Los trastornos de ansiedad son la patología mental más común en los seres humanos, e incluyen la ansiedad de separación, las fobias específicas, y el trastorno obsesivo-compulsivo entre otros. En perros la ansiedad de separación y las fobias a las tormentas y a los ruidos intensos son relativamente frecuentes y parecen fenotípicamente similares a los que se ven en humanos. En los perros como en los humanos con ansiedad de separación o fobias se aprecian los mismos fenómenos de activación autonómica al encarar el estimulo fóbico, también en las dos especies el trastorno obsesivo-compulsivo esta caracterizado por conductas repetitivas; es más parece que comparten mecanismos neurobiológicos similares como es la participación del circuito amigdalino, así como ciertos tipos de polimorfismos genéticos implicados en el metabolismo de los neurotransmisores. En ambas especies hay también una alta co-morbilidad entre los diferentes trastornos de ansiedad. En humanos los alelos que confieren una elevada susceptibilidad para los diferentes trastornos a menudo están distribuidos irregularmente en la población; los perros domésticos han sido recientemente seleccionados en más de 350 subespecies ofreciendo la ventaja de la concentración en la distribución de los halotipos cara al estudio de los diferentes polimorfismos asociados a determinados trastornos. Concluyendo las similitudes en los fenotipos sugiere que el estudio de los trastornos de ansiedad en perros puede ayudarnos a profundizar en el conocimiento sobre los trastornos de ansiedad en humanos, a la vez que apunta hacia unos posibles mecanismos neurobiológicos similares.