Con 28.800 contagios registrados y cerca de 5.000 fallecimientos en lo que va de año, las residencias continúan siendo uno de los focos críticos de la pandemia. A pesar del avance en la vacunación de terceras dosis - casi el 84 por ciento ya cuenta con la vacuna de refuerzo- la llegada de las navidades y el incremento generalizado de la incidencia supone una amenaza para sus inquilinos.
Desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología consideran que los más importante en estos momentos es evitar riesgos, ventilando bien los espacios, evitando la aglomeración en espacios reducidos, utilizando permanentemente la mascarilla "excepto para comer o beber" y facilitar la labor de los rastreadores notificando rápidamente la situación de contacto con positivos y solicitando las pruebas de detección ante la presencia de síntomas compatibles.
Como punto de partida, y a la espera de que la Conferencia de Presidentes pueda dictaminar nuevas restricciones compartidas para estos días festivos, es necesario extremar todas las medidas, "válidas durante toda la pandemia", en opinión de Francisco Tarazona, vocal de la Junta Directiva de la SEGG. Sin embargo, el colectivo no es partidario de establecer cuarentenas en el caso de las personas mayores, al tener a gran parte de la población institucionalizada con la pauta de vacunación completa.
"No son precisos aislamientos estrictos en estos momentos, sí es necesaria la prudencia", matiza Tarazona, dada la necesidad de contacto social que requieren los adultos mayores para su salud. Esto, en cualquier caso, no les exime de tomar precauciones y seguir "estrictamente las recomendaciones y regulaciones dictadas por las consejerías de bienestar social de cada territorio autonómico para el ámbito residencial" en esta sexta ola de contagios.
Desde PCR hasta pasaporte covid
En la Comunidad de Madrid, el protocolo actualizado continúa permitiendo visitas de familiares a residentes sin límite de personas o duración, aunque se recomienda la realización de un test de antígenos antes de la visita, especialemente en los no vacunados. Además, la consejería de sanidad recomienda limitar los contactos de los residentes que salgan fuera de los centros a pasar las navidades. Estos deberán aportar un test negativo, bien PCR, antígenos o prueba de autodiagnóstico, realizado en las 72 horas previas a su regreso al centro.
Otras como Navarra estudian exigir el pasaporte covid en el acceso a las residencias, tal y como se hizo en la hostelería, ocio nocturno y eventos multitudinarios, una vez obtenga el visto bueno del Tribunal Superior de Justicia foral (TSJN).
La SEGG recuerda que contar con una tercera dosis no supone una "reducción del riesgo absoluta", sino que únicamente reduce las probabilidades de sufrir la enfermedad en sus formas más graves. "Por ese motivo, debemos concienciar a la población vacunada de que están más seguros, pero que deben seguir las recomendaciones sanitarias para evitar reducir al máximo el riesgo de contagio".
En opinión de Tarazona, no es la navidad en sí, sino la situación epidemiológica y el importante crecimiento de la incidencia lo que obliga a cambiar e intensificar las medidas para proteger a las personas que se encuentran en estos centros residenciales.
"Debemos actuar lo más pronto posible para cambiar esa dinámica negativa y evitar episodios de un pasado reciente que nadie quiere volver a vivir".