La incorporación al trabajo de la madre antes del año y medio del bebé afecta a su capacidad de aprendizaje negativamente.

Investigadores de la Universidad de Bristol (sudoeste de Inglaterra) han llevado a cabo un estudio, financiado por el Ministerio de Educación británico, en el que señalan que los hijos de las madres que, tras una baja por maternidad, se incorporan al trabajo antes de que ellos cumplan un año y medio, tardan más en aprender a hablar, leer o escribir.



Los autores han llegado a esta conclusión tras seguir de cerca los progresos de 12.000 niños británicos nacidos entre 1991 y 1992, en relación con el momento en que sus madres decidieron asumir de nuevo sus responsabilidades laborales.



Según los expertos, los casos más problemáticos se registraron cuando los pequeños, dada la ausencia de su madre, se quedaron durante un tiempo largo al cuidado de un amigo, familiar o vecino. Un periodo corto con sus familiares parece no tener malas consecuencias. Sin embargo, el que esos parientes se queden a cargo de los niños toda la jornada es lo que parece ser menos beneficioso



Los autores observaron la evolución de esos niños y concluyeron que su capacidad de aprendizaje puede verse afectada negativamente por la pronta vuelta de sus madres al empleo.