La obesidad infantil ha aumentado más en los grupos menos favorecidos, según un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Glasgow (Reino Unido) y publicado en 'Archives of Disease in Childhood', que llama a tomar medidas "urgentes" de salud pública para paliar este problema.
Los investigadores encontraron que, a pesar de la meseta en la obesidad infantil registrada desde 2004, la mayor prevalencia de sobrepeso y obesidad se observó principalmente en niños socioeconómicamente desfavorecidos.
Por un lado, los niños de zonas de mayor necesidad, los niños no blancos y los de hogares sin educación universitaria o monoparentales experimentaban una creciente prevalencia de obesidad y sobrepeso. Por el contrario, la prevalencia entre niños de entornos más favorecidos se mantuvo relativamente sin cambios, lo que contribuyó a aumentar las desigualdades.
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La investigación, que utilizó datos de la Encuesta de Salud de Inglaterra (HSE, por sus siglas en inglés) y el Programa Nacional de Medición Infantil (NCMP, por sus siglas en inglés), analizó las tendencias del sobrepeso y la obesidad infantil en Inglaterra entre 1995 y 2019. Las desigualdades evaluadas incluyeron la educación de los padres, estructura, etnicidad e índice de privación múltiple a nivel de área.
El estudio encontró que, por ejemplo, la brecha de desigualdad entre los niños de hogares sin calificaciones versus los que tienen calificaciones de grado aumentó de -1,1 por ciento a 13,2 por ciento durante este tiempo, y la brecha entre hogares monoparentales y hogares de pareja aumentó de 0,5 por ciento al 5,3 por ciento.
En general, los datos mostraron que los niveles de sobrepeso y obesidad infantil aumentaron, con una prevalencia que aumentó del 26 por ciento en 1995 al 31,7 por ciento en 2019, con los niveles más altos y de más rápido crecimiento entre los de 11 a 15 años, pasando del 29,7 por ciento al 31,7 por ciento en 2019. Los aumentos de la prevalencia entre los grupos menos favorecidos han impulsado una ampliación de las desigualdades.
El estudio demuestra que las tendencias generales estables en el sobrepeso y la obesidad infantiles en Inglaterra "ocultan desigualdades cada vez más profundas en términos de género, estructura familiar, origen étnico y educación de los padres".
El doctor Philip Broadbent, investigador clínico honorario de la Facultad de Medicina, Odontología y Enfermería de la Universidad, ha señalado que "la obesidad y el sobrepeso infantiles plantean riesgos importantes para la salud, con una prevalencia mayor en el Reino Unido que en países comparables, con más de un tercio de los niños con sobrepeso".
Dado que se prevé que el Reino Unido será el país con más obesidad en Europa para 2030, abordar este problema es una prioridad de salud pública y, por lo tanto, prevenir y tratar la obesidad en niños y jóvenes es crucial.
"Nuestro estudio, que explora las tendencias a largo plazo en múltiples dimensiones de la desigualdad social y por primera vez las compara con datos administrativos, demuestra que comprender estas desigualdades en evolución en la sociedad es crucial, ya que los factores que impulsan la obesidad pueden variar entre los grupos sociales", ha apuntado Broadbent.
Estos hallazgos subrayan la necesidad "urgente" de políticas de salud pública consistentes y sólidas, según el investigador, "para enfrentar las crecientes disparidades que impulsan el aumento de la obesidad infantil y ayudar a mitigar las desigualdades en salud para un futuro más saludable para todos los niños".
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