Autor/autores:
Laws KR; Irvine K y Gale TM
Las mujeres se ven más afectadas por la enfermedad de Alzheimer que los hombres, tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, y las investigaciones recientes muestran que también parecen sufrir un mayor deterioro cognitivo que los hombres en la misma etapa de la enfermedad. El propósito de este artículo es revisar estudios recient...
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Las mujeres se ven más afectadas por la enfermedad de Alzheimer que los hombres, tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, y las investigaciones recientes muestran que también parecen sufrir un mayor deterioro cognitivo que los hombres en la misma etapa de la enfermedad. El propósito de este artículo es revisar estudios recientes sobre el examen de las diferencias de sexo en la función cognitiva en la enfermedad de Alzheimer.
Se realizaron búsquedas electrónicas de artículos, revisiones y metanálisis publicados entre 1/2016 y 12/2017, y se identificaron 298 artículos sobre las diferencias de sexo en la cognición en la enfermedad de Alzheimer. Los temas clave que surgieron fueron las diferencias de sexo en la función cognitiva, los factores de riesgo, la resiliencia y la reserva cognitiva.
La evidencia se está acumulando de manera constante y creciente para confirmar el peor resultado cognitivo para las mujeres que para los hombres con enfermedad de Alzheimer. Aunque son de pequeño tamaño, los efectos se producen en una amplia gama de dominios cognitivos, incluida la memoria visoespacial, verbal, episódica y semántica, algunos de los cuales suelen revelar una ventaja en el procesamiento relacionado con el sexo para mujeres sanas. Las explicaciones se han relacionado con una variedad de factores que incluyen las diferencias en la reserva cognitiva, la capacidad de recuperación, así como la genética (apolipoproteína ε4) y los cambios funcionales y estructurales del cerebro. Las diferencias relacionadas con el sexo en los factores de riesgo, la resiliencia, la reserva cognitiva y las tasas de deterioro tienen implicaciones para la práctica clínica.
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