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La violencia en el cine (II). Influencia del medio en las conductas heteroagresivas. Aspectos psicopatológicos.
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Autor/autores: Amparo Guerra Gómez; Enrique Guerra Gómez; Ana González Navarro; Carlos Cerquella García.
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Artículo revisado por nuestra redacción
Esta segunda parte del estudio desarrolla todo lo referido a los aspectos psiquiátricos y de trastornos violentos de la conducta, tal y como aparecen reflejados en las películas de mayor taquillaje en España durante la década de los 90.Desde una perspectiva psicopatológica, existen estudios que confirman la creencia, ampliamente difundida, de que los medios de comunicación, de alguna maner...
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Esta segunda parte del estudio desarrolla todo lo referido a los aspectos psiquiátricos y de trastornos violentos de la conducta, tal y como aparecen reflejados en las películas de mayor taquillaje en España durante la década de los 90.
Desde una perspectiva psicopatológica, existen estudios que confirman la creencia, ampliamente difundida, de que los medios de comunicación, de alguna manera, influyen en sus consumidores. Y el cine no es una excepción. De ahí que el objetivo general de este trabajo sea el presentar las conclusiones de aquellos experimentos que tuvieron como finalidad el establecer una relación que iba más allá de una mera correlación. Para ello se analizarán las consecuencias, tanto a nivel personal como relacional, que tienen, o pueden tener lugar, tras la exposición a películas con carácter marcadamente violento.
Para poder llevar a cabo una aproximación rigurosa es importante establecer una distinción semántica entre dos conceptos que, habitualmente, se utilizan como sinónimos y que, sin embargo, no lo son: Agresión y violencia.
Etimológicamente Agresión proviene del latín agredior que significa la acción de acometer contra otro; de cambiar hacia. Para la Real Real Academia Española sin embargo es un acto cuyo objetivo es dañar a otro. Violencia, en cambio, proviene de vis que significa una fuerza impetuosa contra algo. Los autores del tema han procedido a diferenciar un concepto del otro para poder llevar a cabo análisis más precisos en el ámbito científico.
Berkowitz (1996) (V) se basa en el concepto de Robert Benton (1997) de Agresión y su presencia como cualquier forma de conducta dirigida hacia la meta de herir o perjudicar a otro ser viviente que se halla motivado para evitar tal trato. Para aquel autor la violencia es una forma extrema de agresión; un intento premeditado de causar un daño grave (excluye la idea de lo socialmente ilegitimo por su subjetividad). Gómez-Jarabo y Col. (1999) (IX), por su parte, utilizan la definición de agresión de Valzelli (1983) (XXII), como Componente de la conducta normal con diferentes formas asociadas al estímulo y orientadas a un objetivo se expresa para satisfacer necesidades vitales y para eliminar o superar cualquier amenaza contra la integridad física o psicológica; que esta orientada a promover la conservación propia y de la especie de un organismo vivo y nunca, excepto la actividad depredadora, para producir la destrucción del oponente.
El concepto de violencia se aplicaría entonces a las formas de agresión en las que el valor adaptativo se ha perdido. Reflejaría una disfunción de los mecanismos mentales que regulan la expresión y el control de aquélla, además de la influencia ejercida por la educación. Ese autor y otros como Hodge (1992), (III) consideran que para darse violencia previamente debe existir una emoción: tristeza, irritación... etc. El mismo Berkowitz (1996) (V) habla de agresividad como disposición relativamente persistente a ser agresivo en situaciones diferentes.
No obstante, las formas bajo las cuales pueden presentarse la agresión son muy variadas. En este sentido diversos autores han clasificado la agresión en fusión de distintos criterios. A continuación presentaremos algunos con el fin de delimitar el campo de acción del agresor. En lo tocante a las FORMAS DE HETEROAGRESIVIDAD los aportados por :
Montejo (1986)
- Física:
o Por Acción.
o Por omisión (Ej.: abandono de los niños y ausencia de cuidados)
- Psíquica:
o Verbal: crítica, rechazo, insulto, amenaza...
o No verbal: Silencios, omisiones, reticencias, gestos...
Berkowitz (1996):
- Instrumental: Deseo de lograr un objetivo diferente a dañar el blanco (Ej.: dinero)
- Hostil o emocional: Daño directo ala victima (a veces no esta bajo un control voluntario).
Otras clasificaciones:
- Directa
- Indirecta o desplazada [crueldad con animales, piromanía, violencia (Yager y Gitlin 1985)].
- Individual
- Social: racismo, supresión de libertades, inquisición, guerras...
Ledesma (1982) (XIV) y otros autores hablan de la heteroagresividad con carga sexual (sadomasoquismo) así como la agresividad territorial y jerárquica.
Ruiz Ogara (1982) (XX) establece una clasificación dinámica con un marcado carácter sicoanalítico. Este autor distingue entre:
A. EXTERNALIZADA:
a) Sobre objetos externos persecutorios.
b) Sobre normas, reglas y figuras de autoridad.
c) Ligada a pulsiones sexuales (Sádica).
d) Proyectada al exterior pero manifestada en fantasías.
B. REPRIMIDA O ANULADA
C. INTERIORIZADA
Ha sido Gómez-Jarabo (1999) (IX) quien ha reparado en un hecho que debiera darnos que pensar. Tal y como él señala, en la actualidad no aparecen dentro de las clasificaciones de los trastornos mentales (CIE-10, DSM IV) criterios clínicos de agresividad patológica. Siguiendo el DSM IV con algunas modificaciones, la clasificación como sigue:
1. TRASTORNOS MENTALES ORGÁNICOS:
- Alcoholismo y Toxicomanías.
- Epilepsia.
- Traumatismo Cráneo cefálicos.
- Delirium y demencia.
- Otros.
2. ESQUIZOFRENIA:
- Sobre todo la Paranoide.
3. TRASTORNO DE IDEAS DELIRANTES PERSISTENTES
- Depresión disfórica y paranoide (Alonso Fernández 1982).
- Manía e hipomanía endógena pseudo psicopática (Alonso Fernández 1982).
4. TRASTORNO EXPLOSICO INTERMITENTE
5. TRASTORNO ADAPTATIVO
6. REACCIONES AGUDAS ANTE AGRAN TENSIÓN
7. TRASTORNOS SEXUALES
8. TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
- Paranoide
- Borderline
- Antisocial
- ¿Sádica?
9. TRASTORNOS DEL DESARROLLO
- Oligofrenia.
La influencia del cine como medio de comunicación en las conductas heteroagresivas
Diversos estudios concluyen que existe tal influencia y, aunque la gran mayoría han sido realizados sobre el medio televisivo, sus resultados podrían ser fácilmente extrapolables al medio cinematográfico.
Berkowitz (1996) (V) ya señala que, como regla general el publico de los medios de comunicación de masas cree que el cine solo influye en los niños y en personas con trastornos mentales. Sin embargo, parte de la literatura científica contradice esta concepción, en el sentido de que la observación de hechos violentos, ya sean citados o descritos con detalle, aumenta las posibilidades e conductas heteroagresivas.
Los estudios Bandura y Walters (1973) (III) sobre el aprendizaje observacional ya lo habían demostrado previamente. En un experimento citado por Montejo (1986) (XVI) se describe la siguiente situación con una serie de niños que debían observar como un adulto destrozaba una muñeca de plástico. Se comprobó que tal comportamiento era aprendido por imitación y que la agresividad era mayor si la conducta observada resultaba recompensada. Estos autores distinguieron tres aspectos en la consecución de aquella:
a. Potencial agresivo del sujeto.
b. Control interno o externo de la descarga
c. Condiciones de desencadenamiento y/o mantenimiento (estímulos externos o internos).
Eysenck y Nias (1978) (Sex, Violence and the Media) también lo demuestran experimentalmente, añadiendo que es mayor la afectación sobre la agresividad que sobre la sexualidad. Goldstein y Col., citados por Montejo (1986) (XVI), realizaron un experimento que se centraba específicamente en el cine; la metodología seguida fue la siguiente:
a) Mostraron películas de contenido agresivo; por Ej.: La naranja mecánica y Perros de paja.
b) Mostraron películas de contenido erótico; por Ej.: El Decamerón.
c) Y películas de contenido neutro, por Ej.: El violinista en el tejado o Vida en libertad.
En el experimento, que se realizó en Estados Unidos, Canadá, Inglaterra e Italia, se requirió a las personas de la muestra que emitieran una sentencia acerca de la inocencia o la culpabilidad de diversos convictos, antes y después de la presentación de las películas. Los resultados mostraron lo siguiente:
. Las películas agresivas AUMENTABAN la agresividad.
. Las películas eróticas NO TENÍAN EFECTO en la agresividad
. Las películas neutras DISMINUÍAN la agresividad.
¿Cuáles son entonces los principales mecanismos puestos en marcha para el aprendizaje de la violencia? Este respecto John R. Lion (1995) (XV), citado por Kaplan (1995), matiza tres fases:
1. Adquisición
2. Instigación (muy poderosa si el acto violento queda impune)
3. Ejecución.
En el caso del medio que nos atañe la influencia del mensaje cinematográfico no es precisamente trivial, si consideramos que sus representaciones son visualizadas por millones de personas y contribuyen activamente a la creación de estereotipos socioculturales. Gómez-Jarabo (1999) (IX) y otros, señalan el hecho de que sobre la mujer difundirían un modelo preocupado principalmente por el físico, los estudios y el trabajo, destacando el papel de la figura masculina como opresora y transmitiendo que habrá que llevar a cabo un comportamiento agresivo muy intenso para poder luchar contra esa presión. Sobre la influencia de la televisión en la infancia existen estudios que podrían ser extrapolables al cine. El del National Institute of Mental Health, matizado por autores como Freedman (1984) (VII) y Centerwall (1992) (VI), señala que las imágenes violentas tendrían que acompañar de violencia familiar y malos tratos para que las mismas surtieran efecto.
Ciertamente hay factores que favorecen o debilitan la aparición de las conductas heteroagresivas., así Montejo (1986) (XVI) cita los siguientes:
- Tendencia a la imitación y a explorar las propias posibilidades.
- Refuerzo positivo en el caso en el que la conducta se vea recompensada. Si la violencia se acompaña de éxito. Este hecho no disminuye por el hecho de que la violencia, aparecida en la pantalla, se conceptualice como legal o ilegal.
- Identificación con los protagonistas. Ya Erich Fromm denominaba como Necrofilia el hecho de que catástrofes reales condicionasen un clima emocional que provocaba que las personas fuesen a ver con frecuencia películas con catástrofes: interés morboso por el horror.
- Existe un Enganche a través del sentido colectivo. Es innegable que las películas son producidas por unos seres humanos inmersos en sociedades agresivas y violentas debido, en muchos casos, a la falta de contención familiar, lo cual crearía un circulo vicioso, en el siguiente sentido: SOCIEDADES VIOLENTAS producen CINE VIOLENTO. Y viceversa
En general, y para los autores arriba citados son condiciones que favorecen el aprendizaje de la violencia:
I. La falta de contextualización de los actos violentos.
II. La disfunción de las causas reales de esta violencia y/o factores que la precipitan.
III. La forja de estereotipos que la ensalzan: Los criminales aparecen representados por estrellas y/o son los protagonistas.
IV. La ausencia de una condena moral (más que legal).
V. La utilización de la enfermedad mental como pseudojustificación de actos heteroagresivos cuantitativa y/o cualitativamente anómalos, sin razonar ninguna atribución etiológica. En este sentido Gómez-Jarabo (1999) señala la tendencia a considerar como aceptables ciertas conductas psicopáticas.
En cuanto a los mecanismos de acción seguiremos los propuestos por Berkowitz (1986) (V), aunque profundizando algo más sobre el mecanismo a través del cual el cine provoca un aumento de la heteroagresividad. De este modo hay que hablar de:
a. Efectos a corto plazo.
David Philips (1979, 1986) (XVII, XVIII) y otros habían demostrado la existencia de homicidios y suicidios por imitación. El mecanismo más probable por el cual sucederían sería el llamado de CEBADO, definido este de la siguiente forma: Cuando unas personas se encuentran con un estímulo o un hecho que tiene un significado particular se producen otras ideas que tienen un significado muy similar. Estas, a su vez, activan otros pensamientos y tendencias semánticamente relacionados. Estas ideas o tendencias solo serán activadas si tienen un significado relevante en el sentido de agresión.
Está comprobado que el cebado aumenta cuando:
- No se ve que la violencia sea castigada o que se produzcan consecuencias adversas para el agresor.
-El espectador no considera que la violencia sea injustificada o inadecuada.
-El espectador se identifica con las agresiones y llega a imaginarse a sí mismo como el agresor.
-La atención se centra más en la agresión que otros aspectos del acontecimiento.
-El agresor no se distancia psicológicamente de lo que ve o escucha, Ej.: se dice a sí mismo que el acontecimiento es irreal.
b. Efectos a largo plazo.
Ciertamente el cebado cede con el paso del tiempo. No obstante, los pensamientos agresivos pueden condicionar una actividad indiferente hacia la agresión o bien el deseo de atacar por considerarla como un hecho común. Según la Tesis del Cultivo de Gerbner (1986) (VIII) la visión de la violencia cultiva una impresión duradera del mundo como poco fiable, malvado y preocupante. Aunque Berkowitz (V) no es tan extremo, si señala que las personas tenderán a creer que la violencia en la sociedad tiene una mayor prevalencia de la que realmente posee. Esta percepción sólo se desarrollará si no se encuentran en la vida cotidiana otras informaciones que contradigan esas creencias.
Por su parte Huessmann (1984, 1986) (XI, XII) enuncia la llamada Teoría del Guión sobre la base de que los jóvenes, al ver escenas agresivas, desarrollan un argumento de las consecuencias de dicha conducta que dirige sus expectativas en situaciones relevantes y proporcionan una estrategia para manejar problemas en el sentido de que El guión predice lo que probablemente sucederá igual es la mejor forma de comportarse. Se trata de una variante de Aprendizaje Social de Bandura (III); según este autor deben cumplirse una serie de requisitos; a saber:
- Atender y retener la conducta observada.
- Interpretar o codificar esa conducta como beneficiosa.
- Que no se dé la presencia de figuras significativas para el espectador que expresen que la agresión es indeseable.
Si se trata de articular medios de prevención de la influencia del cine sobre las conductas violentas, los trabajos desarrollados por Berkowitz (V) y Montejo (XVI), proponen una serie de pautas a seguir en este sentido:
1. Cuestionar las consecuencias de la divulgación excesiva de un delito real.
2.Tener en cuenta que la observación de un acto agresivo puede condicionar:
2.1.Desorientación
2.2. Violencia negativa.
2.3. Modelos de identificación (centra la información del film en los prejuicios para el agresor y personajes en los que repercute la agresividad).
2.4. Impresión de que se puede realizar.
2.5. Impresión de que merece la pena ser agresivo (refuerzo positivo).
3. Potenciar el papel contenedor de las figuras significativas tales como la familia y la sociedad.
4. Estimular la producción de filmes que posean o bien un carácter neutro o bien, que en caso de contener mensajes agresivos, los encuadre dentro de un contexto y características concretas que disminuyan la posibilidad de estimular las conductas heteroagresivas.
No deja de resultar sorprendente el que, en España, donde existen salas X para las películas erótico-pornográficas, no exista un equivalente para las películas extremadamente violentas.
Modelos y representaciones violentas en la filmografía de los años 90
Como ya se explica en la primera parte de nuestro estudio, los antecedentes del cine violento aparecen a finales de los 70, aunque más específicamente con el denominado psicho-killer, género de origen anglo de gran arraigo universal que crea su propio código estético y semántico. Las características que lo definen serían las siguientes:
. Se representan una serie de crímenes mediante importantes efectos especiales, cometidos por un asesino completamente desenfrenado en escenas repletas de sadismo.
. El mercado es el que dicta la ley y la industria del cine no debe hacer juicios de valor sino que debe servirle (véase la crítica explícita de la película Tesis).
. La pasión de matar es a la vez seductora y fatal (en este sentido Instinto básico).
. Son válidas justificaciones aparentemente morales y/o religiosas para autentificar esas conductas (Ejemplos válidos en Seven, Pulp Fiction).
. El asesino conoce casi todos los huecos del sistema legal y, en el peor de los casos, eludirá el castigo alegando enfermedad mental (así El cabo del miedo).
. Ni siquiera los profesionales de la Salud Mental tienen posibilidades de ser protagonistas utilizando sus conocimientos (Ej.: El silencio de los corderos y Análisis final).
Lo que desarrollamos a continuación es un análisis de la posible influencia del Cine de los 90 en las conductas violentas, tanto a nivel personal como a nivel de las relaciones (pareja, familia, micro y macro grupo social). Un apartado especial merecen aquí aquellos films en los que aparecen personajes con trastornos mentales en los que predominan las conductas heteroagresivas.
Para ello hemos manejamos una muestra basada en datos del Instituto de Cinematografía en la que se enumeran las películas más vistas por los españoles entre los años 90-98 (ambas fechas inclusive). Los apartados de clasificación de las mismas se han realizado en torno a categorías geográficas, y contienen los siguientes títulos representativos:
a. Películas extranjeras:
1ª El Rey León
2ª Instinto Básico
3ª La Bella y la Bestia
4ª Pretty Woman
5ª Ghost
6ª El silencio de los corderos
7ª Aladin
8ª Misión imposible
9ª Seven
10ª La máscara
b. Películas españolas:
1ª Átame
2ª Tacones lejanos
3ª Kika
4ª La pasión turca
5ª Historias del Kronen
6ª Tesis
Debido a que el número de espectadores es notablemente superior cuando se trata de películas extranjeras (fundamentalmente norteamericanas) hemos escogido diez de estas y seis españolas sin perjuicio de que se cite alguna otra igualmente taquillera.
Este dato es, cuando menos, curioso ya que podríamos sospechar que el espectador aprende modelos de conducta propias de otros países (principalmente de los EE.UU.). Sin embargo, no debemos olvidar la influencia educativa de las películas españolas, debido a que el espectador puede identificarse, con mayor facilidad, con aquellas películas que reflejan su contexto cultural. Además haremos una mención especial sobre la película Tesis ya que engloba en su argumento los dos elementos esenciales que se han tratado en este trabajo: los medios de comunicación y las conductas violentas.
Como muestra representativa de las ideas anteriormente expuestas comentaremos nos referiremos aquí a una serie de películas de gran taquillaje y distintas clasificaciones de audiencia.
En Titanic, por ejemplo, podría destacarse la agresividad que queda manifiesta en la separación férrea entre las clases sociales. Esta es realmente trágica durante la salvación puesto que los obreros quedan encerrados; abocados al naufragio. Hablamos de Frustración-Agresividad. Por otro lado, determinados comportamientos individuales (como el del prometido de Rose o el del constructor y el Oficial del barco) dejan ver cómo el cine refleja en las pantallas-patrones de actuación poco loables: narcisistas, cobardes ... No obstante, en la película, esos comportamientos, a la larga, no resultan recompensados y, tal y como se relata, finalmente el prometido de Rose se suicida durante el Crack del 29 y el Oficial termina suicidándose.
¿Es adaptativo ese comportamiento ante una situación límite?
Película de aquellos años con una gran afluencia de público fue sin duda Instinto Básico. En ella se reflejan desviaciones en las orientaciones sexuales de la protagonista (Sadomasoquismo). Además, todas las relaciones sexuales tienen lugar en contextos con un marcado carácter violento (Presencia de drogas y armas blancas). Aparece una dificultad para amar por parte del personaje interpretado por Sharon Stone -Todo el que me importa se muere- ¿O simplemente lo mata?- No puedo permitirme el que alguien me importe.
El final es ambiguo ¿Hace lícita la violencia? ¿Se puede cambiar la violencia por sexualidad?
Extremadamente explícita en su violencia resultó El Silencio de los Corderos, que indaga acerca de los dos tipos de clasificación de psicopatía que existen:
a) Tipo 1: Representado en la figura de Anibal L y caracterizado por la frialdad, la falta de empatía, la ritualización, la carencia de emociones, la ausencia de miedo y remordimientos , junto a una elevada inteligencia así como su capacidad para detectar los puntos vulnerables de los demás.
b) Tipo II: Representada en la figura de Bufalo Bill. Esta patología se caracteriza por la frialdad, una atenuación de las emociones pero con una acusada capacidad para sentir la ira y los remordimientos.
Con connotaciones diferentes, Parque Jurásico también ref1eja una marcada agresividad como plasma la ambición del creador de un parque de animación (Richard Attenbourg), y que hace expresarse al científico Dr. Maleon (Jeff Goldbum) en estos términos: la falta de humildad ante la Naturaleza que se muestra aquí me deja atónito, o Es una violación del mundo natural. Hay una similitud entre esta película y la mítica King-Kong puesto que, en ambas, se alteran las coordenadas espacio-temporales de los animales (dinosaurios y un gorila enorme, respectivamente) desplazándolos de su contexto natural. Finalmente, la realización del parque resulta imposible de llevar acabo por el peligro que, como atracción encierra. Aunque no por ello se aniquila el experimento.
Otra película de gran éxito dirigida hacia un público mayoritariamente infantil y de importantes componentes para nuestro análisis fue La Bella y la Bestia.
En esta producción de Disney la pregunta que se plantea al espectador es la siguiente: ¿Es posible amar a una bestia? Por otro lado el mensaje central defendido es el de que la belleza está en el interior. No obstante, y para que exista un final feliz, La Bestia debe transformarse en un apuesto príncipe. ¿No es esto una contradicción? Tampoco el film escasea en cuanto a prejuicios y estereotipos que pueden llegar a ser muy dañinos para los grupos que los padecen. Cuando La Bella se lamenta de la monotonía de su vida Todo sigue igual que ayer, lo hace deseando pasión, aventuras, incluso encantamientos
¿No es esto acaso un mensaje agresivo contra la realidad que no es capaz de colmar las necesidades de una persona? Tampoco faltan los prejuicios manifiestos contra la edad es un viejo chiflado, dice Gastón del padre de su amada. Además la agresividad se presenta como un medio aceptable para alcanzar los fines: La Bestia debe secuestrar a la Bella para que le ame; el mismo Gastón afirma por casarme con Bella seré muy cruel.
Podemos afirmar en cambio que el mensaje de EL Rey León plantea una "agresividad sana". En varias escenas se relata abiertamente el por qué tenemos que morir y matar para que se cumpla el ciclo de la vida. "Todos estamos unidos por el ciclo de la vida es el método pedagógico ejercido por el padre León, que no castiga a su hijo por sus errores juveniles, sino que le enseña donde y por qué se ha equivocado.
Entre las películas españolas hay que destacar la producción de Almodóvar Tacones Lejanos. En ella se plantea la capacidad de amar y odiar simultáneamente, tal y como expresa su protagonista: A veces también te odié pero en estos momentos también te quería. No menos importante es la presencia de tóxicos (psicofármacos: estimulantes y sedantes) en su vida diaria, así como la necesidad de aquella de redimirse, antes de morir, declarándose culpable de una muerte que le es ajena.
Sin embargo Amenabar, en su ópera prima Tesis, plantea que la violencia puede ser algo innato y que existe en el ser humano un placer latente hacia lo morboso. Esta película gira entorno a la relación, cada vez más estrecha, que se da entre el cine y las secuencias violentas. El ejemplo más radical lo constituirían los "Snuff-Movies", o género en el que los diversos asesinatos son filmados en vivo, al mismo tiempo que están teniendo lugar, y que justifica la ética profesional del brillante académico, pero sobre todo la vida del seductor alumno Bosco Herranz hasta sus últimas consecuencias.
El peligro no se queda en la ficción, dada la fuerza y frecuencia del mensaje .La inevitable gran pregunta que surge para audiencias y profesionales de la Salud Mental sobre las implicaciones de la exposición habitual a contenidos de gran carga violenta es la siguiente ¿Qué características intrapersonales tendría un público con un gusto orientado hacia este tipo de películas?
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