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El doctor especialista del Centro de Salud Sexual y Reproductiva 'Fuente San Luis' Felipe Hurtado ha explicado que las personas con alteraciones mentales graves tienen "complicado tener una pareja estable por sus deficientes habilidades sociales" y además la medicación que toman puede tener como efectos adversos disfunciones sexuales, por lo que suelen abandonar el tratamiento. Sin embargo, ha destacado que una terapia combinada les permite recuperar su vida sexual sin dejar de tomar la medicación.
Hurtado ha presentado estas conclusiones en la jornada sobre Salud mental y salud sexual que se ha celebrado en el Hospital Peset de Valencia en las que ha recalcado, según ha explicado en declaraciones a Europa Press, en la que ha recalcado la necesidad de que los médicos de atención primaria y especialistas en salud mental conozcan estas terapias para que puedan derivarles los pacientes.
Así, ha señalado que en las revisiones a los pacientes con trastornos mentales deben incluir en su cuestionario preguntas referentes a su vida sexual ya que muchos de enfermos por vergüenza no comentan sus problemas que pueden derivar en un abandono de la medicación. Sin embargo, ha destacado que en la Comunitat Valenciana cuenta con una "amplia" red de 57 centros salud sexual públicos, presentes en todos los departamentos de salud, para poder atender a estos enfermos.
Al respecto, ha aclarado que las personas que padecen alteraciones y trastornos en su salud mental tienen bien por la propia enfermedad o bien como efectos secundarios farmacológicos, alteraciones en su vida sexual, que pueden llevar incluso al abandono farmacológico del tratamiento que necesitan para mejorar su salud mental.
Hurtado ha matizado que los trastornos depresivos leves no tienen una afectación sobre la sexualidad, que suele darse con mayor frecuencia en los casos graves o a partir de los 40 años cuando surgen otras patologías, como diabetes, colesterol, hipertensión, que complican los tratamientos.
Así, ha destacado que las terapias combinadas para los casos menos graves permiten eliminar los problemas psicológicos asociados, como la inseguridad y el temor al fracaso que sufren estos pacientes, junto a la prescripción de medicamentos para producir una erección.
Sin embargo, en los casos en los que la medicación que toman para su enfermedad mental les provoca una disfunción se trabaja para hacerles entender la sexualidad desde una perspectiva "más amplia y afectiva" ya que suelen restringirla al coito.
