Wenceslao Peñate Castro, catedrático de Psicología de la Universidad de La Laguna: Las fobias se curan utilizando terapias psicológicas y también psicofármacos.

Una fobia es un miedo intenso y desproporcionado ante objetos o situaciones concretas como, por ejemplo, a los insectos o a los lugares cerrados. En general, son miedos intensos y desproporcionados que asaltan al hombre ante objetos y situaciones concretas. También se suele catalogar como fobia un sentimiento de odio o rechazo hacia algo. Wenceslao Peñate Castro, catedrático de Psicología de la universidad tinerfeña de La Laguna habló de todos ellos en los Cursos de Verano de la UPV.



Cuestionado sobre los tipos de fobia y personas que padecen la misma pero en distinto grado, este especialista apuntó que hay fobias hacia todo tipo de y también ante diferentes situaciones sociales, ir al dentista, la visión de la sangre. Efectivamente existen distintas intensidades de la persona hacia la fobia y, además, en la mayoría de los casos la persona padece más de una fobia. Ahí está el miedo a hablar de cara al público, que se acompaña de una claustrofobia o de una agorafobia.



Hay distintos caminos por los que adquirimos fobias. Así en el miedo a volar puede existir el recuerdo de un mal aterrizaje, de un viaje movido con vientos, truenos y relámpagos. Este miedo lo asociamos con el pánico a volar. Luego hay muchas consideraciones que oímos a lo largo de la vida, en nuestros padres, en nuestra familia: 'Yo eso no lo hago porque me da no sé que'; 'A mí eso me da mucho miedo'; 'A mí eso no me gusta'... No es que lo heredemos genéticamente, sino por un proceso de asociación o educativo. E igual que se aprende se desaprende.



En opinión de este especialista las fobias se curan utilizando terapias psicológicas y también psicofármacos. Las dos son eficaces en la curación de la fobia, pero en fobias leves o moderadas no se justifican los medicamentos, que sí son necesarios en situaciones altamente incapacitantes. Los psicofármacos, por sí mismos, no son útiles en la reducción de la sintomatología. Necesitan un cierto trabajo psicológico.



Alrededor de un 10% de la población padece fobias. Las más usuales son a las serpientes y a todas las especies animales. También están las fobias a la sangre, al dentista, a todo lo que se asocia al dolor o a situaciones concretas grandes o pequeños espacios. Para Peñate Castro lo importante en la fobia es tener que enfrentarte a ella. Si no interfiere en tu vida, nunca te preocuparás de ella. Puedes tener fobia a los aviones, pero si no tienes necesidad de usarlos no te preocupan.