MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los hijos de las personas que han sufrido un episodio traumático tienen mayor riesgo de trastorno de estrés postraumático, del estado de ánimo y de ansiedad, según un estudio elaborado por Rachel Yehuda del James J. Peters Veterans Affairs Medical Center at the Icahn School of Medicine at Mount Sinai (New York), sobre el traumatismo de los hijos de supervivientes del Holocausto nazi.
El estudio, publicado en la revista 'Biological Psychiatry', ha analizado la evidencia de que los supervivientes de los campos de concentración y sus hijos pueden mostrar cambios en la regulación epigenética de los genes.
Para ello, el equipo de la doctora Yehuda examinó estas relaciones con la metilación de 'FKBP5', un gen relacionado con el estrés asociado a un trastorno postraumático y a la depresión. Un total de 32 supervivientes y 22 de sus hijos fueron analizados.
RESULTADOS DEL ESTUDIO
La investigación ha revelado que los supervivientes del Holocausto y sus descendientes muestran cambios epigenéticos en el mismo sitio de 'FKBP5' pero en la dirección opuesta. Los que sobrevivieron han tenido una metilación del 10 por ciento más alta, mientras que su descendencia tuvo metilación del 7,7 por ciento.
"Estas observaciones sugieren que el trauma de los padres es un factor biológico relevante para la descendencia", ha indicado la autora. No obstante, el análisis no ha sido capaz de separar la influencia del género de los padres.
"La observación de que los cambios en los padres y el niño están en direcciones opuestas sugiere que los hijos de padres traumatizados no simplemente nacen con un trastorno de estrés postraumático. Pueden heredan rasgos que promueven la resiliencia, así como la vulnerabilidad", ha destacado el editor de la revista, John Krystal.
EFECTOS EN LA NIÑEZ
El estudio ha sido capaz de identificar los efectos en los gametos como resultado del trauma de los padres. La adversidad es común en niños con padres traumatizados y, "curiosamente se observó una relación entre la metilación y la adversidad reportado en la descendencia, pero en un sitio diferente dentro de la misma región del gen", ha señalado Yehuda.
Según los autores, los resultados indican que puede ser posible distinguir los cambios asociados con experiencias adversas tempranas en la descendencia, de los asociados con el trauma en las generaciones antecedentes. Esto sugiere la importancia de investigar sobre el trauma de los padres, además del trauma personal.
Finalmente, "el estudio plantea importantes cuestiones sobre la transmisión de rasgos de padres traumatizados a sus hijos. La observación de que los mismos genes podrían verse afectados, sugiere algo específico relacionado con la respuesta al estrés", ha concluido el editor de la publicación.
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