Gómez de Ramón Fuster MV. Psicologia.com. 2016; 20:7
Artículo original
De "Procedimiento para la descripción de Estados" A
"Escala de Medida de Estados Mentales"
1
Mª Vicenta Gómez de Ramón Fuster
Resumen
Desde que hace ya más de un siglo aparece por primera vez el término Mentalizar en el ámbito
de la Filosofía, la Mentalización ha sido un constructo objeto de estudio desde múltiples
enfoques teóricos y técnicos, expandiéndose en las últimas décadas de una manera exponencial,
tanto en la optimización del modelo teórico como en lo que respecta a recursos empíricos y
prácticos, trascendiendo a otros ámbitos mas allá de la psicoterapia. Así, la investigación de la
Mentalización se ancla en estudios neurobiológicos "La región de la Mentalización", programas
de prevención en diversos contextos educativos y sociales (parejas, Younger 2006. Familias,
Fearon et al, 2006) y en general de cuidado alternativo, prevención de violencia en escuelas,
crianza reflexiva de los hijos etc. (Allen, Fonagy, 2006).Trabajos que apuntan buenos resultados
en la aplicación práctica de este complejo constructo.
Tal es su importancia que ha llevado a la creación de la Asociación Internacional para el Estudio
y Desarrollo de la Mentalización y cuyas actividades se inician con el Primer Congreso
Internacional sobre la Psicoterapia basada en la Mentalización.
De entre las múltiples actividades de investigación que, muy productivamente, se están llevando
a cabo en el ámbito de la Mentalización, focalizamos nuestro interés en la evaluación de la
misma, ya que nuestro trabajo pretende aportar alguna luz a su desarrollo aplicándolo al
contexto de la Psicoterapia Cognitivo Analítica. Un resumen de los principales aspectos teóricos
y prácticos del modelo cognitivo analítico nos permitirá describir el contexto terapéutico en el
que nos planteamos dicha evaluación.
Posteriormente expondremos brevemente el estado de la investigación en este sentido así como
nuestra propuesta, objetivos y metodología.
Recibido: 09/04/2014 Aceptado: 15/04/2014 Publicado:
* Correspondencia: mavigomezderamon@gmail.com
1
Dra. en Psicología, Especialista en psicología Clínica. Psicoterapeuta (FEAP). Supervisora (Psicoterapia Cognitivo
Analítica). Presidente APCAE (Asociación de Psicoterapia Cognitivo Analítica de España). Profa. (Área de Psicología
Médica) Facultad de medicina. Universidad de Murcia
Psicologia.com ISSN: 1137-8492
© 2016 Gomez de Ramón Fuster MV.
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Orígenes e influencias más significativas en la
Psicoterapia cognitivo analítica
La Psicoterapia cognitivo analítica (PCA) es un modelo terapéutico desarrollado desde el año
1970, en Inglaterra, por Anthony Ryle. Cuenta con una sólida implantación en los Servicios
Públicos ingleses y se encuentra en expansión en otros países europeos. En España, fue
introducida en la década de los años -90 por Carlos Mirapeix, psicoterapeuta comprometido con
su aplicación y difusión, como se ilustra en la serie de artículos publicados por el autor desde
1993 hasta la actualidad. Nuestra implicación en el modelo se refleja en los distintos trabajos
presentados desde el año 1996.
Este enfoque terapéutico se podría encuadrar en lo que denominamos "Modelos integradores de
Psicoterapia", ya que utiliza elementos teóricos y técnicos procedentes de diferentes escuelas, de
una manera flexible. Este modelo centra sus orígenes en el propósito de investigar (con métodos
e instrumentos cognitivos, tales como la técnica de la rejilla de Kelly) el proceso y los resultados
de la terapia psicoanalítica, dando paso a la reformulación de muchos conceptos psicoanalíticos
en un lenguaje más accesible, basado en la nueva psicología cognitiva cuyo núcleo central se
asienta en la teoría de "esquemas personales" de Horowitz (1987).
La incorporación de las concepciones vygotskianas sobre la formación social e histórica de los
procesos mentales superiores y la importancia del "signo" en el aprendizaje humano (Ryle,
1991), unido a la concepción del diálogo interpersonal e interno aportado por Bakhtin,
permitieron una nueva teorización de las ideas derivadas de la teoría de las relaciones objetales,
desarrollada por Fairbain (1962). Así, de un mundo interno poblado por representaciones de
objetos (o partes de objeto) derivados del ego y de los demás que se reeditan a lo largo de la vida,
se pasaría a un modelo de "self dialógico", compuesto por "voces" internas que se han aprendido
en la actividad y conversaciones con los otros. El Yo de cada persona puede tomar así diferentes
posiciones (en el tiempo y en el espacio); el Yo ubicado en una de ellas puede comprender,
criticar, cuestionar o contradecir al Yo que adopta otra posición, en espacios y tiempos
diferentes. Este SÍ MISMO dialógico es esencialmente social, pero no en el sentido de pensar a
un sujeto que se vincula con una comunidad externa a él mismo, sino a partir de pensar que los
otros, a través de sus múltiples voces, forman parte de cada subjetividad. (Bakhtin, 1981).
Este complejo sistema de relación interpersonal, basado en un modelo de procesamiento de
información lineal y en paralelo, se conforma en base a procesos de relación tempranos,
vinculados fundamentalmente a la madre como figura fundamental a través de la que se
estructura dicho sistema de relaciones. Se incorporan los desarrollos teóricos derivados de la
teoría del apego de Bowlby, en sus versiones más actuales, como se verá más delante.
El modelo bio-psico-social (Engel, G, 1977, 1980), por su parte, dota a la PCA de una estructura
teórica que nos permite encarar la complejidad de los problemas que tratamos, estructura que
se ve reforzada por las aportaciones que provienen de la teoría general de sistemas (Von
Bertanlannfy, 1965), de la cual se toman en consideración aspectos de los diferentes subsistemas
que componen el ser humano, cada uno de los cuales puede verse alterado en un padecimiento
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
particular. (Mirapeix, 1994)
El ejercicio sistemático de una visión integradora (intersistema e intrasistema) nos lleva a
concebir al ser humano como una totalidad, en la que sus aspectos cognitivos, afectivos,
conductuales, relacionales, biológicos, históricos, antropológicos y socioculturales están ligados,
Es esta la única forma posible de aproximarse a la complejidad de la patología que es lo mismo
que decir a la complejidad del ser humano. (Ryle, 1991)
Se trata, por lo tanto, de un modelo teórico de clara inspiración interpersonal, basado en
esquemas, caracterizado por focalizar en las conductas- problema y en los patrones de relación
interpersonal aprendidos. Propone una concepción de circularidad causal y de
complementariedad entre los factores implicados, lo cual permite el diseño de intervenciones en
un nivel de integración intrasistema (transversal). Sólo desde aquí podremos trascender la
escisión entre los tres componentes básicos del comportamiento (en el subsistema psicológico)
que son la cognición, el afecto y la conducta, para así poder acercarnos a una comprensión más
global de los mecanismos íntimos del funcionamiento del sujeto (Mirapeix, 1997).
Características de la PCA
Es una psicoterapia breve. Se establece inicialmente un límite de sesiones (originalmente, 16
sesiones, aunque pueden ampliarse para los pacientes graves, formando parte de paquetes más
amplios de tratamiento).
Es una psicoterapia focal y de acción ya que, por una parte, terapeuta y paciente intentan
clarificar uno o varios focos sobre los que poder trabajar en la terapia, lo que permite establecer
uno o más procedimientos patológicos utilizados por el sujeto, para los que se podrán utilizar un
amplio rango de métodos terapéuticos. Y, por otra parte, esta terapia permite la interrelación
entre distintos procesos mentales (cogniciones y afectos), la acción y las consecuencias de la
misma. Una concepción pre-activa y retro-activa de los procesos ayuda, de manera definitiva, a
comprender la interrelación entre los niveles indicados.
Es una terapia cognitiva, en la medida que utiliza de forma plena la capacidad del paciente para
pensar acerca de sí mismo, de sus estrategias cognitivas de afrontamiento, de sus esquemas
básicos (estructuras centrales de significación: valores, creencias, "principios" etc.). Por otra
parte, es una terapia que utiliza sistemáticamente los auto-registros y las tareas para casa.
Muchas de las técnicas utilizadas son tomadas de los enfoques cognitivo-conductuales.
Es una terapia analítica, puesto que toma en cuenta fuerzas desconocidas para el sujeto, ideas
que están en un nivel inconsciente, deseos y registros de memoria que no son directamente
accesibles al sujeto. Asimismo, y de manera muy importante, toma en consideración el poder de
la relación paciente/terapeuta, entendiéndola en términos de transferencia/contratransferencia.
Es una terapia que se puede aplicar en múltiples settings. Se incluyen pacientes ambulatorios de
Centros de Salud Mental públicos, de Hospitales de Día, de práctica privada, de Departamentos
de Asistencia Social, así como terapeutas procedentes de diferentes entrenamientos primarios
como: psiquiatras, psicólogos, médicos, ATS y trabajadores sociales.
Es una terapia que requiere supervisión. Es una terapia que necesita ser llevada a cabo bajo
supervisión hasta que el terapeuta adquiera madurez en sus habilidades.
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Evaluación de la mentalización
Entendemos la Mentalización como un constructo multidimensional que implica una serie de
habilidades cognitivas, un conjunto de conocimientos, un sistema representacional para los
estados mentales y cuatro polaridades (procesos automáticos y controlados; cognitivos y
afectivos; basados en lo interno o en lo externo; focalizados en sí mismo o en los demás). Este
conjunto de variables articulado, da lugar a las distintas funciones de mentalización. (Lanza
Castelli, 2011b) y su objetivo fundamental es focalizar toda la atención en los Estados Mentales.
La evaluación de la mentalización, en el ámbito clínico, hasta ahora se basado en dos objetivos
primordiales:
Por una parte, detectar los recursos y debilidades del paciente en dicha función y por otra, las
diversas modalidades en que el paciente es deficitario en su función mentalizadora y la relación
entre estas y el malestar que presenta.
El método pionero para tal evaluación se ha basado en la Entrevista de Apego adulto (AAI, adult
attachment Interview). Una serie de preguntas tendentes a explorar las relaciones de apego
tempranas. (Steele, Steele, 2008).
A partir de las respuestas de estos últimos, Fonagy y colaboradores proponen la extracción de un
puntaje para la Función reflexiva en una escala de 1 a 9, a la vez que identifican cuatro dominios
en los que la misma se expresa (Fonagy et al, 2008).
Este método ha mostrado altos niveles de validez y confiabilidad en diversos estudios pero
también se ha cuestionado por las dificultades de aplicación (tiempo, complejidad...) en la
práctica clínica diaria (Meehan et al. 2009).
Lanza Castelli junto con Itziar Bilbao diseñaron un instrumento que evalúa la mentalización de
modo diferenciado según el esquema interpersonal activado. Lo denominaron Método para la
Evaluación de la Mentalización en el Contexto Interpersonal (MEMCI).
Si bien se ha demostrado de mucha utilidad para el trabajo clínico, su administración y
evaluación requieren también de un tiempo considerable (Lanza Castelli, Bilbao Bilbao, 2011)
La búsqueda de un cuestionario de mas fácil aplicación, llevó a estos autores a la creación del
Test de Situaciones para la Evaluación de la Mentalización (TESEM), produciendo un
instrumento que requiere un tiempo reducido de administración y evaluación, y que brinda, a la
vez, información variada y de considerable riqueza sobre las habilidades mentalizadoras del
paciente o entrevistado
El TESEM consta de 10 historias breves o situaciones que se le presentan al entrevistado (la
administración puede ser individual o colectiva, en cuyo caso se responde por escrito). Hay dos
series, una masculina y otra femenina.
Para cada historia se formulan una serie de preguntas que instan a mentalizar, sea en relación al
self, sea en relación al otro. Las respuestas del entrevistado son posteriormente tabuladas, y
puntuadas, de modo tal que se realizan dos tipos de análisis, cuantitativo y cualitativo.
El análisis cuantitativo se basa en la Escala para la Función Reflexiva (Fonagy et al., 1998), con
algunos agregados, obteniéndose dos tipos de puntajes: uno específico para cada una de las
facetas de la mentalización que evalúa el test; otro general, producto del promedio de los
puntajes parciales.
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
El análisis cualitativo identifica variables tales como: funcionamiento de las distintas
capacidades de la mentalización, vigencia de tal o cual modo prementalizado de experimentar el
mundo interno, grado en que se logra la separación y diferenciación de la mente propia y la
ajena, capacidad para ponerse en el punto de vista del otro, capacidad para identificar y regular
los propios afectos, etc. (Lanza Castelli, 2011).
Evaluación de los "Estilos de Mentalización"
Hasta ahora el interés en la evaluación de la mentalización se ha orientado hacia la obtención de
una variada información sobre las habilidades mentalizadoras del paciente.
Nuestra contribución a la evaluación de este importante constructo se orienta a la identificación
de las diferencias en modelos mentalizadores, partiendo del presupuesto de que,
independientemente de que en los pacientes podamos encontrar diferencias en cuanto a grado
en su capacidad mentalizadora, la cualidad y contenido de sus Estados Mentales y los
procedimientos de rol consecuentes,tienen una función adaptativa, permiten o han permitido la
adaptación a un contexto relacional concreto. Entendemos además que lo que subyace a la
sintomatología o descompensación emocional puede ser la inadecuación al contexto actual de
un "estilo mentalizador" concreto, no en el sentido de déficit al que aluden los autores
mencionados sino a la no adecuación en el contexto relacional actual, bien porque como afirma
Ryle (2006), de acuerdo con Bowlby- un rol recíproco, que tuvo éxito en el pasado, puede no
encajar con la percepción de la realidad actual. Entonces, si el sujeto no es capaz de readaptar el
modelo operativo, podría aparecer el síntoma como una distorsión esperpéntica de ese rol
recíproco.
O bien porque la distancia entre las conductas seguras y las gratificantes se hace tan grande que
genera inseguridad y sufrimiento. Si es así, el sujeto puede aferrarse a un repertorio de
conductas de apego "seguras" en otro tiempo, dramatizándolas. Puede ser que el feedback
negativo de esas conductas genere más angustia e inseguridad y lleve al sujeto a un
comportamiento circular cada vez más complejo y deformado de los roles que en su momento le
tranquilizaron, a través de un proceso de condicionamiento ¿Podríamos considerar a esas
conductas deformadas los síntomas que llevan al paciente a la consulta? (Gómez de Ramón,
2010)
En base a estos presupuestos nos proponemos una línea de investigación con los siguientes
objetivos.
Objetivo General
Identificación de los "Estilos de Mentalización" a través de la medida cuantitativa y cualitativa
de diferentes Estados Mentales y los procedimientos de rol Recíproco subyacentes y su relación
con distintos Mecanismos de Defensa en distintas poblaciones clínicas.
Objetivos específicos
- Conversión de protocolo "Procedimiento para la descripción de Estados (Ryle y Bennet, 2005)
en una escala de medida.
- Validación de dicha escala en distintas poblaciones clínicas.
- Verificación de la eficacia del instrumento para su aplicación en el marco psicoterapéutico
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Cognitivo-Analítico.
Procedimiento para la descripción de Estados (SDP)
El procedimiento para la descripción de estados es uno de los instrumentos terapéuticos de los
que dispone el modelo Cognitivo Analítico que nos permiten orientarnos para identificar
distintos estados mentales. Nos aporta un léxico común para trabajar con el paciente y describir
lo que le pasa. Permite, asimismo, construir narrativas sobre el self del paciente y el self de otros
(dialógicamente) para poder buscar el origen de las mismas, facilitando, así, la auto-observación
de los estados mentales propios y ajenos.
Este protocolo se construye a partir de estudios realizados con la rejilla de Kelly y aunque en su
origen se elaboró para el estudio de Estados Mentales en pacientes límite, la experiencia clínica
nos confirma que es un instrumento eficaz para el entrenamiento e identificación de Estados de
otros trastornos de la personalidad.
SDP incluye una serie de 11 estados mentales, 10 de los cuales son considerados dañinos.
El cuestionario se divide en dos partes. En la primera se presentan los once estados mentales
encontrados por Ryle, acompañados por breves descripciones de los mismos y se le pide al
paciente que señale aquellos de los estados con los que se siente identificado.
La segunda parte permite una descripción mas detallada de los estados a través de una serie de
preguntas que van asociadas a características y actitudes que ayudarán al paciente a responder.
(Anexo 1)
Para el cumplimiento de los objetivos descritos, nos proponemos la conversión del SDP en una
escala de medida según el siguiente procedimiento:
Distinguiremos en la Escala tres unidades de evaluación que definimos como:
-
Reconocimiento de Estados Mentales
-
Reconocimiento emocional
-
Reconocimiento de Rol
En relación al Reconocimiento de Estados Mentales:
-- Omitiremos las denominaciones, descritas por Ryle, (presentando solo las definiciones) de los
Estados mentales con el fin de evitar sesgos calificativos que pudieran condicionar las
respuestas o favorecer respuestas defensivas e insinceras.
-- Como método de medida, utilizaremos el Diferencial Semántico de Osgood para someter los
EEMM identificados a medidas cuantitativas.
Se trata de un test semiproyectivo que permite la cuantificación del significado, en base a una
combinación de asociaciones controladas y procedimientos de escala. Al sujeto se le proporciona
una serie de conceptos que actúen de estímulo (y que movilicen experiencias personales) y un
conjunto de escalas bipolares construida con adjetivos de significados contrarios, siendo su
única tarea señalar la dirección de su asociación y su intensidad sobre una escala de siete pasos
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
(puntuable de 1 a 7 o de +3 a -3)
El Diferencial Semántico evalúa, por una parte, tres grandes factores aislados por Osgood y que
actúan en los juicios de significación: Evaluación (buena-mala), Potencia (fuerte-débil),
Actividad (activo-pasivo). Por otra parte, se mide la "Distancia Semántica entre dos conceptos"
(es una puntuación entre 0 y el máximo de distancia posible, según la escala de siete pasos
utilizada) en la que la menor puntuación se corresponde con la mayor similitud o identificación
de los conceptos comparados; correlativamente, a mayor puntuación, mayor es su distancia, o
sea, menor relación tienen entre sí.
El Diferencial Semántico no es un test definido, no existen conceptos establecidos previamente,
sino que los elegirá el investigador, según los fines de la investigación. En nuestro caso, los
conceptos elegidos para medir el significado serán los Estados Mentales identificados por Ryle.
(Anexo 2)
-- La medida del Reconocimiento del componente emocional del SDP se realizará a través de
una escala dicotómica binaria (si/no) que nos permitirá evaluar la fuerza de la identificación.
-- En cuanto al Reconocimiento del componente conductual que nos informa de los Roles
recíprocos que devienen de los Estados Mentales identificados, realizaremos la medida
aplicando el mismo procedimiento dicotómico anteriormente mencionado.
Por razones de espacio, presentamos en Anexo 3, un ejemplo de la conversión a escala.
Validación del Cuestionario
Se basará en el diseño de una serie de estudios Piloto sobre distintas poblaciones para constatar
estadísticamente las garantías de validez y fiabilidad psicométrica de la Escala, aplicando
diversas técnicas estadísticas.
El objetivo último es su aplicación en el ámbito de los trastornos de la personalidad aunque
suponemos que si la escala demuestra una sólida validez externa, se podrá aplicar a otras
poblaciones clínicas.
Conclusiones
La conversión en Escala del Procedimiento para la Descripción de Estados Mentales de Ryle es
un intento de proveer al modelo Cognitivo Analítico de otro posible recurso: un conocimiento
predictivo del paciente que favorezca la eficiencia y fortaleza de la técnica dentro de la zona de
desarrollo próximo. Dado el límite de tiempo en el que se enmarca el modelo, el proporcionar al
paciente un perfil de referencia que permite predecir los posibles procedimientos de rol,
favorecería la elaboración de reformulaciones y mapas de procedimientos de forma más
concreta, rápida y fluida. Puede suponer además, una medida de eficacia del modelo
terapéutico.
Bibliografía
Bakhtin, M (1981) "The Dialogical Imagination". Austin, U. Texas Press. En Fernyhough, C. (1992) "The
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
dialogic Mind: A dialogic approach to the Higher Mental Functions". New Ideas in Psychol. 14. Nº (1): 47-62
Engel, G (1977): The need for a new medical model a challenge for biomedicine. Science, vol 136, 126-129
Engel GL (1980): The clinical application of the biopsychosocial model. Am. J.Psychiatry; 137:535544.
Fairbain,W.R.(1962): Estudio psicoanalítico de la personalidad. Ed: Horme.
Fearon,P., Target, M., Sargent, J., Williams, LL., McGregor, J., Bleiberg, E., Fonagy, P. (2006). Short - term
mentalization and relational therapy (SMART): An integrative family therapy for children and adolescents.
Handbook of Mentalization - Based Treatment. Ed.: Allen and Fonagy
Fonagy,P., Target,M. (2008)Playing with reality.A theory of external reality rooted in intersubjectivity. The
International Journal of Psychoanalysis.
Fonagy, P., Target, M., Steele, H., Steele, M. (1998) Reflective-Functioning Manual, Version 5.0 for Application
to adult Attachment. Interviews. London: University College London
Gómez de Ramón Fuster, M. y Martín Fdez. Mayoralas, C. (2010) Autoobservación de los Estados Mentales en
Psicoterapia Cognitivo-Analítica del trastorno Límite de la Personalidad. aperturas Psicoanalíticas, n. 35. Julio
Horowitz, M.J. (1987) States of mind: Configurational analysis of individual psychology (2nd ed.) New York:
plenum
Lanza Castelli, G. (2011). Las polaridades de la Mentalización en la práctica clínica. Clínica e Investigación
Relacional. Revista electrónica de Psicoterapia. Vol. 5 (2) Junio 2011 pp. 295-315
Lanza Castelli, G. (2011 b). La mentalización, su arquitectura, funciones y aplicaciones prácticas. Aperturas
Psicoanalíticas, nº 39
Mirapeix C. (1994) Psicoterapia cognitivo analítica: un paradigma de integración en psicoterapia. Revista de
psicoterapia. Nº 20, 5-44.
Mirapeix C. (1997). De la multicausalidad bio-psico-social a una concepción integradora de la psicoterapia.
Archivos de Neurobiología, Vol. 60, nº 1
Meehan, K.B., Levy, K.N., Reynoso, J.S., Hill, L.L., Clarking, J. F. (2009) Measuring reflective Function with a
Multidimensional Rating Scale: Comparision with Scoring Reflective Function on the AAI. Journal of the
American Psychoanalitics association, 57: 208-213
Ryle, A. (1991) "Cognitive analytic therapy: active participation in change". Ed. John Wiley. Chichester
Ryle, A. & Kerr, I. B. (2006). Psicoterapia Cognitivo Analítica: Teoría y práctica. Biblioteca de Psicología.
Desclée de Brouwer
Steele, H., Steele, M. (2008) Clinical Applications of the Adult Attachment Interview. The Guilford Press
Von Bertalanffy, L. (1968). "General Systems Theory". New York: Brazilier
Younger, D. (2006) The development of Dyadic Reflective Functioning Questionnaire (DRFQ). Thesis
submitted for the degree of doctor of Philosophy. University College, London
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
ANEXO 1
PROCEDIMIENTO PARA LA DESCRIPCIÓN DE ESTADOS
A. ESTADO OK .
"Estoy mas o menos normal en mi vida cotidiana y con sentimientos variados y comunes"
B. ESTADO DE VICTIMA.
Siento que los demás abusan de mi, no me respetan ni me cuidan, me amenazan y me maltratan.
C. ESTADO DE "CARGO CON TODO.
"Hago lo que tengo que hacer, cumplo con las expectativas de los demás sin demasiado placer ni
satisfacción".
D. ESTADO DE RABIA.
"Me siento loco, fuera de control, peligroso, sintiendo violencia hacia mi y/o hacia otros".
E. ESTADO VENGATIVO.
"Me siento enfurecido, cargado de razones, violento, envidioso, deseando devolverla,
vengándome".
F. ESTADO DE "ANESTESIADO".
"Me siento insensible ante emociones, indiferente hacia los demás, desapegado, en automático,
irreal".
G. ESTADO ABUSADOR.
"Me siento sin compasión, despectivo hacia los demás, deseando hacerles daño a otros y
hacerme daño a mi mismo".
H. ESTADO ACELERADO.
"Me siento hiperactivo, con energía, eficiente, contento, a tope".
I. ESTADO DE "NIRVANA".
"Me siento dichoso, feliz, protegido, seguro, cercano a los demás."
J. ESTADO SUPERIORIDAD.
"Siento que soy mejor que los demás, especial, digno de admiración, intolerante ante la
debilidad de otros y ante mi propia debilidad".
J. ESTADO PROTECTOR.
"Me siento capaz de ayudar a otros, fuerte, necesario, responsable, con capacidad de cuidar a los
demás.
? ¿Cómo se siente usted en su vida?
"Contento, Poderoso, Ansioso, Débil, Fuera de control, Con bloqueo emocional, Controlando mi
vida, Energético, Triste, Culpable, Vicioso, Irreal, Seguro, A tope, Desesperado, Exhausto,
Peligroso hacia mi, Desapegado, Eficiente, Dichoso, Sin esperanza, Despreciable, Peligroso hacia
otros, Con síntomas físicos.
? Su actitud hacia los demás es...
"Respetuoso, sumiso, cruel, Exigente, Peligroso, Indiferente, Complaciente, Rechazante,
Temeroso, Competitivo, Cuidador, controlador, Amenazante, Amable, Dependiente, Violento,
Crítico, Despectivo.
? La actitud de los demás hacia usted es...
"Respetuosa, Sumisa, Cruel, Exigente, Peligrosa, Indiferente, Complaciente, Rechazante,
Temerosa, Competitiva, Cuidadosa, Controladora, Amenazadora, Amable, Dependiente,
Violenta, Crítica, Despectiva
? Cómo comienza ? Cómo finaliza, etc
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
ANEXO 2
DIFERENCIAL SEMÁNTICO DE OSGOOD
M
B
P O P
B M
Beneficioso :___:___:___:___:___:___:___: Perjudicial
Débil :___:___:___:___:___:___:___: Fuerte
Inquieto :___:___:___:___:___:___:___: Tranquilo
Agradable :___:___:___:___:___:___:___Desagradable
Duro :___:___:___:___:___:___:___: Blando
Pasivo :___:___:___:___:___:___:___: Activo
Falso :___:___:___:___:___:___:___: Verdadero
Severo :___:___:___:___:___:___:___: Indulgente
Frío :___:___:___:___:___:___:___: Caliente
Bello :___:___:___:___:___:___:___: Feo
Ligero :___:___:___:___:___:___:___: Pesado
Rápido :___:___:___:___:___:___:___: Lento
ANEXO 3
ESCALA DE MEDIDA DE ESTADOS MENTALES
Estado 1
"Estoy más o menos normal en mi vida cotidiana y con sentimientos variados y comunes"
M
B
P O P
B M
Beneficioso :___:___:___:___:___:___:___: Perjudicial
Débil :___:___:___:___:___:___:___: Fuerte
Inquieto :___:___:___:___:___:___:___: Tranquilo
Agradable :___:___:___:___:___:___:___: Desagradable
Duro :___:___:___:___:___:___:___: Blando
Pasivo :___:___:___:___:___:___:___: Activo
Falso
:___:___:___:___:___:___:___: Verdadero
Severo :___:___:___:___:___:___:___: Indulgente
Frío :___:___:___:___:___:___:___: Caliente
Bello :___:___:___:___:___:___:___: Feo
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Ligero :___:___:___:___:___:___:___: Pesado
Rápido :___:___:___:___:___:___:___: Lento
¿Cómo se sentiría usted en este estado?
SI
SI
NO
NO
Contento
Poderoso
Ansioso
Débil
Fuera de Control
Con bloqueo emocional
Controlando mi vida
Energético
Triste
Culpable
Vicioso
Irreal
Seguro
A tope
Desesperado
Exhausto
Peligroso hacia mí
Desapegado
Eficiente
Dichoso
Sin Esperanza
Despreciable
Peligroso hacia otros
Síntomas físicos
En este Estado, ¿cual sería su actitud o comportamiento hacia los demás?
SI
NO
SI
NO
Respetuoso
Sumiso
Cruel
Exigente
Peligroso
Indiferente
Complaciente
Rechazante
Crítico
Temeroso
Competitivo
Cuidador
Controlador
Amenazante
Amable
Dependiente
Violento
Despectivo
En este Estado, ¿cual sería la actitud o comportamiento de los demás hacia usted?
SI
NO
SI
NO
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Respetuoso
Sumiso
Cruel
Exigente
Peligroso
Indiferente
Complaciente
Rechazante
Crítico
Temeroso
Competitivo
Cuidador
Controlador
Amenazante
Amable
Dependiente
Violento
Despectivo
Gomez de Ramón Fuster MV. 2016; 20:7.
Cite este artículo de la siguiente forma (estilo de Vancouver):
De "Procedimiento para la descripción de Estados" A "Escala de Medida de Estados Mentales".
Mª Vicenta Gómez de Ramón Fuster. Psicologia.com [Internet]. 2016 [citado 2016];20:7.
Disponible en:
IMPORTANTE: Algunos textos de esta ficha pueden haber sido generados partir de PDf original, puede sufrir variaciones de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.