Un nuevo estudio ha encontrado que los niños y adolescentes con déficit de atención e hiperactividad (TDAH) tienen interrumpidas conexiones entre diferentes áreas del cerebro que resultan evidentes en las imágenes de resonancia magnética funcional en estado de reposo (rfMRI). Los hallazgos, publicados en la edición digital de 'Radiology', apuntan a la posibilidad de que rfMRI ayude a proporcionar objetivamente un diagnóstico exacto y temprano de un trastorno que afecta aproximadamente al 5 por ciento de los menores.
El TDAH se caracteriza por grados inapropiados para la edad de falta de atención, hiperactividad e impulsividad. Estudios de resonancia magnética funcional, que mide la actividad cerebral cuando una persona se concentra en una tarea en particular, han implicado al circuito frontoestriatal del cerebro, una colección de caminos de los nervios en el lóbulo frontal del cerebro que ayuda a controlar la conducta, pero se conoce poco la fisiología específica del cerebro en el TDAH.
Para el nuevo estudio, los investigadores utilizaron rfMRI, una técnica relativamente nueva para evaluar la función de los nervios cuando el cerebro no se centra en una tarea específica. Estos expertos compararon los resultados de rfMRI en 33 niños con TDAH, con edades de 6 a 16 años, con 32 controles sanos de edad similar.
Los autores correlacionaron los hallazgos de la resonancia magnética con los resultados de las pruebas de la función ejecutiva, un término usado para el conjunto de procesos mentales implicados en la planificación, la organización, la gestión del tiempo y la regulación de las emociones, entre otras cosas. Las personas con TDAH suelen poseer una función ejecutiva anormal.
Los resultados mostraron que los pacientes con TDAH tenían alterada la estructura y la función localizadas en áreas del cerebro como la corteza orbitofrontal, que participa principalmente en el procesamiento cognitivo de la planificación estratégica, y el globo pálido, que está implicado en el control inhibitorio.
"Nuestro estudio sugiere que las anormalidades estructurales y funcionales en estas regiones del cerebro pueden causar la falta de atención y la hiperactividad de los pacientes con TDAH y estamos haciendo un análisis más profundo de su correlación con los síntomas clínicos --afirma Qiyong Gong, neuroradiólogo del Departamento de Radiología en el Hospital del Oeste de China de la Universidad de Sichuan--. Nuestros resultados preliminares muestran la asociación entre los hallazgos de la imagen y los síntomas".
Los investigadores también encontraron anormalidades en las conexiones entre las redes del cerebro en estado de reposo asociadas con la disfunción ejecutiva. Estas anomalías indican alteraciones cerebrales más extensas en el TDAH de lo que se había demostrado, subraya el doctor Gong.
Explorar la asociación entre la actividad cerebral y la función ejecutiva puede ser útil para diagnosticar a los pacientes con TDAH y entender la fisiopatología subyacente de la condición, según este experto. "Nuestros resultados sugieren la potencial utilidad clínica de los cambios en rfMRI como un marcador útil, que puede ayudar en el diagnóstico y en el seguimiento de la progresión de la enfermedad y, en consecuencia, aportar información sobre la intervención clínica oportuna", augura.
No obstante, el doctor Gong indica que se necesitan estudios más grandes para validar los resultados. Los investigadores también planean analizar los cambios en la conectividad a lo largo del tiempo en los pacientes con TDAH y explorar las potenciales diferencias en la conectividad funcional entre los subtipos clínicos del TDAH, como la falta de atención e hiperactividad.