MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación francesa de Psiquiatría Biológica, Philippe Courtet, ha asegurado que "los trastornos de ánimo acarrean el mayor riesgo de suicidio", pero que "el simple uso de antidepresivos no es suficiente" para proteger al paciente de este acto, en el marco del XXV Curso de Actualización en Psiquiatría, celebrado del 1 al 4 de marzo en el Palacio Europa de Vitoria-Gasteiz.
El curso ha abordado las innovaciones en la psicofarmacología del suicidio, así como el arsenal terapéutico del que se dispone en la actualidad y las posibles innovaciones transferidas de la identificación de biomarcadores de las conductas suicidas, aunque "hay que reconocer que tratar dichas afecciones psiquiátricas no se corresponde con una reducción sustancial del suicidio", según ha señalado Courtet.
"El estudio de una gran población de pacientes ambulatorios deprimidos, seguidos durante las primeras seis semanas tras el inicio del tratamiento con antidepresivos, puso de manifiesto que los pacientes que tenían antecedentes propios de intento de suicidio o ideación suicida, presentaron menos probabilidad de que la depresión remitiera tras este periodo de tratamiento. Eso significa que los pacientes que más requieren tratamiento eficaz son los que tienen peor respuesta", ha destacado el presidente.
Por ello, actualmente, tal y como explica Courtet, "se dispone de algunas estrategias interesantes para el tratamiento de los pacientes con depresión y riesgo suicida en torno a cómo resultaría el uso preferencial de antidepresivos serotoninergicos, o de la combinación de antidepresivos con antipsicóticos o con el litio".
En esta línea, "las evidencias a favor de la implicación de anomalías del sistema glutamatérgico e inflamatorio en las conductas suicidas se han acumulado durante los últimos años tanto a nivel genético, cerebral y periférico y esto proporciona una base neurobiológica de los estudios que describen que la ketamina, mediante el bloqueo de la transmisión del receptor NMDA, puede aliviar la ideación suicida y contrarresta la inflamación", afirma Courtet, añadiendo que "hoy en día hay tres estudios aleatorizados y controlados frente a placebo que demostraron la eficacia significativa y muy rápida de la ketamina".
Para concluir, hay que tener el cuenta el papel que juega el dolor, y así el presidente francés ha subrayado que "hay evidencias del importante papel del dolor, ya sea social, psicológico o físico, en el suicidio. Es más, el dolor se asocia a todos los fenómenos suicidas de forma independiente a la depresión".
