Ni que decir tiene que no ha lugar cuestionar la significación de la relación médico-paciente en la praxis clínica. Es igualmente aceptado por la casi totalidad de clínicos y académicos que el encuentro entre el médico y el paciente se ubica en un escenario o espacio en el cual ambos –el médico y el paciente- desarrollan sendos roles. De tal manera, que el médico lo es del paciente únicamente en ese “setting” y viceversa, siempre que no se trate de situaciones de crisis o de urgencias.
La sala de espera es, de hecho, la antesala de dicho encuentro. En ella, los pacientes y sus familiares esperan a que se les atienda, que se les llame, bien por su nombre o por un código indescifrable para el profano.
Cabe preguntarse si la sala de espera tiene una función específica dentro del ámbito asistencial y, además, si como tal se deberían considerar aspectos de tipo estructural y otros que reflejaran la naturaleza de la misma relación médico-paciente establecida en dicho espacio.
Desde la vertiente de la Psicología Médica pueden aflorar algunas preguntas relativas a la sala de espera cuando se trata de consultas de atención primaria. Citemos algunos planteamientos generales:
-¿De qué se habla en la sala de espera?
-¿A todos los pacientes les agrada encontrarse o reconocerse en ese lugar?
-¿Qué tiempo de espera transcurre?
-¿Los pacientes prefieren que se les atiendas de inmediato nada más entrar o, por el contrario, tener un cierto tiempo previo a la consulta en sí?
-¿En qué se ocupa el paciente cuando está en la sala de espera: organizar su documentación, preparar qué va a decir (sintomatología, preguntas y dudas), tener información de la situación de otros pacientes (dolencias, pruebas diagnósticas, indicaciones y resultados terapéuticos), etc.
A modo de ejemplo, en oncología médica y en oncología radioterápica, v. gr., los temas de conversación que podrían producirse entre pacientes y sus familiares se centrarían, posiblemente, en los efectos secundarios de los tratamientos, en la información sobre técnicas diagnósticas a las que los pacientes se hubieran sometido o en sus expresiones emocionales, en términos muy generales. Precisar, por consiguiente, que todas las anteriores consideraciones deberán ser formuladas y contrastadas tras un detallado estudio descriptivo.
En este trabajo nos planteamos como objetivo general, indagar los ámbitos y especialidades médicas en que se ha estudiado el papel de la sala de espera, destacando particularmente su significación en oncología (y oncología radioterápica) o en atención primaria.
A tal efecto, para responder a este objetivo, se revisa la documentación incluída en Scopus (www.scopus.es), considerada la base de datos o buscador interdisciplinar por excelencia en ciencias de la salud para determinar la presencia de estudios sobre el análisis de lo que son las salas de espera desde la óptica de los aspectos psicológicos y emocionales de la praxis clínica.
Después de examinar la literatura científica a través de Scopus se encontraron 31 documentos, de los cuales 30 de ellos se limitaban al área de la Medicina, 3 a Psicología, 3 a Enfermería y 2 a Ciencias sociales. Dichas contribuciones se obtuvieron haciendo uso de las palabras clave que se señalan, a continuación, Sala de espera/ Psicología médica/ Relación médico-paciente. Junto a esta base de datos, se incorporaron, en la publicación, otras informaciones procedentes de fuentes más generalistas, las cuales son citadas como tales.
En último término se presentan algunas propuestas relativas a profundizar en el análisis de la sala de espera como lugar de encuentro entre pacientes y sus familiares. Se destaca la necesaria diferenciación de dicho estudio entre especialidades médicas, servicios de urgencias, centros destinados a la obtención de pruebas diagnósticas u otros.
Martín Brotat-Ester
Psicólogo - España
Fecha: 16/06/2024
Caridad Hernández Álvarez
Profesional - Cuba
Fecha: 25/05/2024
Caridad Hernández Álvarez
Profesional - Cuba
Fecha: 25/05/2024