La OMS advierte que se agrava la crisis de salud mental entre los profesionales clínicos europeos

La Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS Europa) realizó una encuesta que reveló que los profesionales sanitarios de toda la región tenían una salud mental significativamente peor que la población en general, una tendencia que, según la agencia, contribuía a la escasez de mano de obra y socavaba la calidad de la atención.

Para subsanar la falta de datos exhaustivos, la OMS Europa llevó a cabo la encuesta Salud mental de enfermeros y médicos entre octubre de 2024 y abril de 2025.

La encuesta recopiló más de 90.000 respuestas válidas de médicos y enfermeros de 29 países, lo que la convierte en la mayor evaluación de la salud mental de los profesionales clínicos realizada hasta la fecha en Europa.

Las tasas de participación oscilaron entre el 1 % y el 5 % de la población profesional en la mayoría de los países y fueron inferiores al 1 % en Francia. La distribución por edad y sexo de los encuestados fue comparable a la del personal sanitario en toda Europa.

Los resultados mostraron altas tasas de síntomas compatibles con la depresión y la ansiedad. La violencia por parte de los pacientes o familiares y los horarios de trabajo exigentes fueron los principales factores contribuyentes, mientras que el firme apoyo de los compañeros y superiores y la existencia de protocolos específicos sobre acoso y violencia funcionaron como factores protectores.

Casi 1 de cada 3 encuestados informó síntomas compatibles con un trastorno depresivo mayor, y 1 de cada 4 informó síntomas compatibles con trastornos de ansiedad. Más de 1 de cada 10 participantes experimentó ideas suicidas o pensamientos de autolesión.

Estas tasas eran más altas entre el personal hospitalario y los médicos que trabajaban en servicios de urgencias. La prevalencia de estos síntomas varía mucho entre los distintos países.

Las características compatibles con la depresión afectaban al 15-50 % de los encuestados, con una media del 28 % y una tasa del 31 % en Francia.Francia también registró la segunda tasa más alta de trastornos de ansiedad (41 %) y la tasa más alta de dependencia del alcohol (7 %).

Aunque dos tercios de los encuestados afirmaron que su trabajo era significativo y satisfactorio, muchos menos declararon tener un bienestar emocional satisfactorio, definido como tener pensamientos positivos y sentirse tranquilos, descansados y con energía. En Francia, solo la mitad de los encuestados declararon tener un bienestar emocional adecuado.

Los niveles en toda Europa fueron considerablemente inferiores a los registrados en una encuesta de 2021 en la que se utilizaron las mismas preguntas, y también inferiores a los observados en profesiones no relacionadas con la salud, donde aproximadamente tres cuartas partes de los encuestados franceses declararon tener un bienestar emocional satisfactorio.La mitad de los encuestados afirmó haber sufrido al menos un tipo de violencia.

Las tasas variaban considerablemente según el país y eran más elevadas en Francia, donde cuatro de cada cinco médicos afirmaron haber estado expuestos a ella. La exposición era más frecuente entre los médicos que trabajaban en hospitales de día y servicios de urgencias.

Casi 7 de cada 10 encuestados afirmaron haber sido víctimas con frecuencia de comportamientos agresivos por parte de pacientes o familiares. Aproximadamente 1 de cada 3 denunció acoso o amenazas, y 1 de cada 10 denunció violencia física o acoso sexual. Una mayor exposición a la violencia se asoció claramente con un peor estado de salud mental.

Los horarios no estándar también se relacionaron con mayores índices de depresión, ansiedad y dependencia del alcohol. Los turnos nocturnos y rotativos eran habituales, especialmente en Francia, donde más de 9 de cada 10 encuestados declararon tener este tipo de horarios.

Casi uno de cada cinco encuestados trabajaba más de 50 horas semanales; en Francia, esta proporción superaba un tercio. Más de una cuarta parte de los médicos europeos declararon trabajar más de 50 horas semanales.

Una quinta parte de los médicos y la mitad de las enfermeras afirmaron que trabajaban habitualmente fuera del horario diurno estándar.En Francia, cuatro de cada cinco médicos informaron de tales horarios, con la proporción más alta de Europa.

Menos de la mitad de los encuestados afirmaron tener una autonomía significativa a la hora de organizar su carga de trabajo, incluida la posibilidad de tomarse descansos.

Menos de una cuarta parte de los participantes declararon tener un equilibrio satisfactorio entre su vida laboral y personal.

El apoyo de los compañeros y los superiores era esencial para mantener una buena salud mental, ya que la falta de apoyo se asociaba con mayores índices de depresión, ansiedad e intenciones de abandonar la profesión.

Los protocolos institucionales formales para abordar la violencia y el acoso también contribuyen a mejorar la salud mental de los médicos.

La OMS Europa señaló que muchos de los factores negativos identificados en la encuesta, incluidos los horarios de trabajo, las salvaguardias institucionales y la autonomía en la toma de decisiones, eran modificables.

Las intervenciones estructuradas recomendadas incluyen el seguimiento rutinario de los indicadores de salud mental de los médicos y la evaluación transparente de las medidas adoptadas. La organización hizo hincapié en que todas las acciones deben desarrollarse en colaboración con las partes interesadas pertinentes.

Este contenido fue publicado originalmente en Univadis Francia.