El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que afecta aproximadamente al 3,3% de la población adulta en España. Se caracteriza por síntomas como la falta de atención, hiperactividad e impulsividad, que interfieren significativamente en la vida del paciente.
Este trastorno tiene un elevado impacto tanto en los pacientes como en la sociedad, ya que el coste anual del TDAH no diagnosticado a nivel nacional asciende a 13,3 millones de euros (coste periódico) y 4,1 millones de euros (coste puntual, relacionado con el diagnóstico y el primer año); para los diagnosticados, los costes son de 3 millones de euros (coste periódico) y 1,5 millones de euros (coste puntual).
Estas cifras son parte de las conclusiones del estudio "La carga socioeconómica del trastorno por déficit de atención con hiperactividad del adulto en España", promovido por Takeda y publicado en la revista Global and Regional Health Technology Assessment. Este estudio resalta que el coste total anual por paciente con TDAH puede alcanzar los 15.652 euros. De este total, el 49,8% corresponde a costes económicos, el 28,4% a carga social, el 21,7% a carga sanitaria y el 0,1% a carga legal.
El retraso en el diagnóstico y tratamiento del TDAH incrementa su carga socioeconómica, evidenciando la necesidad de implementar estrategias de diagnóstico y tratamiento temprano a nivel nacional. En cuanto a los costes sanitarios, se estima que el diagnóstico mínimo del TDAH tiene un coste de 577€ por persona, mientras que el primer año tras el diagnóstico los gastos ascienden a 3.534€, reduciéndose a 3.396€ en los años posteriores. Las hospitalizaciones representan el 53% de estos gastos, mientras que la medicación supone el 10%.
