Edorta Elizagarate, líder del Servicio de Psiquiatría de la Red de Salud Mental de Álava y presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica (SEPC), resalta que la psiquiatría clínica se está posicionando como una disciplina con gran futuro, reconquistando su importancia y prestigio dentro del sector salud. Esta afirmación se destacó como uno de los hallazgos clave del III Congreso Nacional de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica, evento que se desarrolló en Vitoria del 28 de febrero al 1 de marzo, paralelamente a la XXXII edición del Curso Nacional de Actualización en Psiquiatría. La ciudad de Vitoria fue sede de este importante encuentro, reuniendo a más de 500 especialistas en salud mental para discutir el presente y el porvenir de esta especialidad médica.
Edorta Elizagárate valora muy positivamente el III Congreso Nacional de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica, destacándolo como un momento crucial para avanzar en los objetivos establecidos durante la asamblea anterior. Estos objetivos surgieron de la actividad educativa enfocada en la neuromodulación y el trastorno mental severo, facilitando la realización de convenios y acuerdos con sociedades autonómicas, lo que ha contribuido a mejorar la asistencia psiquiátrica. Como resultado de estas acciones, se está formando la sociedad canaria de psiquiatría, marcando un avance significativo para la especialidad. El presidente de la SEPC subraya la importancia de un trabajo continuado para fortalecer las sociedades autonómicas, el desarrollo de la sociedad y la formación continuada a lo largo del tiempo de la manera más eficaz posible.
Innovación terapéutica fue un tema central en el Congreso, que incluyó más de 50 ponencias, conferencias y talleres sobre avances prometedores en el tratamiento de condiciones como esquizofrenia, depresión, obesidad, y la relación cerebro-intestino, además de explorar nuevas unidades y dispositivos para la patología dual, psicoterapias y psiquiatría penitenciaria. Esta última, según Elizagárate, se encuentra en una situación crítica y representa una demanda creciente y justificada. Destacó además los avances en tratamientos de neuromodulación para la depresión y el trastorno de estrés postraumático, así como las innovadoras terapias psicóticas, que pronostica serán el futuro en el tratamiento de la depresión.
Por otro lado, Elizagárate destaca la creciente saturación y carga de trabajo en la especialidad de psiquiatría, resaltando la importancia de distinguir el sufrimiento asociado a trastornos mentales de la tristeza o malestar psíquico que forma parte de la experiencia humana. Subraya que muchas de las consultas a especialistas son derivadas de un desconocimiento sobre esta diferenciación, lo que genera demandas inapropiadas para la psiquiatría. Además, hace hincapié en el rol clínico de los especialistas, quienes van más allá de la mera prescripción de medicamentos y buscan mejorar la vida de los pacientes mediante un arsenal terapéutico diverso, incluyendo psicoterapia, psicofarmacología y rehabilitación, para alcanzar el máximo bienestar posible.
En cuanto a las perspectivas de futuro de la especialidad, el presidente se muestra optimista, debido a un renovado interés de actores importantes, tanto públicos como privados, en la investigación psiquiátrica. Destaca especialmente el desarrollo de nuevos fármacos y líneas de investigación en neurotransmisión, guías glutamatérgicas o psicodélicos, áreas que habían sido marginadas pero que ahora prometen jugar un rol crucial en el abordaje terapéutico de diversas condiciones mentales.