Objetivos
Los procesos emocionales alterados están comúnmente asociados con el inicio y la persistencia de las alucinaciones verbales auditivas.
Sin embargo, hasta ahora no se ha aplicado un modelo emocional extendido de manera integral a los oyentes de voces para diferenciar sus dificultades emocionales de aquellas observadas en poblaciones no clínicas.
Este estudio plante...
Objetivos
Los procesos emocionales alterados están comúnmente asociados con el inicio y la persistencia de las alucinaciones verbales auditivas.
Sin embargo, hasta ahora no se ha aplicado un modelo emocional extendido de manera integral a los oyentes de voces para diferenciar sus dificultades emocionales de aquellas observadas en poblaciones no clínicas.
Este estudio planteó la hipótesis de que los oyentes de voces, en comparación con los controles, mostrarían
(1) mayor reactividad a emociones negativas y menor reactividad a emociones positivas,
(2) mayores dificultades para regular tanto emociones negativas como positivas,
(3) un uso más frecuente de estrategias desadaptativas, y
(4) niveles más altos de alexitimia.
Método
Se realizaron pruebas t para contrastar estas hipótesis, comparando las respuestas de autoevaluación sobre reactividad emocional, regulación emocional y alexitimia entre los oyentes de voces (n = 50) y el grupo de control (n = 53).
Resultados
No se encontraron diferencias significativas entre los grupos en cuanto a la reactividad emocional hacia emociones positivas o negativas.
Sin embargo, en comparación con el grupo de control, los oyentes de voces mostraron mayores dificultades en la regulación de emociones positivas y negativas, un uso más frecuente de la supresión expresiva como estrategia emocional, y niveles más altos de alexitimia.
Conclusiones
Estos hallazgos sugieren que los oyentes de voces enfrentan desafíos específicos en el procesamiento emocional, especialmente en la regulación emocional y en la identificación y expresión de emociones (alexitimia).
Estas dificultades pueden influir en la manera en que experimentan y responden a las alucinaciones auditivas verbales, complicando la gestión de estos síntomas. Comprender estas diferencias emocionales puede proporcionar a los investigadores y clínicos una orientación más clara para la formulación de casos y el desarrollo de tratamientos adaptados a las necesidades emocionales de los oyentes de voces.
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