Mientras navegan por un laberinto virtual, los adultos jóvenes con alto riesgo genético de enfermedad de Alzheimer demostraron un funcionamiento reducido de las células del cerebro implicadas en la navegación espacial, moviéndose por el laberinto de manera diferente que los controles, según revela un nuevo estudio que se publica en 'Science'.
Identificar biomarcadores tempranos de la enfermedad podría ser un paso valioso en el campo de la investigación de Alzheimer ya que una gran esperanza para reducir al mínimo el desarrollo de la enfermedad radica en la intervención temprana.
Investigaciones anteriores revelan que el Alzheimer comienza en una región del cerebro llamada la corteza entorrinal (CE) mucho antes de que aparezcan los síntomas. Se pueden observar anormalidades en esta área en adultos menores de 30.
Por ello, Lukas Kunz y sus colegas del Centro Alemán para Enfermedades Neurodegenerativas (DZNE, por sus siglas en inglés), en Bonn, Alemania, midieron el funcionamiento de las células cuadrícula, un tipo de célula en la CE que participan en la navegación espacial, en los adultos jóvenes que se mueven por un laberinto virtual. Los investigadores compararon el desempeño de los individuos con el gen APOE-e4 y, por lo tanto, un alto riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer frente a participantes de control.
Aunque el grupo de alto riesgo tuvo rendimiento de la memoria espacial similar en comparación con los controles, las imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI) revelaron que estos individuos tenían reducido notablemente su funcionamiento de las células cuadrícula.
Este grupo también mostró una menor preferencia a moverse en el centro de la campo virtual en comparación con los participantes de control. Un análisis más detallado sugirió que el grupo de alto riesgo puede compensar el funcionamiento anormal de sus células cuadrícula aprovechando el hipocampo, otra región del cerebro asociada con la enfermedad de Alzheimer, con el fin de mantener el mismo nivel de rendimiento de la memoria espacial observado en el grupo control.
Estas diferencias en el funcionamiento de las células cuadrícula, detectables a través de simples fMRI, podrían emplearse para identificar a las personas susceptibles a desarrollar la enfermedad de Alzheimer, aunque se necesita más investigación a largo plazo para confirmar si un un funcionamiento reducido de las células cuadrícula temprano está directamente relacionado con el desarrollo de la patología en el futuro.
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