Julia Langham y colegas informan asociaciones positivas consistentes entre las intervenciones de salud mental previas al embarazo y resultados adversos importantes del embarazo, incluido el parto de un bebé pequeño para la edad gestacional, el parto prematuro y la muerte perinatal (es decir, muerte fetal o muerte neonatal).
Langham y sus colegas vincularon los datos de resultados obstétricos rutinarios del Servicio Nacional de Salud de Inglaterra (NHS) con los registros de atención de salud mental.
En general, las asociaciones fueron más fuertes cuando la intervención de salud mental fue más próxima al inicio del embarazo y con una escala cada vez mayor del tratamiento de salud mental.
Sin embargo, la asociación con la muerte perinatal fue relativamente modesta y se limitó a la proporción relativamente pequeña de mujeres que recibieron tratamiento hospitalario.
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