Resumen
Los trastornos de concentración son frecuentes en el síndrome de fatiga crónica (SFC). En un estudio cruzado, doble ciego y controlado con placebo, el metilfenidato por más de 4 semanas fue superior al placebo en el alivio de la fatiga y los trastornos de concentración. Este estudio observacional describe el efecto del consumo de metilfenidato a largo plazo sobre la fatiga, la concentración, y las actividades de la vida diaria, según lo informado por los propios pacientes. Se envió un cuestionario a todos los pacientes con SFC a quienes se les prescribió metilfenidato en el servicio de medicina interna general de un hospital universitario, entre agosto de 2004 y febrero de 2007, para una posible mejora de las dificultades de concentración y fatiga.
De 194 pacientes consecutivos, 149 (76,8%) enviaron el cuestionario de nuevo. En el momento de la encuesta, el 65,3% había dejado el consumo de metilfenidato, el 34,7% todavía lo tomaba a diario o de vez en cuando. Entre los pacientes que continuaron con el metilfenidato, el 48% informó de una mejora de al menos el 50% de la fatiga, y el 62% informó de una mejora de al menos el 50% de los problemas de concentración. La continua ingesta de metilfenidato resultó en más horas de trabajo en estos pacientes. Se informaron de más efectos secundarios (agitación, palpitaciones, y boca seca) significativamente en los pacientes que habían dejado el metilfenidato que en aquellos que todavía lo tomaban.
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El consumo a largo plazo del metilfenidato por los pacientes con SFC con dificultades de concentración tiene un efecto positivo en aproximadamente uno de cada tres pacientes.
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