Sufrir hipertensión arterial puede provocar trastornos en la erección, al menos así lo afirma un estudio realizado en la Comunidad Valenciana.

Esta investigación ha llegado a la conclusión de que casi la mitad de los españoles hipertensos presenta disfunción eréctil.



A partir del estudio de 507 hipertensos, se concluyó que el 46,5% de estos sufrían impotencia. Esta enfermedad, también denominada disfunción eréctil afecta al 52% de los hombres entre los 40 y los 70 años de edad; índice que llega al 10% si la impotencia es completa.



La principal causa de la impotencia orgánica son las enfermedades vasculares, como la diabetes, la hipercolesterolemia (colesterol elevado en sangre), el tabaquismo o la hipertensión. Para diagnosticar esta enfermedad, se utilizan determinaciones hormonales en la mayoría de los casos.



El tratamiento habitual de la impotencia orgánica es la autoinyección intracavernosa de sustancias vasoactivas (prostaglandina E1) poco antes del coito. En caso de que no funcione, se aplica la prótesis peneana.