En este trabajo intentamos aplicar los principios de la semiótica al terreno de la medicina, tal como se ha venido realizando en muchas otras disciplinas, pertenecientes tanto a las ??ciencias naturales? como a las ??humanas?.
Para ello, realizamos un recorrido que se inicia en la semiótica general, cuyos principios fueron descubiertos por Ferdinand de Saussure, un lingüista suizo que intuyó la cultura como un ??sistema de signos?. Se trata de una idea brillante aprovechada después por el antropólogo Lévi-Strauss, quién realizó una distinción clara entre ??naturaleza? y ??cultura?. Esta última se halla compuesta de reglas compartidas de carácter sígnico, que rigen la vida en comunidad y son convencionales; esto explica la gran diferencia entre unos pueblos y otros, frente a la unanimidad que muestran los fenómenos naturales.
Hemos aplicado estas premisas a la enfermedad y la hemos entendido como no asimilada de modo primario a los procesos semióticos, debido a que se trata de algo propio de la naturaleza. Mas, sí que puede ser asumida por el sistema de signos de forma ??secundaria? y esta asimilación se realiza de distinta forma según consideremos al paciente o al médico. El primero de ellos hace una apropiación interpretativa (desde el significado), según las creencias y mitos populares, que nos sorprenden diariamente aún hoy en día. En cambio, el médico realiza este trabajo desde el significante, convirtiendo el saber médico en un verdadero ??sistema? con una sintaxis y leyes propias.