que el consumo de alcohol no es perjudicial para él y reconocer que al hacerlo
ocasionas problemas con su familia y amigos. R=7.383, gl= 1, sig .007
El consumir alcohol afecta las relaciones con sus padres ya que lo comparan con amigos y
vecinos que consideran mejores que él. R=7.957, gl=1, sig .005
Percibir que sus padres apoyan en sus decisiones y lo aceptan como es. R=8.349, gl=1, sig .004
Reconocer que el consumo de alcohol afecta física y emocionalmente a su persona. R=32.42,
gl=1, sig .000
Percibir que consumir alcohol le hace sentir emocionalmente bien cuando está en compañía de
algunas personas significativas. R=7.894, gl=1, sig=.005
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Discusión
De acuerdo a los resultados obtenidos, es posible confirmar el consumo de alcohol, tabaco en
adolescentes de 13 a 15 años, estos datos coinciden con los hallazgos a nivel nacional, donde la
Encuesta Nacional de Adicciones (ENA) 2008 2 muestra que el problema más importante en
adicciones en México está en el abuso del consumo de bebidas alcohólicas, con las graves
consecuencias familiares, sociales y comunitarias, y en el uso de tabaco, arraigados ambos en
muchas poblaciones, tanto rurales , sea este el caso, como urbanas, y que esta conducta nada
saludable, está cobrando cada vez más víctimas en los jóvenes que se inician en su consumo a
edades cada vez más tempranas como en este caso, que reportaron un inicio de consumo entre
10 a 13 años. Estas cifras también coinciden con lo encontrado en otros estudios realizados en
México, referentes al uso de drogas en la comunidad escolar de secundaria (Medina-Mora ME,
Cravioto 2003)3
García-Barrón y colaboradores (2010)9, en su estudio "Factores protectores y de riesgo
asociados al consumo de drogas en adolescentes de escuela secundaria de San Luis Potosí,
México" encontraron que el sistema familiar se asoció significativamente con el consumo de
drogas, ubicándose en la categoría de protección, condición que apoya la percepción favorable
de los informantes respecto a la relación con sus padres, como sentirse importantes, aceptados y
motivados por ellos para afrontar problemas. Sin embargo, en este estudio, se reporta que los
padres conocen del consumo y algo más preocupante, se identifica el consumo de los
adolescentes en reuniones familiares y en compañía de los mismos familiares, en una situación
de riesgo, en donde, como lo refieren las autoras, el sistema familiar se asocia significativamente
con el consumo de sustancias adictivas, colocando a los estudiados más vulnerables para
incrementar el consumo de esta sustancia, al estar más familiarizados con ellas.
El riesgo atribuido al patrón de vida explicable en cierta medida porque los participantes
comparten un porcentaje significativo de su tiempo libre con los amigos, pues su influencia
junto con la curiosidad propia de los adolescentes, son los factores que más inciden en el origen
de hábitos, como uso de sustancias adictivas, como es el caso del alcohol, que comienza en el
contexto de los amigos, espacio de socialización donde se aprenden comportamientos hacia las
mismas, como lo refiere García Barrón y Cols (2010)9, en este caso, se identificó la influencia de
los amigos como generadores de la curiosidad que motivó el inicio del consumo, así como el que
son sus pares quienes le presionan para beber alcohol.
En México, el fenómeno del consumo, abuso y dependencia de sustancias psicoactivas legales o
ilegales muestra una preocupante evolución. Sus principales indicadores revelan un incremento
de las prevalencias de consumo, así como una disminución en las edades de inicio,
principalmente para las drogas introductorias como el tabaco y el alcohol.
La serie de resultados estatales para Michoacán, que reporta la ENA 2008 2 abre una nueva
perspectiva en la Salud Pública y la epidemiología de las adicciones en cada una de las 32
entidades federativas del país, con sus propias particularidades, destacando a este estado como
uno de los cuales el índice de consumo de alcohol es de los más altos.
La falsa percepción de los adolescentes en cuanto a que el consumo de alcohol no es perjudicial
para ellos, también es una situación preocupante que habrá de convertirse en la oportunidad
para instrumentar acciones que fortalezcan la auto-estima y la toma de decisiones en los
estudiados, fortaleciendo las herramientas personales para decir "No" al consumo de alcohol
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A partir de la realización de estudios diagnósticos como este, se cubre un vacío de información
que es necesaria para la instrumentación de acciones de intervención,
a nivel de prevención y promoción de ambientes saludables, como es el caso de las instituciones
educativas, ya que los resultados evidencian que un porcentaje alto de estudiantes de nivel
secundaria y en comunidades rurales, no están tratando este tema con sus profesores, lo que
disminuye la función de disminución de riesgo, que representa la escuela o que los jóvenes
adolescentes asistan a la escuela.
De igual modo, la información que se incluye constituye una referencia básica para el desarrollo
de programas de intervención adecuados a las necesidades de cada entidad federativa. Contar
con este tipo de herramientas metodológicas.
Conclusiones
Los resultados de este estudio, permiten identificar en la población de estudio, el bajo nivel de
percepción de riesgo del consumo de alcohol y tabaco, como precursores para el uso de otras
drogas, particularmente cuando ese inicio es a edades tempranas, por lo que será necesario
diseñar y aplicar estrategias que ayuden a evitar o postergar el consumo en adolescentes, con la
implementación de cursos y talleres extra-curriculares como parte de las actividades
complementarias en las escuelas secundarias. De esta forma, se retoma lo que refieren MedinaMora et al. (2003)4 en cuanto a que, con la instrumentación de estas estrategias, se puede
activar un factor protector del riesgo de consumo, fortaleciendo en esta población la concepción
de "peligrosidad" del consumo de sustancias adictivas y los beneficios que les representa el
mantenerse alejados de ellas.
Es igualmente necesario retomar lo que refiere, Santander et al (2008)7, en cuanto a promover
acciones que fortalezcan el vínculo familiar, como un factor protector importante en la
prevención de conductas de riesgo de los adolescentes, reforzando el papel educativo
insustituible de la familia en el crecimiento personal y social de sus integrantes, en virtud de
que los resultados muestran una debilidad en este aspecto.
A partir de estos resultados, y la identificación de necesidades, se presentan algunas
oportunidades para que el equipo multidisciplinario de salud, diseñe y aplique algunas
estrategias de intervención para prevenir el consumo de alcohol y tabaco en los adolescentes,
realizando acciones concretas de promoción para la salud en este grupo etáreo de población.
Tomando en cuenta que ante esta situación epidemiológica, en México y el mundo entero se han
buscado diversas estrategias para disminuir y evitar la ingesta inmoderada de sustancias
adictivas a través de campañas y programas educativos para reforzar los factores de protección
aún desde tempranas edades.
Hay mecanismos de prevención sobre el consumo de sustancias adictivas orientados a la
implementación de modelos educativos, para evitar que las nuevas generaciones sean futuras
consumidoras de sustancias adictivas; también para ampliar los servicios de cobertura, atención
y rehabilitación de los adictos y para que toda aquella población considerada en riesgo de
incorporarse al consumo de sustancias adictivas, tenga la posibilidad de acudir al mecanismo de
atención que requiera.
En México la prevención se da en 3 niveles10:
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Prevención Primaria: Dirigida al individuo sano, tiene como objetivo la promoción de la salud y
la prevención de las enfermedades.
Prevención Secundaria: Dirigida a los ya enfermos y tiene como objetivo evitar que las
enfermedades progresen.
Prevención Terciaria: Corresponde a la rehabilitación, tanto física, como mental y social.
La prevención se puede dar en forma individual y/o colectiva para lograr una sensibilización y/o
motivación. Por otro lado, está la prevención específica que trata de la aplicación de medidas
tendientes a evitar las enfermedades.
Algunos de los programas o modelos educativos han sido elaborados para abordar de manera
general las adicciones, otros más han sido específicos para alguna sustancia como son el Alcohol
y el Tabaco debido a que son los que se consumen con mayor frecuencia, tal vez por ser
sustancias adictivas de las llamadas legales, las cuales se consiguen fácilmente y sin ninguna
restricción.
Dentro de dichos programas se encuentran los Modelos Preventivos que han sido diseñados a
partir de estudios epidemiológicos, médicos y psicosociales enfocados a disminuir los hábitos
tóxicos en poblaciones de edades cada vez más tempranas; entre algunos de estos modelos se
encuentran los siguientes:
El de los Centros de Integración Juvenil (CIJ),
El Chimalli Desarrollo Integral de la Familia (DIF),
El del Consejo Nacional Contra las Adicciones (CONADIC),
El Modelo Preventivo ECO2 (El nombre del modelo ECO2 se construyó, a partir de
algunos elementos esenciales, como un juego de palabras: Epistemología de la
Complejidad (ECO), Ética y Comunitaria (ECO), dando por resultado ECO2),
El programa Yo quiero Yo puedo, entre otros.
Así como los siguientes programas:
El Programa Educativo de Prevención Escolar para Escuelas de Educación
Básica del DF, (PEPE)11
Programa de investigación para prevenir adicciones que impulsará la
Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)12 con espacios para la
formación de recursos humanos en nivel de postgrado.
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Trabajo seleccionado para su publicación en la revista Psicologia.com, de entre los presentados al XII
Congreso Virtual de Psiquiatría Interpsiquis 2011.
Cite este artículo de la siguiente forma (estilo de Vancouver):
Valencia MJ, García MLR, Lozano MM. Consumo de alcohol en estudiantes de educación
secundaria, aspectos personales y sociales relacionados. Psicologia.com [Internet]. 2011 [citado
16 Jun 2011]; 15:9. Disponible en: http://hdl.handle.net/10401/3449
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IMPORTANTE: Algunos textos de esta ficha pueden haber sido generados partir de PDf original, puede sufrir variaciones de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.