Autor/autores:
Saurabh Srivastav; Susanne Walitza y Edna Grünblatt
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es un trastorno neuropsiquiátrico cuya etiología sigue siendo difícil de alcanzar. Sin embargo, la evidencia apoya una alta contribución genética que interactúa con factores ambientales, también conocidos por modular procesos epigenéticos. Estos moduladores epigen&ea...
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El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es un trastorno neuropsiquiátrico cuya etiología sigue siendo difícil de alcanzar. Sin embargo, la evidencia apoya una alta contribución genética que interactúa con factores ambientales, también conocidos por modular procesos epigenéticos. Estos moduladores epigenéticos son una clase de ARNs no codificantes, microARN (miARN), conocidos como reguladores postranscripcionales, que han surgido como posibles actores en los trastornos neuropsiquiátricos ya que juegan un papel en el desarrollo del cerebro, la formación de sinapsis y el ajuste fino. de los genes subyacentes a la formación sináptica y memoria. Aquí, revisamos la literatura actual después de una búsqueda sistemática hasta agosto de 2016. Las palabras clave utilizadas fueron "TDAH", "trastorno por déficit de atención con hiperactividad", "hiperactividad de atención" en combinación con "miARN" o "microARN". Un total de 9 estudios de 34 cumplieron los criterios de inclusión. Los resultados brindan información preliminar, arrojando luz sobre dos aspectos importantes. En primer lugar, describe que los miRNAs modulan la expresión de genes (BDNF, DAT1, HTR2C, HTR1B, SNAP-25) vinculados a la etiología del TDAH. La desregulación de miRNAs afecta los mecanismos reguladores de los genes antes mencionados, lo que puede afectar los procesos del neurodesarrollo que conducen a alteraciones. En segundo lugar, se observan niveles de miARN periféricos alterados tanto en el modelo animal con TDAH como en humanos, sugiriendo una noción de utilización de miARN circulatorio en el diagnóstico de la enfermedad. Por lo tanto, descifrar el papel de miRNAs en TDAH parece un paso prometedor en la comprensión de su etiología.
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