ArtÃculo |
25/08/2016
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ong>Resumen
Introducción: Los trastornos somatomorfos (TS) y conversivos (TC) han aumentado su incidencia durante las dos últimas décadas en niños y adolescentes, aunque ambos son habitualmente subdiagnosticados.
Objetivo: Efectuar una puesta al dÃa de la evidencia sobre TS y TC en niños y adolescentes. Método: Se realizó una búsqueda bibliográfica mediante las bases de datos Medline/PubMed, SciELO y textos especializados.
Resultados: Existe una alta intercurrencia con trastornos afectivos y ansiosos y se han identificado algunos factores de riesgo, especialmente mayor vulnerabilidad al estrés, disfunción familiar, sobreprotección parental y limitada mentalización de los sÃntomas fÃsicos (alexitimia), que también perpetuan la sintomatologÃa. Desde la perspectiva etiopatogénica se han invocado hipótesis psicodinámicas, psicosomáticas, traumático-ambientales y biológicas. Los pacientes con TS y TC frecuentemente son mujeres, presentan rasgos más introvertidos de personalidad, más eventos vitales estresantes y défictis ejecutivos. Las convulsiones psicógenas no epilépticas se relacionan con más comorbilidades psiquiátricas y peor pronóstico. Las psicoterapias cognitivo-conductual y la hipnoterapia-psicodinámica combinadas con fármacos inhibidores de la recaptura de serotonina han demostrado ser eficaces en el tratamiento.
Conclusiones: Los TS y TC en poblaciones infanto juveniles se observan en contextos médicos y psiquiátricos. Su reconocimiento es difÃcil debido a su etiologÃa multifactorial, la falta de consenso diagnóstico y la escasa experiencia clÃnica, implicando un verdadero desafÃo terapéutico, por lo que es indispensable realizar futuras investigaciones en este tópico. Su manejo en la atención primaria parece apropiado, pero en casos más complejos es necesaria su derivación al especialista.
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Revista chilena de neuro-psiquiatrÃa
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