La aplicación de la edad biológica como medida del estado de salud de un individuo ofrece nuevas perspectivas sobre la extensión tanto de la esperanza de vida como de la vida útil.
Si bien se han informado algoritmos que predicen la mortalidad y la mayoría de las morbilidades relacionadas con el envejecimiento, la principal deficiencia ha sido la incapacidad para predecir la demencia.
Presentamos un estudio de cohorte basado en la comunidad de 1930 participantes con una edad media de 72 años y un período de seguimiento de más de 7 años, utilizando dos variantes de un algoritmo fenotípico basado en sangre que excluye (BioAge1) o incluye (BioAge2) cadena ligera del neurofilamento (NfL) como marcador neurodegenerativo. BioAge1 y BioAge2 predicen la demencia igualmente bien, así como la esperanza de vida y la esperanza de vida. Cada aumento de un año en BioAge1 / 2 se asoció con un riesgo elevado del 11% (HR 1, 11; IC del 95%: 1, 08-1, 14) de mortalidad y un riesgo elevado del 7% (HR 1, 07; IC del 95%: 1, 05-1, 09) de las primeras morbilidades. Además, probamos la asociación de microARN con la edad e identificamos 263 microARN significativamente asociados con la edad biológica y cronológica por igual.
Los microARN superiores expresados diferencialmente basados en la edad biológica tenían un nivel de significación más alto que los basados en la edad cronológica, lo que sugiere que la edad biológica captura aspectos de las señales de envejecimiento a nivel epigenético. Concluimos que la edad biológica es un predictor de morbilidad importante relacionada con la edad, incluida la demencia, entre los ancianos sanos.