La psiquiatrización se refiere al proceso en el que los problemas y comportamientos sociales o emocionales son interpretados y tratados principalmente desde una perspectiva psiquiátrica o médica. Esto implica la medicalización de las experiencias humanas, transformando aspectos de la vida cotidiana en problemas clínicos. Según la Organización Mundial de la Salud, casi el 10% de la población mundial se ve afectada por trastornos mentales comunes en algún momento de su vida, y un metaanálisis realizado mediante encuestas de salud mental en 63 países identificó una prevalencia media del 17’6% a lo largo de 12 meses para los trastornos mentales comunes. En la actualidad no se han descrito de manera detallada los factores que afectan a este proceso, por lo que se ha realizado una revisión bibliográfica para mayor conocimiento del mismo, pues puede suponer una sobrecarga para los servicios de salud mental y tener un impacto en el sistema sanitario, así como un cambio en la práctica clínica que desarrollan los profesionales del área de salud mental.