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Autor/autores:
Melissa A. Brotman; Katharina Kircanski; Argyris Stringaris...(et.al)
Aunque la irritabilidad es una de las razones más comunes por las que los niños y adolescentes son traídos para recibir atención psiquiátrica, existen pocos tratamientos eficaces. Se necesitan modelos fisiopatológicos sensibles al desarrollo para guiar el desarrollo del tratamiento. En esta revisión, los autores presentan un modelo mecanicista de irritabilidad que integra la investigación clínica y traslacional de neurociencia. Se proponen dos conceptualizaciones complementarias de la irritabilidad patológica: 1) respuesta emocional y conductual aberrante a la no recompensa frustrante, mediada por la disfunción del sistema de recompensa; y 2) enfoque aberrante que responde a la amenaza, mediada por la disfunción del sistema de amenazas. Los autores revisan la literatura fisiopatológica, incluyendo estudios en animales, así como psicología experimental y estudios clínicos. Los datos sugieren que, en relación con los niños sanos, los niños irritables tienen un aprendizaje de recompensa deficiente y una elevada sensibilidad para recompensar la recepción y la omisión. Estos déficits están asociados con la disfunción en la corteza prefrontal, estriado y amígdala. Los jóvenes con irritabilidad también muestran una mala orientación para la interpretación y el etiquetado de amenazas potenciales asociadas con la disfunción prefrontal cortical y la amígdala. Las anomalías en la recompensa y el procesamiento de las amenazas se potencian mutuamente. El trabajo futuro debe poner a prueba las hipótesis fisiopatológicas y las nuevas intervenciones dirigidas a la recompensa y la disfunción relacionada con la amenaza para mejorar el tratamiento de la irritabilidad severa en los jóvenes.
The American Journal of Psychiatry