Resumen
Objetivo: La depresión es común después de un síndrome coronario agudo (SCA) y tiene efectos adversos sobre el pronóstico. Hay pocas intervenciones basadas en la evidencia para el tratamiento de la depresión en el SCA. Este estudio investigó la eficacia y la seguridad del escitalopram en el tratamiento de trastornos depresivos identificados a las 2-14 semanas después de un episodio confirmado de SCA.
Método: Un total de 217 pacientes con trastornos depresivos según DSM-IV (121 mayores y 96 menores) y SCA fueron asignados al azar para recibir escitalopram en dosis flexibles de 5 a 20 mg / día (n = 108) o placebo (n = 109) durante 24 semanas. El estudio se realizó entre 2007 y 2013. La medida de resultado primario fue la Escala de Clasificación de la Depresión de Hamilton (HDRS). Las medidas de resultado secundarias incluyeron la Escala Montgomery-Asberg para la clasificación de la Depresión (MADRS), el Inventario de Depresión de Beck (BDI), la Escala de Impresión Clínica Global-De Severidad de la Enfermedad (CGI-S), Escala de Evaluación del Funcionamiento Social y Ocupacional (SOFAS) y el Programa 12 para la Evaluación de la Discapacidad de la Organización Mundial de la Salud. Los resultados de seguridad cardiovasculares incluyeron ecocardiografía, electrocardiograma, pruebas de laboratorio, peso corporal y resultados de presión arterial.
Resultados: El escitalopram fue superior al placebo en la reducción de las puntuaciones en la HDRS (diferencia de media = 2,3; p = 0,016, tamaño del efecto = 0,38). El escitalopram también fue superior al placebo en la reducción de síntomas depresivos evaluados por la MADRS, el BDI y la CGI-S y en el aumento del nivel de funcionamiento según la SOFAS. El escitalopram no se asoció con cambios perjudiciales en las medidas de seguridad cardiovascular. Se informó de una mayor frecuencia significativa de mareos en el grupo de escitalopram (P = 0,018), pero no hubo diferencias significativas en cualquier otro evento adverso.
Conclusiones: Estos resultados indican que el escitalopram tiene efectos antidepresivos clínicamente significativos y no hay evidencia sobre una reducción en la seguridad cardiovascular para el trastorno depresivo tras un SCA.
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