MADRID, 28 Ago. (EUROPA PRESS)
Las mujeres blancas cuya composición genética les pone en mayor riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer son más propensas que los hombres blancos a desarrollar la enfermedad durante un periodo crítico de diez años en sus vidas, según un estudio dirigido por la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California, en Estados Unidos.
Los hallazgos de uno de los mayores estudios de datos de gran tamaño del mundo sobre la enfermedad de Alzheimer -publicados en 'Journal of the American Association of Neurology'-- contradicen creencias de larga duración sobre quién está en mayor riesgo de contraer la enfermedad y cuándo, sugiriendo nuevas vías para ensayos clínicos.
Los resultados del estudio muestran que los hombres y mujeres blancos de 55 a 85 años de edad genéticamente vulnerables tienen las mismas probabilidades de desarrollar esta enfermedad que borra la memoria. Una excepción es que desde mediados de los 60 hasta mediados de los 70, estas mujeres se enfrentan a un riesgo significativamente mayor; lo que puede proporcionar pistas sobre las causas de la patología y posibles intervenciones entre estas mujeres.
"Nuestro descubrimiento es importante porque pone de relieve cómo los ensayos clínicos podrían ponderarse hacia las mujeres --una parte susceptible de la población-- para ayudar a los científicos a identificar más rápidamente las intervenciones efectivas de medicamentos para retrasar o curar el Alzheimer", apunta uno de los autores, Arthur Toga, director del Instituto Stevens de Neuroimagen e Informática en la Escuela de Medicina Keck de la USC.
El estudio incluyó datos de 57.979 norteamericanos y europeos en la Red Interactiva de la Asociación Mundial contra el Alzheimer (GAAIN, por sus silgas en inglés). Este gran proyecto de datos proporciona a los científicos de todo el mundo datos compartidos y sofisticadas herramientas de análisis para abordar una enfermedad que representa alrededor del 65 por ciento de los 47 millones de casos de demencia en todo el mundo.
LOS TIEMPOS Y LOS DATOS HAN CAMBIADO
Los resultados contradicen un estudio influyendo de hace 20 años que encontró que las mujeres con una copia de ApoE4, una variante genética vinculada a la enfermedad de Alzheimer, eran diagnosticadas con la enfermedad 50 por ciento más a menudo que los hombres con el mismo perfil genético.
Los hallazgos presentados en el análisis dirigido por la USC amplían el número de datos de los participantes en nueve veces e indican que la década crítica se sitúa entre 65 y 75 años, más de diez años después del inicio de la menopausia. Trabajos anteriores en animales y humanos han informado de una relación entre la ApoE4, la menopausia y el deterioro cognitivo.
"Tanto trabajo ha dependido de un hallazgo de 1997, pero con herramientas como GAAIN, ahora tenemos la capacidad de volver a investigar con mayor poder estadístico", afirma Toga. Los nuevos hallazgos son significativos porque casi dos tercios de los más de 5 millones de estadounidenses que ahora viven con la enfermedad de Alzheimer son mujeres, según la Asociación de Alzheimer.
Muchos atribuyen el desequilibrio en el riesgo de enfermedad al hecho de que las mujeres, en promedio, viven más tiempo que los hombres. Sin embargo, un creciente cuerpo de evidencia sugiere que hay también otras razones que contribuyen a la diferencia. Por ejemplo, los hombres tienen tasas más altas de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular; por lo que los hombres que viven más tiempo pueden estar más saludables que las mujeres de la misma edad y pueden tener menos riesgo de desarrollar Alzheimer, según el estudio dirigido por la USC.
En el futuro, los doctores que quieren prevenir la enfermedad de Alzheimer pueden intervenir en diferentes edades para los hombres y las mujeres, según la coautora de la investigación Judy Pa, profesora asistente de Neurología en el Instituto de Neuroimagen e Informática Stevens.
"La menopausia y la caída de los niveles de estrógeno, que en promedio comienza a los 51 años, pueden explicar la diferencia --plantea Pa--. Sin embargo, los científicos todavía no saben qué es responsable; necesitan estudiar a las mujeres 10, 15 o incluso 20 años antes de su periodo más vulnerable para ver si hay señales detectables que sugieran un mayor riesgo de Alzheimer en 15 años".
PREOCÚPATE MENOS Y HAZ EJERCICIO
Sólo algunas mujeres tienen un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer entre mediados de los 60 y de los 70 en comparación con los hombres. Para averiguarlo, las mujeres podrían someterse a análisis de su ADN, pero Pa advierte que las pruebas genéticas para la variante ApoE4 no son una "bola de cristal.
"Hay controversia en términos de si la gente debe conocer su estado de ApoE porque es sólo un factor de riesgo -subraya--. No significa que vayas a contraer la enfermedad de Alzheimer. Incluso si eres portador de dos copias de ApoE4, tus posibilidades aumentan mucho, pero aún puedes vivir una vida larga y nunca tener síntomas".
Incluso, si algunas mujeres descubren que están en mayor riesgo, pueden mejorar sus probabilidades haciendo cambios en la vida. "Hacer más ejercicio, despeja la mente, especialmente en la vejez -recomienda Pa--. Adopta aficiones que son cognitiva o físicamente desafiantes. Reduce la ingesta de azúcar procesada porque está vinculado a la obesidad, que se asocia con cualquier enfermedad crónica".
Para este estudio, los investigadores examinaron los datos de 27 estudios diferentes que evaluaron la variación del gen ApoE de los participantes, así como características como sexo, raza, etnia, diagnóstico (normal, deterioro cognitivo leve o la enfermedad de Alzheimer) y la edad en el diagnóstico. Se examinaron los registros de casi 58.000 personas y se realizaron metanálisis en 31.340 blancos que recibieron diagnósticos clínicos en algún momento entre las edades de 55 y 85 años.
La proporción de minorías era tan pequeña que los analistas no pudieron sacar conclusiones estadísticamente significativas sobre su riesgo de enfermedad. Debido a esto, el estudio se centró sólo en personas de raza blanca. "La mayoría de los archivos de todo el mundo tienen un número insuficiente de grupos subrepresentados", lamenta Toga.
No obstante, los investigadores apuestan por realizar estudios que confirmen sus resultados. La USC está trabajando para construir estudios de población más diversos relacionados con el Alzheimer. Históricamente, las mujeres no han sido adecuadamente representadas en los ensayos clínicos, especialmente en los estudios sobre enfermedades del corazón.
En este trabajo, los analistas excluyeron a las personas con antecedentes de accidente cerebrovascular, enfermedades cerebrovasculares, proteínas anormales que contribuyen a la enfermedad de Parkinson y la demencia, mutaciones genéticas que llevan a altos niveles de placas cerebrales tóxicas de amiloides y cualquier enfermedad neurológica.
Los científicos no ajustaron los factores de riesgo conocidos de Alzheimer, como educación, antecedentes familiares de Alzheimer o demencia porque esa información no se proporcionó en todos los conjuntos de datos. Tampoco pudieron adaptarse a las diferencias dependientes del sexo, como el tabaquismo, los cambios hormonales con la edad y el consumo de alcohol.
Acceso gratuito al texto completo.
