Autor/autores:
Jennifer L. Skeem; Sarah Manchak y Lina Montoya
La libertad condicional es una piedra angular de los esfuerzos para reducir el encarcelamiento masivo. Aunque es poco estudiada, la libertad condicional de especialidad podría mejorar los resultados para el grupo sobrerepresente de personas con enfermedad mental. Comprobar si la libertad condicional de especialidad produce mejores resultados de seguridad pública que la libertad cond...
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La libertad condicional es una piedra angular de los esfuerzos para reducir el encarcelamiento masivo. Aunque es poco estudiada, la libertad condicional de especialidad podría mejorar los resultados para el grupo sobrerepresente de personas con enfermedad mental.
Comprobar si la libertad condicional de especialidad produce mejores resultados de seguridad pública que la libertad condicional tradicional.
Un estudio observacional longitudinal con concordancia de grupo en edad, sexo, raza / etnia, tiempo de prueba y delito en 2 agencias urbanas que ejemplifican la especialidad y la libertad condicional tradicional. La inscripción comenzó el 19 de octubre de 2005; los datos de seguimiento se completaron el 26 de enero de 2013. Los participantes fueron 359 diversos probationers con graves problemas de salud mental y discapacidad funcional. Los probatorios y los oficiales fueron evaluados 3 veces (para los probatorios, retención de 6 meses, 315 de 359 [88%], retención de 12 meses 304 de 359 [85%]) y se obtuvieron registros de seguimiento. Los algoritmos de aprendizaje automático se combinaron con una estimación de máxima verosimilitud dirigida, un doble estimador robusto que explica las asociaciones entre los factores de confusión y la asignación del tratamiento y los resultados. El análisis estadístico se realizó desde el 1 de enero de 2016 hasta el 5 de mayo de 2017.
Los especialistas en libertad condicional fueron asignados a un número pequeño y homogéneo de casos supervisados por expertos. Los datos anteriores indican que los oficiales de la especialidad tenían mejores relaciones con los probationers, participaron más en el tratamiento de los probationers, y confiaron más en estrategias positivas del cumplimiento que los oficiales tradicionales.
La violencia durante un año, determinada por el informe de un preso, el informe del oficial y los registros, y se reanuda durante un período de 2 a 5 años, de acuerdo con los registros de la Oficina Federal de Investigaciones.
Los participantes eran 183 especialidades (73,8% de 248 elegibles) y 176 tradicionales (56,6% de 311 elegibles) (205 hombres y 154 mujeres, edad media [SD] 36,9 [10,6]). A pesar de que la libertad condicional de la especialidad no tuvo un efecto significativo sobre la violencia (odds ratio, 0,97; IC del 95%: 0,69-1,36), las probabilidades de reasentamiento fueron 2,68 veces más altas para los probatarios tradicionales que para los probatorios especiales (IC del 95%: 1,86-3,84; .001). A los 2 años, las probabilidades estimadas de reasentamiento fueron del 28,6% para los especialistas en libertad condicional y del 51,8% para los probatorios tradicionales. Los análisis de supervivencia indican que los efectos de la detención perduraron hasta 5 años.
Aunque no redujo específicamente la violencia, la libertad condicional de especialidad bien implementada parece ser eficaz para reducir la reincidencia general. Los esfuerzos de reforma para las personas con enfermedad mental podrían aprovechar la libertad condicional, un nodo ubicuo y revitalizado del sistema de justicia.
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