El cortisol y la crianza de los hijos predicen vías para la participación social desinhibida y el funcionamiento social en niños previamente institucionalizados

En promedio, los niños previamente institucionalizados muestran déficits persistentes en la regulación fisiológica y conductual, así como una falta de reticencia normativa hacia extraños o un compromiso social desinhibido (DSE). La crianza posterior a la adopción, específicamente una combinación de presencia de apoyo y estructura / establecimiento de límites, puede proteger contra DSE con el tiempo a través de un mejor funcionamiento adrenocortical.

Este estudio examinó el impacto de la actividad adrenocortical y la crianza posterior a la adopción en DSE durante los primeros dos años posteriores a la adopción (edad de adopción: 16–36 meses) y observó resultados sociales de jardín de infantes en niños previamente institucionalizados (n = 94) en comparación con los no hijos adoptados (n = 52). Los análisis de ruta indicaron una cascada de desarrollo desde la atención institucional (operacionalizada como una variable de grupo dicotómica, edad de adopción y meses de institucionalización) hasta actividad adrenocortical embotada, aumento del DSE y menor competencia social en el jardín de infantes.

De acuerdo con un estilo de crianza permisivo, el mayor apoyo de los padres se asoció con un mayor DSE, pero solo cuando no se acompaña de una estructura efectiva / establecimiento de límites. Además, la estructura parental redujo la asociación entre la actividad adrenocortical embotada y los comportamientos DSE.

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