Los pacientes operados del síndrome del túnel carpiano y de otros síndromes de compresión nerviosa de las extremidades superiores tienen más probabilidades de que se les diagnostique migraña, según un estudio publicado en la revista científica 'Plastic and Reconstructive Surgery'.
Estos hallazgos, realizados por investigadores del Hospital General de Massachusetts y la Facultad de Medicina de Harvard (Estados Unidos), se suman a las pruebas anteriores de una posible "predisposición compartida" entre la migraña y los síndromes de compresión nerviosa de las extremidades superiores.
Los investigadores analizaron los datos de casi 9.600 pacientes que se sometieron a una cirugía de descompresión nerviosa de la extremidad superior (brazo, muñeca y mano) entre 2009 y 2019, extraídos de una gran base de datos hospitalaria. El procedimiento más común fue la descompresión del nervio mediano (71% de los pacientes), que suele realizarse en pacientes con síndrome del túnel carpiano.
Los pacientes fueron examinados para un diagnóstico de migraña, que era más probable en los pacientes sometidos a dos tipos de procedimientos de descompresión nerviosa de las extremidades superiores: la descompresión del nervio mediano y las descompresiones nerviosas múltiples.
En general, el 7 por ciento de los pacientes con descompresión del nervio mediano y el 8,8 por ciento de los que se sometieron a descompresiones nerviosas múltiples fueron diagnosticados de migraña.
Tras ajustar por otros factores de riesgo, las probabilidades de diagnóstico de migraña fueron un 30 por ciento más altas para los pacientes sometidos a descompresión del nervio mediano y un 70 por ciento más altas para los sometidos a descompresión del nervio múltiple (en comparación con la descompresión del nervio cubital en el codo).
En los últimos años, los cirujanos plásticos han desarrollado técnicas de cirugía de la migraña para aliviar los puntos de compresión nerviosa asociados a los ataques de migraña.
Según los investigadores, los pacientes que sufren de compresión nerviosa en las extremidades, como el síndrome del túnel carpiano, y tienen un diagnóstico de migraña, deberían considerar la compresión nerviosa como una posible opción de tratamiento.
Aunque no está claro cuántos pacientes diagnosticados de migraña tienen también síndromes de compresión nerviosa, "es probable que exista un solapamiento biológico y genético entre el síndrome del túnel carpiano y las migrañas", concluyen los coautores.
Por ello, piden que se realicen más estudios sobre los mecanismos compartidos que podrían explicar la relación entre los dos tipos diferentes de síndromes de pinzamiento nervioso. Mientras tanto, los investigadores recurdan que "es importante que los cirujanos de la mano y de los nervios periféricos reconozcan la migraña como una comorbilidad en los pacientes con síndromes de pinzamiento nervioso y ofrezcan un examen exhaustivo de ambos trastornos".