Resumen
Varios estudios muestran una asociación entre la esquizofrenia y bajos niveles de vitamina D. Hasta la fecha, hay pocos estudios sobre la prevalencia de la deficiencia de vitamina D en pacientes con trastorno bipolar. La hipótesis que hemos llevado a cabo se trata de que la deficiencia de vitamina D es menos común entre los pacientes con trastorno bipolar que entre los pacientes con esquizofrenia o trastorno esquizoafectivo. Una segunda hipótesis es que la deficiencia de la vitamina D es más prevalente entre los pacientes con esquizofrenia, trastorno esquizoafectivo, o tratornos bipolares que entre la población holandesa general. La mayoría de los estudios se han realizado con pacientes hospitalizados; en este estudio, sólo incluimos pacientes ambulatorios.Todos los pacientes ambulatorios de un centro de trastornos bipolares y todos los pacientes ambulatorios de 3 equipos de terapia comunitaria asertiva flexible fueron invitados a participar en este estudio transversal.
Se incluyeron 118 pacientes con trastorno bipolar y 202 pacientes con esquizofrenia o trastorno esquizoafectivo. Los niveles de vitamina D fueron deficientes en el 30,3% (95% intervalo de confianza, 25,5-35,6) de los casos. El tipo de trastorno psiquiátrico no fue un predictor de la deficiencia de vitamina D. La diferencia absoluta en el riesgo de deficiencia entre la población estudiada y la población caucásica holandesa fue del 23,8% (intervalo de confianza del 95%, 18,3% -29,3%).
En este estudio, la deficiencia de vitamina D fue 4,7 veces más común entre los pacientes ambulatorios con trastorno bipolar, esquizofrenia o trastorno esquizoafectivo que entre la población general holandesa. Dada la alta prevalencia de deficiencia de vitamina D, creemos que los pacientes ambulatorios con trastorno bipolar, esquizofrenia o trastorno esquizoafectivo debe considerarse en riesgo de tener niveles bajos de vitamina D. La medición anual de los niveles de vitamina D en pacientes psiquiátricos ambulatorios con estos trastornos parece justificarse para mantener la salud ósea, la fuerza muscular y para prevenir la osteoporosis.
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