Según un artículo publicado en Lancet Microbe, la duración de la inmunidad después de la infección por SARS-CoV-2 es muy variable entre individuos y solo se puede predecir a nivel individual.
Los investigadores analizaron los cambios en la avidez de los anticuerpos y otros marcadores inmunitarios en diferentes etapas de la convalecencia (n = 164), relacionándolos con las características del cuadro clínico. Usando un algoritmo de aprendizaje automático (machine learning) clasificaron los cambios en los niveles de anticuerpos neutralizantes a lo largo del tiempo y predijeron la duración de la inmunidad mediada por anticuerpos.
El análisis mostró cinco patrones distintos de dinámica de los anticuerpos.
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En el patrón que definieron como negativo (n =19) no se desarrollaron anticuerpos al nivel de inhibición del 30 %. El grupo designado como de disminución rápida (n =44) presentó niveles variables anticuerpos neutralizantes desde aproximadamente 20 días tras el inicio de los síntomas hasta <180 días. Los pacientes con anticuerpos neutralizantes a los 180 días desde el inicio de los síntomas (n=52) se clasificaron como grupo de disminución lenta. En ciertos pacientes se observó una disminución mínima de los anticuerpos neutralizantes, clasificándose como el grupo persistente (n= 52), aunque los niveles máximos de anticuerpos variaron. Por último, el grupo denominado como de respuesta retardada (n=3) presentó un aumento inesperado de anticuerpos neutralizantes durante el periodo de convalecencia tardía.
En base a las diferentes dinámicas de desintegración, los investigadores predijeron una amplia gama de duración de los anticuerpos neutralizantes, que varía desde unos 40 días hasta décadas. También encontraron una asociación entre los anticuerpos neutralizantes persistentes y los síntomas de COVID-19 grave.
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