L
a investigación analizó la relación de los acontecimientos vitales estresantes (AVE) con la sintomatología, externalizante e internalizante, y la adaptación escolar y familiar en la infancia. El número de participantes fue 552, 53.4% niños y 46.6% niñas, de 10 a 12 años. Se comparó un grupo clínico de salud mental con un grupo comunitario. Al menos un AVE ha sido experimentado por el 88.2% de los participantes en los dos últimos años. Los AVE registrados son significativamente superiores en el grupo clínico. Los AVE se relacionan con presencia de sintomatología y menor adaptación, siendo mayor la asociación entre los AVE de tipo familiar y los síntomas de hiperactividad en el grupo clínico. El haber experimentado AVE y el ser paciente predicen tanto la sintomatología como la adaptación.Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:http://clysa.elsevier.es