La entrevista psiquiátrica de los niños y adolescentes tiene unas particularidades respecto a la entrevista del adulto: -La dependencia de los adultos, por un lado, obliga a realizar parte de la entrevista en presencia de los padres (observación directa de su interacción) y obliga también a complementar información de otras fuentes (profesores, trabajadores sociales…). Así, un buen psiquiatra infantil será aquel que involucre a los padres en la entrevista clínica y solicite información a profesores u otros profesionales implicados en su desarrollo. - La entrevista con el niño a solas comprende una parte verbal y en función de la edad, también se explora a través de otras técnicas como el juego y el dibujo. Así, un buen psiquiatra infantil deberá pasar el tiempo necesario explorando al niño a solas para que él se sienta protagonista de su problema y actor principal del cambio. - Una vez finalizada la evaluación clínica, el psiquiatra infantil deberá comunicar tanto a los padres como al niño su impresión diagnóstica y el plan de tratamiento, con el objetivo claro a tratar. En el caso particular del TDAH, estaremos frente a un buen psiquiatra infantil si éste cuenta con la información de padres y profesores, además de la del niño; para evaluar tanto los síntomas en casa como en el colegio. Su diagnóstico debe ir acompañado de la información suficiente acerca del trastorno, así como de las distintas posibilidades de tratamiento (tanto farmacológico como psicoterápico) que existen. Asimismo, deberá transmitir y orientar a los padres de la necesidad de apoyo en el colegio y la posibilidad de beneficiarse de otro tipo de apoyos a través de las asociaciones de TDAH de su comunidad.
Unidad de Psiquiatría del Niño y Adolescente Departamento de Psiquiatría y Psicología Clínica Clínica Universidad de Navarra