Antecedentes
La salud mental de los doctorandos ha surgido como un tema de creciente preocupación a nivel internacional, y se han identificado varias variables que parecen estar relacionadas con el estado de su bienestar mental. Sin embargo, hasta el momento, no existen estudios en España que hayan evaluado la salud mental de esta población utilizando instrumentos validados, ...
Antecedentes
La salud mental de los doctorandos ha surgido como un tema de creciente preocupación a nivel internacional, y se han identificado varias variables que parecen estar relacionadas con el estado de su bienestar mental. Sin embargo, hasta el momento, no existen estudios en España que hayan evaluado la salud mental de esta población utilizando instrumentos validados, lo que limita la comprensión y abordaje de este problema en el contexto nacional.
Método
Para abordar esta brecha, se realizó un estudio observacional transversal que evaluó la salud mental de 1. 018 doctorandos en España.
El estudio examinó el impacto de una variedad de factores, incluyendo variables personales, académicas, psicológicas y socioorganizacionales, con el objetivo de identificar los predictores más significativos de la salud mental en esta población. La metodología incluyó instrumentos validados para medir diferentes aspectos del bienestar mental y se empleó una regresión logística binaria para determinar los factores asociados con una salud mental negativa.
Resultados
Los hallazgos revelaron una preocupante prevalencia de problemas de salud mental entre los doctorandos. Entre el 50% y el 60% de los participantes podría estar experimentando algún tipo de trastorno psicológico común, como ansiedad o depresión. Además, un 18, 8% de la muestra manifestó ideación suicida pasiva, indicando la presencia de un problema crítico que requiere intervención. El análisis identificó varios predictores significativos de salud mental negativa. Entre las variables sociodemográficas, se encontró que ser mujer estaba asociado con un mayor riesgo de problemas de salud mental. Respecto a las variables académicas, se observó que un mayor tiempo de permanencia en el programa de doctorado incrementaba la probabilidad de una peor salud mental. Las variables psicológicas también desempeñaron un papel importante, con una menor satisfacción vital, mayor interferencia de las emociones negativas y menor claridad emocional como factores de riesgo. Por último, las variables sociales y organizacionales influyeron considerablemente; un mayor miedo a perder los derechos de matrícula, menor apoyo social y una mayor interferencia del trabajo académico con la vida personal se asociaron con una peor salud mental.
Conclusiones
Los resultados indican que los estudiantes de doctorado en España enfrentan un elevado riesgo de problemas de salud mental, lo que destaca la necesidad urgente de implementar medidas preventivas y de intervención.
Estas medidas deberían centrarse en mejorar el autocuidado y la regulación emocional, fomentar el apoyo social dentro del entorno universitario y reducir la presión relacionada con la pérdida de derechos de matrícula, especialmente en los estudiantes de último año. Al abordar estos factores, se podría mejorar significativamente el bienestar mental de los doctorandos y promover un entorno académico más saludable.
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